Dirección de coordinación de proyectos de transformación digital

Del mismo modo que requerimos urgente una solución al CORONAVIRUS, necesitamos transformar digitalmente nuestras organizaciones, porque ni todos los millennials del mundo podrán mover toda la economía ni crear todos los puestos de trabajo que se necesitan.

… son tiempos de transformación…pero no podemos confundir coyuntura con situación en régimen.

En el apuro de resolver, dada la pandemia del CORONAVIRUS, las empresas están enviando a sus trabajadores a sus casas e intentando rápidamente el “teletrabajo” sin reflexión previa.

A partir de hoy, me resulta fácil de suponer, el comienzo de pruebas forzadas de trabajo remoto para muchos profesionales a lo largo del planeta.

A partir de hoy las empresas nuevamente lo apostaran todo a “lo tecnológico”, creerán que con eso basta y caerán en la trampa de conceptos de “transformación digital” ya fracasados y pensarán que a se transformaron.

Hay mejores opciones disponibles en este momento aciago, pero se debe contemplar más situaciones que la instalación de una oficina en casa de cada profesional. Se puede contemplar la urgencia como oportunidad de gatillar procesos nuevos y permanentes en el tiempo. De llevar a cabo transformación digitales y culturales, más profundas y largamente esperadas.

El problema que observo, es que en el corto plazo, se les pedirá a los profesionales que trabajen desde sus hogares, para seguir haciendo más de lo mismo, sin aprovechar esta coyuntura, forzada por la irrupción de una enfermedad, para cuestionar profundamente los procesos administrativos y de negocios que se ejecutan.

Entonces, irrumpirán con fuerza en el entorno laboral, reuniones por ZOOM o hangouts, acceso a sistemas, compartir documentos, seguramente disponibilidad de tecnología Cloud, etc. Lo llamarán transformación digital, pero no es.

Siento olvido del cliente, poca preocupación por la calidad y cualidad de las relaciones, el cliente al igual que nuestros colaboradores, esperarán a que alguien en algún momento los atienda y entienda.

Los que queremos impulsar una transformación digital verdadera, tenemos la posibilidad de aprovechar el momento para cuestionar los modelos y procesos en los que estamos inmersos y cambiarlos. También, puede ser una gran oportunidad para sacar lo superfluo y enfocarnos en el logro de la satisfacción del cliente de formas nuevas.

Tengo esperanza que a las personas con mayor resistencia a “lo digital” les corresponda realizar trabajo remoto, y a partir de su propia experiencia, visualicen con mayor facilidad lo positivo de las propuestas de cambio, que nos trae una transformación digital verdadera.

Nuestra esperanza es que, frente a esta nueva realidad experimentada por todos, generemos todos juntos: los que son proclives a los cambios y los que son resistentes, instancias de trabajo, donde se pueda discutir los temas de fondo.

¿Por qué ahora reaccionamos y no actuamos antes? ¿Cuál es el estilo de liderazgo?¿Cuál es el modelo de incentivos?¿Estamos implantando “Agile”? ¿todos en la empresa conocen algo de “metodología ágil”?¿Cuáles la calidad y cualidad de nuestras relaciones?

Las crisis son oportunidades. Sí, obvio. ¿Para quién?

Es más, en tiempos de CORONAVIRUS, tal vez es tiempo de reinventar el concepto mismo de “transformación digital”.

La TD2020 que anhelamos

No quiero ni por un segundo quitarle al presente el dramatismo que tiene, estamos en el medio de una pandemia, no lo desconozco. Algo sé de crisis. Siento que hoy más que nunca necesitamos equipos diferentes, con conexión en algunos niveles. Algunos pensando en la coyuntura, otros con la vista puesta en el futuro.

No podemos dejar de pensar en el futuro. Necesitamos en todo momento, liderazgo disponible con capacidad de observación de un futuro posible que va cambiando. No hay innovación posible, sin un liderazgo que le dé derecho a germinar.

Necesitamos aprender de los errores del pasado y de nuestro presente complejo. Para efectos de distinción, la transformación digital que surge y a la que aspiro, y que llamaré TD2020 y por tanto le otorgo un valor diferente, no es una función ejecutiva, sino que definitivamente para mí es una función de coordinación.

Lo que quiero dejar en claro es que hay tecnologías, cambios, contrataciones que parecen que son esfuerzos de transformación digital y en realidad son sólo para seguir haciendo más de los mismo. Esto no necesariamente es un error y desde la perspectiva de la coyuntura versus régimen hay que tener claro que cuando se hace una inversión para sostener un presente necesario, se tendrá que amortizar rápidamente o declarar a pérdida en un futuro cercano. 

Entonces, administración de coyuntura, hoy día, sinónimo de CORONAVIRUS, evitar contagio, mejor hacemos teletrabajo… no es, ni cerca la transformación digital que necesitamos y el presente que experimentamos, es sólo el despertador que nos sacó del letargo…

Entonces, los esfuerzos orientados a lograr una situación en “régimen”, con una TD2020 desplegada, tienen al menos que estar enfocadas en coordinar: estrategia , operaciones, tecnología, comunicación y personas, a través de toda la organización, de capitán a paje.

Pensando en el futuro de la empresa

¿Por qué veo laTD2020 como una función de coordinación?

La definición de “coordinación” nos refiere a una “acción común” y para efectos de la TD2020 , esa “acción común” habita en el futuro y no sólo como respuesta una coyuntura. La TD2020 tiene una misión que se expresa como: 

“La búsqueda de la extrema satisfacción con el cliente interno y externo; y la extrema eficiencia en la producción de bienes y servicios”.

