Treintañeros 3.0
Al llegar a los 35 te encuentras en esa, tonta, difícil edad en la que muchos pensamos que debemos dar un giro a nuestras vidas, bien porque no nos ha ido como pensábamos o bien porque queremos cambiar sin motivo alguno. Todo muy loable.
Pero que haces cuándo el cambio es impuesto? Cuándo no te queda otra que reinventarte? Eso es lo que nos está pasando a muchos con la revolución digital que estamos viviendo. Nos educaron para un mundo que ya no existe y con unas perspectivas que ahora parecen de risa. ¿ Y qué hacer en estos casos? Tienes dos opciones: o lloras porque el mercado te va excluyendo y te sientes cada vez más resentido porque nadie te llama, y sé lo que eso, o vuelves a estudiar.
Y he optado por la segunda opción, así que a mis tiernos 35 empezaré una carrera nueva, con todo el miedo que eso supone. Pero si no somos capaces de adaptarnos estamos condenados al más absoluto olvido digital.