REE: ¿Cómo alimenta Dios a los pobres?
REE: ¿Cómo alimenta Dios a los pobres?
By Yosef Bitton
agosto 24, 2022
El que tiene más, comparte con el que tiene menos
«Abre/s Tus manos y satisfaces a todas las criaturas de acuerdo a Tu voluntad»
¿QUIÉN SE COME A QUIEN?
Hay un pasuq (versículo) muy conocido en Tehilim, el libro de los Salmos, que decimos todos los días del año, 3 veces por día. Y este pasuq tiene una particularidad: debe ser dicho con kavaná, o sea, reflexionando en lo que estamos diciendo para internalizar su mensaje. En el Salmo 145, Tehilá leDavid (ashré…) el pasuq 16, dice así: «poteaj et yadeja…». La traducción convencional es: «[Tu HaShem] Abres Tus manos y satisfaces a todas las criaturas de acuerdo a Tu voluntad».
La explicación tradicional es que este pasuq habla de «las manos de Dios» –lo cual obviamente es una metáfora — e indica que El Creador «abre permanentemente Sus manos» proveyendo de mil formas diferentes el alimento que todo ser vivo necesita. ¿Y cómo es que HaShem «abre su mano»? En el mundo animal, HaShem ha diseñado un mecanismo milagroso y altamente sofisticado, que los científicos llaman «cadena alimenticia», a través de la cual todos los seres vivos tienen asignado su alimento. Este mecanismo ecológico permite que cada criatura del bosque, de la selva o del mar, tenga qué comer….
ECOLOGÍA HUMANA. ¿QUIÉN LE DA DE COMER A QUIÉN?
Tal como hacen otros seres vivos, también los seres humanos procuramos nuestro alimento consumiendo plantas u otros seres vivos. Pero hay un elemento particular que corresponde exclusivamente a la raza humana: el que tiene comida, o el que tiene más, le da de comer al que no tiene qué comer, o al que tiene menos. Los seres humanos, no solo que no nos comemos unos a otros (literalmente hablando) sino que tenemos la capacidad que ningún otro ser vivo tiene la «solidaridad» y el «altruismo».
Pero, volviendo a nuestro versículo, si bien entendemos que el Todopoderoso estableció con Su infinita sabiduría la cadena alimenticia para que a ningún animal le falte su alimento, ¿cuál es el papel que juega el Creador en la cadena alimenticia humana?
INTERPRETACIÓN LITERAL
Como todos sabemos, la Torá nos permite (o nos exige) múltiples interpretaciones. Hay interpretaciones literales (peshat) e interpretaciones no literales (derash). En este caso voy a presentar una «interpretación» que se ajusta estrictamente al sentido literal de sus palabras y que nos va a proveer la respuesta a nuestro interrogante.
Veamos:
Recomendado por LinkedIn
En hebreo, los verbos en el tiempo presente se dicen de igual manera para la primera, segunda o tercera persona del singular. En hebreo, por ejemplo, «yo escribo», «tu escribes» o «él escribe», se dice de la misma forma: «KOTEB» . En nuestro caso, la primera palabra de nuestro versículo , POTEAJ, se puede leer entonces como la hemos leído anteriormente: «[Tú, HaShem,] abres Tus manos y satisfaces a todas las criaturas, hasta que colmas su voluntad». Pero también, las primeras tres palabras de este versículo se pueden leer de una manera distinta, sin violar su sentido literal: «[HaShem] abre tu mano, y así satisface a todas las criaturas según Su voluntad». En esta segunda lectura, (poteaj, como verbo transitivo ) El Creador abre «nuestras manos», las manos humanas, para saciar el hambre de otros seres humanos. HaShem, el Creador, abre NUESTRAS manos para ayudar a los que no tienen qué comer.
¿CÓMO HACE DIOS PARA ABRIR NUESTRAS MANOS?
La respuesta la encontramos en la Perashá de esta semana, REE. En el capítulo 15:7 la Torá habla de la Mitsvá de Tsedaqá. HaShem nos pide que NO cerremos nuestra mano cuando nuestro hermano nos necesita ( לא תקפוץ את ידך מאחיך האביון). Y en el siguiente pasuq 15:8, la Torá usa unas palabras que es imposible no asociarlas con nuestro versículo en Tehilim. El pasuq 15:8, d…
BENDITOS LOS AMIGOS
Benditos sean los que llegan a nuestra vida en silencio, con pasos suaves para no despertar
nuestros dolores, no despertar nuestros fantasmas, no resucitar nuestros miedos.
Benditos sean los que se dirigen con suavidad y gentileza, hablando el idioma de la paz para no asustar a nuestra alma.
Benditos sean los que tocan nuestro corazón con cariño, nos miran con respeto y nos aceptan enteros con todos nuestros errores e imperfecciones.
Benditos sean los que pudiendo ser cualquier cosa en nuestra vida,
escogen ser generosidad.
Benditos sean esos iluminados
que nos llegan como un ángel, como flor o pajarito, que dan alas a nuestros sueños y que, teniendo la libertad para irse, escogen quedarse a hacer nido.
La mayoría de las veces
llamamos a éstas personas "amigos".