• No es la tecnología por la tecnología.
• No es sólo para bajar costos y menos si esto es a expensas de la satisfacción del cliente.
• No es para subir las ventas en el corto plazo.
• No esta al servicio de mejorar la imagen de la empresa.
• No es para seguir haciendo más de lo mismo y tener mejores resultados financieros.
• No es sólo para evitar el contagio del CORONAVIRUS.

¿Qué quiero que coordine?

Al menos los esfuerzos orientados al futuro de las distintas áreas de la empresa destinados a la estrategia , operaciones, tecnología, comunicación y personas. No de la coyuntura.

Del gerente general esperamos represente los intereses de los propietarios, declare un propósito, sostenga el relato del cambio, dirima los conflictos y actúe frente a las crisis. Necesitamos para los efectos de la TD2020 que él, sostenga una estructura de organización dual, porque una parte de la organización seguirá en la verticalidad, control y mando; mientras que otra en la horizontalidad, cooperación e innovación. Algunos en la operación y en el presente; otros en la invención del futuro. Como placas tectónicas hay traspaso de energía, roces y cambios. Ahí la calidad del liderazgo del gerente general es imprescindible. El liderazgo marca los contornos de la organización, el limite de lo posible…

La TD2020 es un proceso con planificación previa, con una etapa de entrenamiento y prueba. La gente no se levanta una mañana, va y se lanza en paracaídas. Tampoco las empresas, un día se transforman sin reflexión previa. Los saltos se preparan con diligencia, y mientras más difícil es el salto, mas fuerte el entrenamiento previo. ¡Train hard, fight easy! Nos indican las fuerzas militares norteamericanas que, de estrategia saben y mucho.

Este presente aciago, es sólo parte de ese entrenamiento que, si no lo había comenzado antes, empezó ahora.

La orquestación necesaria

No veo que una gerencia tradicional pueda hacerse cargo de todo lo que la TD2020 requiere, además que cada jefatura dedicará parte de su día a hacer más de los mismo. Sí, y es muy necesario que sea así, porque el negocio, la operación tiene que seguir funcionando. Entre todos, hay que cuidar la caja, el flujo del dinero. Cada jefatura tendrá disponible una parte menor de su tiempo, dedicada a pensar el futuro y una gran parte en sostener el presente.

Anticipándonos a las dificultades

Los silos, son un gran problema de cara a la transformación requerida. Nos referimos como “silos” a esas pequeñas empresas dentro de una misma empresa en que se convierten las gerencias funcionales y que se caracterizan porque se aíslan de los demás departamentos estableciendo su propio “modus operandi”. Caer en la tentación de aislar la transformación (¿problema?) evitando, torpemente, convertirla en un desafió de todos .

 “Una empresa tradicional que inicia su transformación creando una organización paralela, en edificio paralelo con perfiles, gobierno, códigos y vestimenta diferentes asume el gran riesgo de terminar dividida y con un enfrentamiento entre los Digitales y los No Digitales, entre los Transformados y los No Transformados. Consolidar ‘una” gran cultura y realizar “una” gran transformación organizacional puede ser más complejo, pero el valor de lograr una sola identidad y tener una evolución conjunta valen, por mucho, el esfuerzo. En este caso, para vencer, puede ser mejor sumar que dividir”. (Bernardo Sambra, Gerente Corporativo de Gestión y Desarrollo Humano del BCP y Credicorp)

DEFINIENDO EL CORAZÓN DE LA TD2020

Siento que, concebir la "transformación digital" como una función de coordinación con real poder, es parte de la solución.

Me imagino una dirección con muy pocos recursos propios, sino corremos el riesgo de convertirla en otro silo, con otro director o gerente defendiendo su metro cuadrado.

¿Qué espero de esta dirección?

Definir su cultura es definir su probabilidad de éxito. Sin lugar a dudas , esta dirección de coordinación necesita:

• Ser full cultura digital y accountable hasta la médula.
• Considerar, que “Ágil” es el “mindset” qué necesitamos. Parte del ser y no del tener.
• Poner claramente el foco en el futuro.
• Estar absolutamente centrada en las personas.
• Poseer una capacidad irrenunciable a la comunicación efectiva, coordinación impecable y alineada a los principios y valores compartidos de la organización.
• Estar conectada a redes a gran escala. Con una clara mirada del contexto político, económico, tecnológico y social donde la organización habita.

 ¿Qué se coordinará desde esta dirección?

El cumplimiento de la misión, que recordémoslo es:

“La búsqueda de la extrema satisfacción con el cliente interno y externo; y la extrema eficiencia en la producción de bienes y servicios”.

Desde aquí coordinamos los pequeños tiempos que, desde cada gerencia funcional, las personas puedan destinar a pensar y diseñar el futuro.

En la dirección de coordinación de proyectos de TD2020 (Alias coordinación TD), duermen pensando en la transformación y en el futuro, se levantan pensando en la transformación y en el futuro, caminan pensando en la transformación y en el futuro, almuerzan…¡fuera de broma!… no quiero transmitir obsesión, sino que determinación … para transmitir una idea, hay que encarnarla.

Por ahora, le comparto este cuadro. No quiero concluir, no quiero tener la razón.

Recuerdan el concepto de VUCA (Volatile, Uncertain, Complex, ambiguous), se inventó hace 30 años. ¿La “Agilidad”? El manual se escribió, hace once años.

El cuadro les puede parecer caótico, desordenado o raro… el mundo es así, se acabo la linealidad, lo predecible… ahora es el turno nuestro, poner luz en medio de la confusión.

Si sólo me acompañarán por unos minutos,  en mi idea de que parte del éxito de largo plazo que buscamos esta vinculado a definir la dirección de coordinación de la transformación digital. Entonces, respóndanme, por favor ¿Qué falta? ¿Qué agregamos?

¡Vamos! ¡Súmate al debate¡