Silicon Valley, el territorio que define para el mundo la cultura del emprendimiento

Silicon Valley es una forma de pensar. Si bien cuando llegas no percibes grandes diferencias respecto a otras áreas de Estados Unidos, conforme te adentras en la realidad de la zona te das cuenta de que, efectivamente, es otro universo. Y lo es por el tipo de ecosistema de innovación, talento, desarrollo tecnológico y emprendedurismo que han creado. Confluyen en el valle una serie de factores que lo convierten en un referente y un ejemplo único en el mundo.

La integración de la universidad dentro de este ecosistema singular es absoluta. Stanford University, es uno de los principales referentes. Con una historia fundacional admirable y entrañable a partes iguales, y un prestigio indiscutible, se ha convertido en una fuente de talento espectacular. Un vivero de creatividad y startups donde el 90% del profesorado es extranjero y donde se aprende entre una enorme diversidad de culturas, pensamientos, disciplinas y enfoques que, además, se replica en cualquiera de las compañías ubicadas en el valle.

Las ideas se conciben, desde el minuto uno, con una visión de mercado global. No se hacen análisis ni estudios de ámbito regional o estatal, se da por hecho que el mercado es el mundo sin contemplar otra opción para la proyección de un negocio.

Emprendedores y ejecutivos de Silicon Valley atribuyen parte de su éxito a una actitud mucho más colaborativa y abierta. Se ha creado una comunidad que se ayuda y comparte entre sí y donde, además, fallar está permitido. El fracaso no penaliza al emprendedor. Se da por hecho que vas a fallar varias veces antes de lograr el éxito, porque necesitas de ese aprendizaje para obtener la experiencia que te hará triunfar.

Hay un interés real en conocer qué haces, cuál es tu área de conocimiento y qué puedes aportar. Todos están abiertos a hablar con todos y cuando digo esto, incluyo desde el joven emprendedor que arranca con su primera o tercera startup, al CEO de una gran compañía o los principales inversores de Venture Capital. Las jerarquías se disuelven cuando se trata de networking. Se habla sin complejos de la idea, se testea con todas las personas posibles, y hay una predisposición general por sumar, por contribuir a la idea o al proyecto.   

Sabemos que el ecosistema Silicon Valley es difícilmente replicable en España o en Europa. Sin embargo, hay aprendizajes muy relevantes que nos traemos todos los componentes de esta misión empresarial organizada, de forma exquisita, por Fundación Lab:

• En primer lugar, hemos tomado conciencia de la fuerza que tienen las Universidades dentro de un ecosistema como foco de atracción y creación de emprendimiento, innovación y talento, ya no solo de alumnado sino también con profesorado que enriquezca. Es imprescindible mantener un apoyo y colaboración cercana tanto desde el ámbito público como privado.
• En segundo lugar, hay que trabajar por crear hubs que sumen fuerzas, que busque y fomente la especialización por regiones. En lugar de competir y replicar, consolidar áreas de especialización como pueda ser Málaga, A Coruña o la Comunidad Valenciana.
• Promover y facilitar la creación de un sistema de financiación no bancario, con inversión privada Venture Capital, que acompañe y apoye a las startups en todas las fases de crecimiento y que esté al alcance de los emprendedores.
• Y fundamental, considerar la Inteligencia Artificial Generativa (Gen IA) como factor clave para la transformación de la sociedad. España tiene una gran oportunidad porque ha dado los pasos adecuados para estar a la vanguardia y trabajar para aportar un valor real en el desarrollo, regulación y aplicación de la Gen IA. 

Tras esta reflexión, puede parecer que Europa está por detrás, de una forma casi inalcanzable, del ecosistema emprendedor de Silicon Valley. Sin embargo, según nos han transmitido a lo largo del viaje, Europa es referente en regulación para EEUU. El país americano valora enormemente nuestra cultura legisladora, que marca el camino que posteriormente se aplicará en su territorio. Hay un mayor interés por proteger el bienestar del ciudadano, incluso frenando iniciativas si no está claro cómo pueden afectar. Su reto es cumplir con la regulación europea, ya que no pueden plantear una proyección global de sus proyectos sin tener en cuenta los términos que se definen desde Europa.

Una oportunidad magnifica para aprender de un territorio líder en emprendimiento, innovación, tecnología e investigación.