Talento que suma.

Todos los días me siento a ver una cantidad increíble de personas y hablar sobre lo que han hecho con sus vidas o al menos en el ámbito laboral, es increíble la cantidad de energía que la mayoría de personas invierten en hacer sus sueños realidad, al conocerlos cada uno tiene una increíble historia que contar, ¡en verdad que la gente es fantástica!, por unos breves momentos cuando realizo una entrevista como la parte del proceso de reclutamiento y selección no veo sólo un proceso, más bien lo veo como una plática entre dos extraños que pueden hablar con toda apertura y confianza de poder decir cosas súper importantes que ocurren en la vida.

Algunos tienen historias tristes que conmueven al alma, algunos son historias graciosas, algunas inspiradoras pero el fin último de lo que quiero ejemplificar es que cada persona tiene una motivación y no hay nadie que no trabaje por estar bien y por alcanzar esa ilusión, cuando al fin dos historias se conectan nace una nueva realidad dentro de la empresa porque ha cruzado la puerta y ahora puede influir en la vida de todos al rededor, creando incluso lazos fuera del trabajo, sean amistades, compadrazgos, noviazgos y demás. Día tras día muestran un poco más de ellos y comienzan a abrirse a la comunicación hasta que ya son parte del ambiente y no sólo eso. sino que también producen mejoras, también proponen y también se equivocan.

Proyectos que antes no se dimensionaban comienzan a ser una realidad, el lugar marcha como un engrane perfecto, pero dentro de las diversas razones que hay, todo ser humano disfruta alcanzar un logro y en el caso de quienes quieren retarse profesionalmente estarán inquietos por crecer y hacer más, porque si eso hacen en sus trabajos en sus vidas privadas tienen el doble de objetivos por realizarse sean de la índole que sea, le ocupan parte de su tiempo y motivación de vida.

Generalmente quienes tienen más talento son quienes menos escuchados son en una empresa, al menos eso hasta que tú escuches a la gente que tienes alrededor y te atrevas a conocer sus vidas y no los veas como una actividad más a realizarse o un subordinado más, esa forma de pensar aún continuará mientras el ser humano tenga "ego", pero si quieres mejorar la vida alrededor de ti puedes atreverte a hablar y ayudar en lo que se pueda, he escuchado bastante el dicho "al trabajo no vengo a hacer amigos", una vez alguien me lo dijo y tuve que contestarle que eso era una lástima y es triste ir a un lugar donde no vayas a hacer amigos, porque al menos yo al trabajo vine a hacer amigos con quienes trabajar por los mismos objetivos, pero lamentablemente habrá a quienes no les agrade.

Los mejores ambientes de trabajo es donde sientes la confianza de ser tú mismo, ya que a nadie le gusta fingir que tiene trastorno de personalidad múltiple y con cada persona ser diferente, lo mejor que una persona en recursos humanos puede hacer es darle esa chispa de humanidad que los sistemas a veces no adaptan, todos se sienten mejor trabajando siendo quienes son, teniendo el tipo de comodidad que requieren, hay incluso quienes si disfrutan los clásicos sistemas rígidos pero habrá quienes prefieren trabajar por objetivos, por proyectos, por horarios y por muchas cosas más que todos los días escuchamos a la hora de la comida de los compañeros con un "ojala hubiera..." tendría mucho impacto escucharlos y hacerlo realidad dentro del marco de utilidad, costo y beneficio.

Agradezco a quienes han parado por la sala de mi oficina y me han contado sus planes, parte de su vida y que si hoy estemos o no trabajando en el mismo equipo como les digo siempre, les deseo éxito en su camino.