Si no tuvieras que trabajar nunca más...
Adelaida Abruñedo
Como coach personal y familiar en 2Positivekids te acompaño para que te conviertas en la gran INFLUENCER de tus hijos. Que eduques con responsabilidad y consciencia desde el respeto y con respeto, disfrutando del camino
El otro día tuve la ocasión de participar en una dinámica cuyo propósito era conocernos un poco más. Había una serie de preguntas pero la que me llamó la atención, sobre todo por las respuestas que se dieron fue la siguiente: "Si tuvieras mucho dinero y no tuvieras que trabajar, ¿a qué te dedicarías?"
Me resultó curioso que más de dos tercios de las personas entrevistadas tuvieran respuestas tales como "pasar más tiempo con mis hijos", "hacer más deporte", "disfrutar más de la familia" "estudiar y aprender cosas nuevas"...
En los talleres formativos de Inteligencia emocional y empoderamiento que imparto también lanzo esta pregunta: "¿Qué cosas son las que te recargan de energía?":
" Leer, escuchar música, ver una serie, un abrazo, los besos, bailar, ir al gimnasio, dormir, correr, salir a pasear, tomar un café, quedar con amigos, unas cañas, el aperitivo del domingo, el chocolate, el silencio, la soledad, los amigos, meditar, jugar con mis hijos..."
Todas estas cosas, las tenemos al alcance de nuestras manos y sin embargo no las ponemos en práctica. ¿Qué nos impide dedicar un poco de nuestro tiempo a esas cosas que nos recargan de energía? Principalmente considero que uno de los motivos que nos impiden hacerlo es que no priorizamos nuestro bienestar, nuestra salud mental y nuestras necesidades psicológicas porque no las consideramos tan importantes y sin embargo se ha demostrado científicamente que dedicarnos tiempo a nosotros mismos y a las cosas que nos recargan las pilas, nos hacen más eficientes, más proactivos, más resolutivos, más asertivos, más confiados y un montón de cosas más...
Continuamente estamos buscando el momento a tener más dinero, más tiempo, más estabilidad, más independencia, postergando así una felicidad que debería formar parte del viaje y no tanto considerarlo la meta o el destino.
La pregunta que lanzo al aire es ¿en qué momento de nuestra vida, hemos dejado de disfrutar del camino? Porque hubo un tiempo en que sí lo hicimos... ¿dónde está ese punto de inflexión? ¿Lo tienes localizado? ¿Qué está al alcance de tu mano que tu puedas hacer para que vuelvas a vivir en lugar de sobrevivir?
Adelaida @2PositiveKids
Technical Lead en BBVA
5 años¡Cuanta razón! Leo este artículo justo ahora que acabo de llegar a casa de correr. Ya he recargado mis pilas de felicidad hoy 😉. Pero leerlo ayuda para que no se nos olvide.
Jefa de Economía
5 añosCuanta razón! El día a día nos come... 😢 y nos nubla la vista de las coas verdaderamente importantes. Gracias por estas reflexiones que nos ayudan recordar a qué hemos venido...