REGULACIÓN DE VEHÍCULOS DE APLICACIÓN Y PLATAFORMA

Las recientes reformas a la Ley Federal del Trabajo están poniendo el foco en la regulación de los vehículos utilizados por aplicaciones de movilidad. Más allá del debate sobre si los conductores de estos vehículos (especialmente motociclistas) deben ser considerados trabajadores, existe una responsabilidad del Gobierno de establecer normas claras de tránsito que fomenten un comportamiento ordenado y seguro en la vía pública. La falta de regulación específica ha derivado en un aumento de accidentes y daños a terceros debido a las maniobras riesgosas de algunos vehículos de plataforma, que circulan entre carriles a alta velocidad y, en ocasiones, no detienen su marcha tras causar daños o lesiones.

El debate en las Cámaras se centra en si existe o no una relación laboral entre las aplicaciones y quienes colaboran con ellas. La Ley Federal del Trabajo, en su Artículo 20, establece que para que exista dicha relación debe haber subordinación, es decir, una obligación del trabajador de acatar órdenes. Sin embargo, en estos casos, el colaborador independiente tiene la libertad de aceptar o rechazar los servicios según su voluntad, lo que implica que no hay una obligación de obediencia al “patrón” de la aplicación. Lo mismo podría aplicarse en temas de Seguridad Social, que requeriría un capítulo especial para adaptarse a estas modalidades.

Frente a esta situación, surge la pregunta: ¿Quién protege a los ciudadanos de la falta de regulación y supervisión adecuada de estos vehículos? La creciente problemática de accidentes y desorden en la vía pública exige respuestas efectivas, tanto en la regulación de tránsito como en la protección de derechos y responsabilidades de todos los involucrados.

Nota: Este texto no constituye una crítica legal, sino una reflexión e invitación al diálogo sobre temas de interés común y seguridad en las vías públicas.