Trabajar los efectos, dejando de lado las causas,
nos asegura que deberemos volver a tratar una y otra vez con los mismos efectos.
Si le sumamos esfuerzos basados en conceptos de mejora continua, gastaremos recursos de la compañía o institución en vano, pues en el mejor de los casos, la energía producida por la causa, que provocaba el efecto, se trasladará y materializará en otro efecto, y así sucesivamente.
Ejemplo: Si en el año 2018 aún tenemos que contratar talleres de formación, como un taller de comunicación asertiva o uno de resolución de conflictos, con el objetivo de mejorar los procesos de comunicación de la compañía o institución y estos son talleres que llevamos varios años contratando, sin duda, estamos trabajando efectos y dando la espalda a la causa.
Solución: Revisar tanto los estudios, diagnósticos y análisis realizados como las partidas presupuestarias, de los últimos años e identificar aquellas que se repiten y tienden a perpetuarse como gasto cíclico en la compañía o institución. Trabajar sobre ellos entendiendo que solo son los efectos y debemos encontrar la causa raíz. Una vez identificada la causa raíz, desarrollar una metodología de resolución de problemas adecuada.
Feliz día,
D.O
Contadora en Inmobiliaria Diversa S.A.
6 añosTotalmente de acuerdo. Muchas veces atacamos la enfermedad mas no la raíz que provoca el mal. La medicina puede aliviar síntomas más si no se trata la raíz se puede volver a presentar el mal. Así en en las compañías. Se invierte muchas veces en como mejorar puntos débiles que se detectan más no vamos más allá a observar el porque, que causa dichas debilidades para poder sanar el conflicto desde su inicio.