¿Se acaba de quedar sin trabajo?

El primer paso: aterrizar y prepararse para lo peor esperando que suceda lo mejor!

Cuando hace algunos meses me encontraba por primera vez "en la calle" como se dice en lenguaje coloquial, subestimé esta valiosa oportunidad de aprendizaje. Adopté la actitud algo arrogante (que después de todo algo le sirvió a mi autoestima) de: "Si no quieren más de mi, estoy convencido de que alguien más (otra empresa) lo hará..." A la base, no esta mal pensar de este modo. Pero el primer peligro que existe, cuando te quedas desempleado, es subestimar el mercado laboral hoy en día.

Hace poco más de un mes, logré ubicarme en una posición retadora dentro de un sector de negocio nuevo y apasionante. Escribí un breve "post" en mi perfil de Linkedin, dando unos consejos sencillos dirigidos a quienes atraviesan una situación parecida....y la respuesta fue algo abrumadora. Cientos de mensajes, correos y chats animándome a escribir más o buscando algún consejo, orientación o queriendo ser escuchados. Dado que recientemente me cambié de país y domicilio, y eso sumado a los compromisos del nuevo reto profesional...ha sido complicado darme tiempo para responder a todos. Al fin hoy pude terminar de leer todos los mensajes. Por esa razón me decidí a escribir y compartir algunos aprendizajes más.

Al ser sociólogo de profesión, siempre creí mucho más en las explicaciones racionales y lógicas. Además por la oportunidad de trabajar desde hace 10 años en Recursos Humanos, pensaba que los aspectos emocionales y espirituales solían crear barreras para comunicarse abiertamente en ambientes diversos y multiculturales. No obstante, ahora más que nunca, estoy convencido de que un balance es necesario para poder desarrollar resiliencia y salir fortalecido de cualquier proceso, por duro o difícil que este sea. Ahora bien, no crea apreciado lector que me voy a dedicar a escribir libros de "autoayuda"...no es para tanto! pero si quiero en este sencillo articulo compartir mi primer aprendizaje, tal vez el más importante, el que me ayudó a navegar sin hundirme en las aguas tormentosas del desempleo.

Tampoco me he inventado el agua tibia, quiero hablarles de la curva del cambio, no es algo que inventé. Pero que poderosa herramienta de aprendizaje! Identifique y estudie en que momento de esta curva Ud se encuentra ahora.

El primer gran paso es comprender este cambio: ¿Qué pérdidas (status, flujo de dinero, etc) debe enfrentar? Cómo lo van a afrontar como familia, como pareja? Qué mensaje quiere posicionar en sus hijos, vecinos? En mi caso, empecé por reducir no uno, ni dos...sino casi todos los costos fijos: arriendo (me mudé a un lugar más barato), tv por cable, internet, salidas a restaurantes, a conciertos, el paseador para mis perros, etc. Es muy importante estar preparado para el peor escenario pero siempre esperando lo mejor. Desde la primera reunión que tenga con headhunters, consulte sobre el tiempo que ellos estiman demorará en encontrar un nuevo empleo. Hable con personas de su localidad, excolegas, amigos que hayan atravesado una situación parecida y pregunte cuanto tiempo les tomó volverse a emplear...prepárese basado en esas conversaciones.

Es una cuestión sencilla pero marcará una diferencia significativa en lo posterior. Sepa que la ansiedad se nota, y se nota mucho más cuando no sólo lleva meses desempleado sino que además lleva en sus hombros la presión de las cuentas, las tarjetas de crédito y quien sabe cuanta cosa más. La ansiedad es una muy mala compañera para sus entrevistas, trate de apartar los factores que hagan que ella aparezca en su vida.

De las consultas que personalmente realicé, concluí que definitivamente la forma más rápida de emplearse era buscando un puesto/rol similar en la misma industria o sector. Sin embargo, hoy tengo trabajo en un rol similar (aunque de un nivel jerárquico mas alto) en una industria muy diferente. La mayoría de "expertos" me decían que ese uno de los caminos más difíciles y largos, estimaban un tiempo de transición (búsqueda de empleo) de en promedio 12 meses para conseguir ese tipo de oportunidad...al final "solo" me tomó seis meses. No es que hubiera escogido ese camino y excluido los otros, al contrario, amplié mi entorno de búsqueda, activé mis contactos y lancé anzuelos allí donde me interesaba pescar los peces más gordos.

Pero más adelante, en otro artículo, escribiré en detalle otra parte del proceso. Quiero hoy reforzar el primer paso: aterrizar a la nueva realidad, aceptar el cambio reconciliándose con ese pasado reciente de su vida. Esto es fundamental, y en mi experiencia, quienes evitan enfrentar la nueva realidad desde el primer momento solo terminan postergando una tarea que más adelante tendrán que resolver. Si no hay forma de escapar, mejor resolverla cuanto antes.