Sabes quién es tu Cliente ideal?
Si te gusta el tema del emprendimiento seguro habrás escuchado con anterioridad que es importante definir la audiencia a la que va dirigido el producto/servicio, ya que este es uno de lo pilares del éxito del mismo.
Si quieres dedicarte a la repostería no vas a ir a un gimnasio a ofrecer tus postres, por ejemplo, a menos que estos sean saludables, libres de azúcar, bajos en calorías, y demás.
El target al que te diriges juega un papel muy importante, puedes pensar que tu producto o servicio es para todos, pero siempre habrá un tipo de cliente ideal que es como nuestro favorito por sus características.
El cliente ideal es aquel que está contento con tu marca ya que en ella consigue la satisfacción idónea a su necesidad específica, las transacciones con ellos son realizadas sin problemas, es decir que pagan a tiempo y sus exigencias están dentro de lo razonable.
Ellos son los más importantes debido a que representan la mayoría de tus ingresos y no causan problemas.
Puntos clave para definir tu Cliente ideal:
1.- Piensa en lo que ofreces
Si ya sabes de qué es o será tu negocio piensa en cuáles personas podrían beneficiarse totalmente de tus productos/servicios, a quienes les vas a resolver la vida al solucionar su problema o necesidad.
Por ejemplo, si quieres ofrecer un servicio de transporte escolar tus clientes ideales serían los padres de familia, eso como primer elemento y a partir de ahí vas construyendo sus personalidades con más información que se te pueda ocurrir sobre ellos: padres y madres de familia que no tienen tiempo para llevar a sus hijos a la escuela porque están en su etapa profesional más importante, están dispuestos a pagar por seguridad y comodidad tanto para ellos como sus hijos y así sucesivamente vas añadiendo características para hacer lo más certera posible tu descripción.
2.- Añade características
Con el punto anterior habrás descrito subjetivamente a tu audiencia con sus gustos, intereses, perfil psicológico, etc. Ahora es necesario que añadas información específica como el rango de edades, de ingresos, zona geográfica y sexo.
Mientras más características añadas al perfil, más real será la persona y podrás acercarte más a lo que desean y así suplir esa necesidad.
Cuando tienes bien definido el perfil de tu cliente ideal, debes tratar de que tus clientes cumplan con ese esquema, ya que si no lo hacen podría hacer que tus procesos se hagan lentos.
Debes llevar un control de clientes que encajan en ese perfil, por que puede que no se sienta identificado con tu producto/servicio.
Deberás hacer un cambio de estrategias o de comunicación, tal vez no te estás comunicando bien o tu servicio está fallando en procesos.
3.- Observación
Si todavía no tienes muy claro el perfil de la audiencia a la cual necesitas enfocarte, puedes ponerlo en práctica. Fíjate en lo que hacen otros negocios similares al que tú quieres tener, estudia cuál es su tipo de público y haz los ajustes que consideres necesarios.
No se trata de realizar una copia exacta, sino de buscar referencias e inspiración que te ayuden en la decisión y construcción del perfil de tu cliente ideal.
No solamente esto, sino que podrás recopilar ideas también de gestión de los clientes que realiza tu competencia, cuáles les funcionan y cuáles necesitan mejora.
Trata de ver lo que se está haciendo en tu industria y hazlo mejor.
4.- Investigar
Si has investigado a tu competencia directa tanto a otros negocios pertenecientes a tu mismo rubro aparte de realizar todos los pasos anteriores, pero aun no te sientes contento con el perfil que realizaste de tu cliente ideal y crees que puede ser mejorado, está muy bien.
No tienes que conformarte en este punto, si crees que necesita mejora, hazlo mejor, ya que cuando te diriges a la audiencia correctatu emprendimiento tiene mayores posibilidades de éxito.
Para tener una idea más certera de tu cliente ideal, puedes realizar un estudio de mercado. Existen agencias dedicados a este tema y es una buena manera de saber a qué tipo de público le serían más útiles tus productos/servicios, sus reacciones ante el mismo.
Esto incluye encuestas, investigaciones de campo, muestreo, experimentación y otros.
Por supuesto esto tiene un costo, pero los resultados serán muy importantes a la hora de tomar decisiones.