No responder es una respuesta

La pregunta mas frecuente y repetitiva que me hago como mediador es: ¿Le respondo el mail? Esta editorial la escribo para mi, si algo te es útil, me parece fantástico. Me hago esta pregunta los fines de semana, durante mi trabajo, durante mis audiencias, durante una charla, una reunión de amigos, etc. Un mail de alguien enojado. Un mail con una linda noticia. Un mail de alguien que no conozco. Etc. Esta editorial será la Parte 2 a mi primera parte que escribí en febrero de este 2024.

En esa editorial de febrero escribí sobre los 3 problemas mas frecuentes a la hora de responder mails. Primero el multitasking, segundo mi estado emocional y tercero la administración del tiempo. Seguramente hay mas, pero yo escribí sobre esos.

También escribí 4 tips para mejorar la tarea. Pero hoy te invito a que juntos hagamos doble click en dos direcciones qué me pasa a mi por un lado y por otro lado que le pasa al otro cuando no respondo un mail.

¿Qué cosas me pasan a mi cuando no respondo?

1. Cuando leo el mail pero no respondo, algo ya comienza a ocupar un lugar en mi cabeza. Comienzo a tener una respuesta en elaboración y al no poder despacharla, genera un de trabajo en forma de bucle cognitivo. Se activan diversas áreas de mi cerebro relacionadas con la comprensión y planificación de la respuesta. El no enviar mi respuesta genera que mi cerebro empiece a procesar la información y generar una posible respuesta. Este procesamiento incompleto queda en tu memoria de trabajo, ocupando espacio mental y provocando esa sensación de tarea pendiente.
2. Me genera la preocupación de olvidar responderlo después. Todavía tengo que seguir aprendiendo a marcar como "no leído" o quizás simplemente no abrir el Gmail cuando no voy a tener tiempo para responder. El acto de marcar un correo como "no leído" es como una especie de hackeo cognitivo que me permite transferir la carga de recordar esa tarea a un sistema externo, lo que me libera espacio en tu memoria de trabajo..

¿Qué le pasa al otro cuando yo no respondo?

1. Interpreta el silencio. Mi silencio puede generar una sensación de incertidumbre. Desde la perspectiva del otro, la falta de respuesta también puede pensarse como desinterés, y en la mejor de las opciones, el otro puede pensar que yo simplemente, estoy ocupado. ¿Estará ocupado? ¿Le habrá llegado el correo? ¿Le interesa?
2. Construye hipótesis. La neurociencia cognitiva explica que el cerebro está diseñado para encontrar patrones y hacer predicciones. Ante la falta de respuesta, el cerebro intentará a toda costa explicar el silencio creando escenarios (que pueden ser correctos o incorrectos). Estas hipótesis pueden variar y es aquí donde entra en juego el sesgo de negatividad, que tiende a hacernos pensar lo peor en situaciones inciertas, activando nuestras respuestas emocionales.

El acto de no responder tiene implicaciones para todos.

Mientras que para mi genera una carga cognitiva adicional y preocupación por el seguimiento, para el otro puede causar incertidumbre, ansiedad e interpretaciones erróneas.

Esta diferencia de experiencia se relaciona con cómo nuestros cerebros procesan la información y las expectativas en la comunicación. Poner en agenda éste enfoque me permite profundizar en cómo mi cerebro gestiona el no responder.

La saturación de información, la velocidad y demanda de gestión, sumado a los imprevistos que toda organización laboral contiene, provocan niebla mental, si no tengo un plan. Aquí podas encontrar algo que escribí en junio sobre eso.

Frente a la duda, no respondo.

Una vez leído el mail, la información se almacena en tu cerebro como una tarea pendiente. Ese concepto tiene un paralelo muy interesante en la manera en que plataformas como Netflix y otras de streaming capturan nuestra atención, explotando el mismo principio que subyace en la sensación de "tarea pendiente".

Una vez que lees un correo pero no respondes, esa tarea queda abierta en tu mente, ocupando espacio en tu memoria de trabajo, lo que crea la necesidad de resolverla. De forma similar, Netflix utiliza este efecto para mantenernos enganchados con las series. Esto se debe a que nuestro cerebro busca siempre cerrar ciclos: cuando está por terminar un capítulo de una serie, pasa algo tremendo con el protagonista que no concluye. Entonces, nuestro cerebro registra esa historia como inconclusa y activa una necesidad de completarla. Esto genera un deseo casi automático de reproducir el siguiente episodio para obtener una resolución.

Espero que hoy, todos entendamos, lo que Netflix entendió perfecto.

Lo interesante es que este diseño no es solo una estrategia narrativa, sino también una explotación del funcionamiento natural de nuestro cerebro para enganchar nuestra atención y, en última instancia, fomentar el consumo continuado de contenido. En esencia, Netflix deja "tareas pendientes" en nuestra mente, que nos empujan a seguir viendo, tal como un correo sin responder nos genera una carga cognitiva.

Hablando de no responder un mail, no quiero olvidarme de citar a Tristan Harris , quien fue diseñador ético en Google y estuvo involucrado en el diseño de productos como Gmail, ha sido una voz destacada en la crítica de cómo las grandes plataformas tecnológicas, incluidas redes sociales y servicios de correo, manipulan nuestra atención para hacernos pasar más tiempo en sus productos. En el documental "The Social Dilemma" (2020), Harris explica cómo, desde su experiencia en Silicon Valley, se dio cuenta de que los diseñadores de estas plataformas no solo buscaban hacer productos eficientes, sino que diseñaban deliberadamente interfaces y funcionalidades para captar y retener la atención de los usuarios durante el mayor tiempo posible.

Motivado por este tema, escribí mi editorial titulada Hazlo simple.

Es clave el auto-cuidado y no estar pendiente del otro. No podemos ayudar a todo el mundo. No podemos dejar a todos contentos. Simplemente no podemos. Quizás a vos no te pasa, pero a veces cuando respondo un mail, tengo la sensación de que mi mail será lo que necesita la otra persona para gestionar su conflicto, trabajar ese setup es clave.

Te regalo hoy mis 3 ideas trabajar eso que me pasa cuando me nace la duda de responder un mail.

1. Aun durante la semana laboral, no soy un médico de terapia intensiva. No responder de inmediato.
2. Debo proteger mis recursos cognitivos. Estar consciente del coste cognitivo del cambio de tareas. Los estudios sobre cambio de contexto (task-switching) muestran que cambiar de una tarea a otra interrumpe el enfoque y disminuye la eficiencia cognitiva.
3. Aun cuando sepa qué responder, siempre será mejor mi respuesta y mejor para el otro una pausa.

El domingo pasado en la contratapa del Suplemento Bienestar apareció un titular que me llamó la atención. El poder del silencio. La bajada del título decía: "Apagar el afuera para escuchar la voz interior que ayuda a sanar". Los que me conocen, saben que soy cristiano, lo cual podría agregarle que para mi, el afuera es también una oportunidad escuchar lo que Dios tiene para mi.

En honor al Día Mundial del Corazón, recordemos juntos una vez mas que no todo requiere una respuesta inmediata, que lo importante es cuidar nuestro corazón.

Quiero dedicarle ésta editorial a un amigo que escribe muy buenos mails, de esos que tienen punto y aparte, y que hoy cumple años. Fernando Loureiro.