Técnicas para manejar tu tiempo y mejorar tu productividad

Aplicables a varios aspectos de la vida, estos métodos para clasificar tareas te ayudaran a encontrar tus prioridades, organizarte mejor y por lo tanto obtener mejores resultados. Checa nuestras maneras favoritas de organizarnos.

Técnica Pomodoro:

Sugiere intercalar estrictamente periodos de trabajo con periodos de descanso, tradicionalemente 25 minutos de trabajo son seguidos por 5 minutos de descanso.

¿Cómo hacerlo?

Pon un temporizador por 25 minutos y dedícate totalmente a la tarea que tienes en frente. Trata de no parar y evita interrupciones escogiendo un lugar de trabajo aislado.

Durante tus 5 minutos de descanso puedes hacer lo que quieras, levantarte, estirarte, comer algo o distraerte con algo no relacionado al trabajo.

Se recomienda repetir el ciclo cuatro veces y después tomar un descanso más largo de entre 15 y 30 minutos. Puedes repetir las veces que quieras.

Nos gusta usar esta técnica cuando tenemos que escribir o estamos trabajando un proyecto más grande. Hay vídeos en Youtube que puedes encontrar con música y temporizador ya incluidos con temáticas como Harry Potter, bosque o biblioteca.

Eisenhower Matrix:

Sugiere priorizar tareas que son más urgentes e importantes, dividiéndolas en cuadrantes.

¿Cómo hacerlo?

Separa tus tareas en estas cuatro categorías:

Cuadrante 1: Urgente e importante

Tareas que tienes que hacer inmediatamente y tienen consecuencias graves si no son completadas. Ej. crisis, tareas con fechas límites cercanas, problemas de salud.

Cuadrante 2: No urgente pero importante

Tareas a largo plazo, que no requieren atención inmediata. Evita que se vuelvan urgentes trabajándolas de a poco. Ej. planear estrategias, construir relaciones, desarrollar un skill, hacer ejercicio.

Cuadrante 3: Urgente pero no importante

Tareas que requieren atención inmediata pero no son cruciales para lograr resultados significativos, generalmente se pueden delegar. Ej. reuniones no esenciales, tareas administrativas de rutina.

Cuadrante 4: No urgente y no importante

Tareas que no contribuyen de manera significativa a tus metas y hasta pueden ser consideradas distracciones. Ej. uso excesivo de redes sociales, actividades triviales.

Para que esta estrategia funciones debes revisar tu lista de tareas constantemente para asegurarte de que reflejan tus prioridades actuales.

Esta técnica nos gusta para organizar toda nuestra agenda y poder dividir nuestra semana de una manera que nos hace sentir bien.

Ley 80/20:

Sugiere que el 80% de los resultados vienen del 20% de los esfuerzos.

¿Como hacerlo?

Identifica las tareas con mayor valor, las que contribuyan más a tus metas y dedícales más tiempo y recursos. Las actividades que te sobren son de menor importancia y por lo tanto deberán ser delegadas o eliminadas completamente de tu lista.

A la hora de clasificar, debes tomar en cuenta tus fortalezas y solo asignarte tareas que se alineen con estas para poder ser más eficiente. Aunque te cueste perder el control, es importante pedir ayuda externa a expertos o asistentes para que las tareas que no están dentro de tus prioridades o habilidades puedan ser completadas.

La idea es concentrarte en el 20% de tus tareas que generen el 80% de tus resultados.

Nos gusta utilizar esta técnica en conjunción con Eisenhower o una agenda normal para organizar todo lo que tenemos que hacer a largo plazo.

Si piensas que el espacio donde trabajas afecta tus disposición tanto como tu organización probablemente tengas razón. En HAAB, nuestros miembros tienen acceso exclusivo a pisos enteros, estudios y salas de juntas para agilizar su productividad. Conoce las membresías de un club dedicado tu bienestar profesional, social y mental aquí:

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