Salud mental en el trabajo: La clave para una productividad sostenible y un ambiente laboral saludable

Un entorno laboral sano y seguro es un derecho para todos los trabajadores, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Ya que trabajo decente proporciona un medio de vida, sentido de confianza, propósito y logro, además de ser una oportunidad para las relaciones positivas.

A su vez, un ambiente de trabajo agradable puede mejorar la productividad y el rendimiento, ya que a nivel mundial, se estima que cada año se pierden 12 000 millones de días de trabajo debido a la depresión y la ansiedad, a un costo de US$ 1 billón por año en pérdida de productividad.

¿Cuáles son los riesgos psicosociales en el trabajo? Algunas de ellos pueden incluir:

• Cargas o ritmo de trabajo excesivos.
• Horarios excesivamente prolongados.
• Cultura institucional que permite los comportamientos negativos.
• Inseguridad laboral, remuneración inadecuada o escasa inversión en el desarrollo profesional.

Estos riesgos psicosociales pueden encontrarse en todos los sectores de trabajo, pero algunos trabajadores tienen más probabilidades de estar expuestos a esos riesgos que otros, por la labor que realizan o los entornos en que se desempeñan y la manera de hacerlo.

Para prevenir los problemas de salud mental se deben gestionar los riesgos psicosociales en el lugar de trabajo. La OMS recomienda que los empleadores lo hagan mediante la implementación de intervenciones institucionales directamente dirigidas a las condiciones y los entornos de trabajo, entre esas intervenciones figuran la facilitación de modalidades de trabajo flexibles con horarios adaptables y posibilidad de realizar trabajo remoto.

A manera de protección y promoción de la salud mental, también se pueden implementar estrategias para capacitar a los líderes y administradores para que reconozcan y respondan a las dificultades de las personas con angustia emocional a quienes supervisan, además de que desarrollen competencias interpersonales como la comunicación abierta y la escucha activa y comprendan mejor de qué manera los factores estresantes en el trabajo pueden afectar a la salud mental, y cómo pueden gestionarlos.

Un ejemplo de estas estrategias fueron los programas realizados durante la pandemia por COVID-19, en donde se encontró que los líderes eran la piedra angular en el sentido de pertenencia a una organización. Las empresas detectaron estrés laboral y ansiedad durante la pandemia, por lo que se reforzó la formación de líderes empáticos y se apostó por una campaña de comunicación y bienestar holístico conformado por seis ejes: equilibrio de vida y trabajo, desarrollo profesional y aprendizaje continuo, salud financiera, inclusión y diversidad, salud física, emocional y mental, y responsabilidad propia del bienestar (Whirlpool Latam Norte).

Algunas de las medidas que se pueden implementar de forma personal para empezar a tomar responsabilidad propia del bienestar pueden incluir:

• Reconocer la necesidad y tomar tiempos de descanso.
• Comer de forma nutritiva en horarios adecuados.
• Tomarse "breaks" de la tecnología.
• Realizar actividades de relajación y autoconocimiento.
• Acudir a terapia psicológica, no sólo en casos de crisis, sino también como oportunidad de autoconocimiento y mejora de los recursos personales.

¿Qué otras actividades consideras importante para tomar en cuenta en la salud mental en el trabajo?