Vigo jubila la Berlingo y la Partner en agosto

Vigo jubila la Berlingo y la Partner en agosto

La Voz de Galicia , 6 febrero, 2018

La factoría portuguesa de Mangualde las seguirá fabricando para el mercado americano en tanto en Balaídos, que desde 1996 ha producido casi 5 millones de unidades, solo montará la K-9 para Europa

Ya hay fecha para jubilar los dos modelos de furgoneta que PSA fabrica en Vigo, Berlingo y Partner: el 6 de agosto. Ese día saldrá de la cadena de montaje la última unidad del que ha sido en la última década el buque insignia de la factoría. En realidad, puede decirse que se trata de un contrato de relevo, ya que a la vuelta de las vacaciones, en septiembre, la producción de los nuevos modelos (proyecto K-9), actualmente en fase de montaje de preseries, alcanzará velocidad de crucero.

El director de la factoría, Frédéric Puech, afirma que eso no significa que las B-9 (es el nombre en interno de los actuales vehículos comerciales ligeros) desaparezcan. «Seguirán montándose en Mangualde», señala. El destino de las unidades que se produzcan en la planta portuguesa será el mercado americano, en tanto las que se fabriquen en la de Balaídos se venderán fundamentalmente en Europa.

El lanzamiento en 1996 de las primeras Berlingo y Partner supuso una revolución en la concepción de los utilitarios ligeros, ya que rompieron con la tradición de ser meros derivados de una berlinga, convirtiéndose en una referencia para el sector. Tres generaciones distintas de dichos modelos ha fabricado Vigo en estos 21 años. De la primera, entre 1996 y el 2002, salieron de cada cadena de montaje 1.210.100 unidades (738.800 Citroën Berlingo y 471.300 Peugeot Partner). La segunda arrancó en el 2002 y se dio por cerrada en el 2008, período en el que se fabricaron 1.359.550 vehículos (782.250 Berlingo y 577.300 Partner). Más espectaculares son las cifras de la que se jubilará en agosto: 2.159.200 unidades hasta el pasado 31 de diciembre. En los años más duros de la crisis, especialmente el 2014, con la cifra de producción global más baja desde 1999 (379.000 vehículos), las furgonetas fueron las que salvaron los muebles de uno de los peores ejercicios de la planta. Lo que llama la atención de los profesionales del sector es que, pese a la madurez de ambos modelos, no solo mantengan el tirón, sino que son las responsables de que la demanda siga creciendo y de que la dirección se haya planteado implementar un turno de trabajo de fin de semana, que está previsto que arranque en junio.

En el año 2016 se vendieron en Europa 238.000 unidades de los modelos Berlingo y Partner, lo que representa casi el 30 % del mercado de utilitarios comerciales ligeros. El Grupo PSA es el líder absoluto de este segmento en el continente.

Movilidad entre cadenas

El lanzamiento de las nuevas furgonetas obliga a reorganizar la plantilla, ya que el montaje se realizará en la línea en la que ahora se producen los monovolúmenes dado que utilizarán la misma plataforma. Los responsables de recursos humanos de la empresa trasladaron la pasada semana al comité cómo se realizará dicho trasvase.

A partir de este mes se irán cambiando medio centenar de trabajadores de la línea uno a la línea dos hasta llegar a 300 en el mes de agosto. La intención de la empresa es respetar el turno de todos los empleados en la medida de lo posible.

Trescientos operarios de PSA cambiarán de línea hasta el verano para producir los K9

Faro de Vigo, 5 febrero, 2018

La planta mantendrá al menos hasta fin de año dos turnos en el Sistema 1

La paga por cumplir objetivos ronda los 1.000 euros

El lanzamiento de las nuevas furgonetas de PSA-Vigo (K9) afrontará en los próximos meses su fase más complicada desde el punto de vista de la organización de plantilla con el trasvase hasta el verano de unos 300 trabajadores de una línea de la fábrica a la otra. Los responsables de recursos humanos del centro explicaron ayer a una versión reducida del comité cómo se efectuará este basculamiento de efectivos (50 al mes, 150 por turno) y la formación que recibirán para el montaje de esta nueva generación de vehículos comerciales ligeros, cuya producción en serie arrancará a la vuelta de las vacaciones.

En la reunión, la empresa garantizó que el Sistema 1, en el que se fabrican las actuales furgonetas Berlingo y Partner y los sedanes Citroën C-Elysée y Peugeot 301 pero que a partir de agosto solo se quedará con los dos últimos (las furgonetas serán sustituidas por los K9 en el Sistema 2), mantendrá dos equipos de producción (sin turno variable) al menos hasta fin de año, para lo que se reducirá la cadencia (número de vehículos que se producen por hora) a 24 coches/h. En la actualidad, esta línea está trabajando a 56 coches/h. en tres turnos y en junio incorporará un cuarto equipo de fin de semana hasta agosto, como adelantó este diario.

La fabricación de los K9 comenzó ya en fase de pruebas el año pasado, y en la actualidad salen del Sistema 2 algo más de una decena de unidades por semana -algunas ya se pueden ver por las carreteras de la comarca en los test de rodaje-, aunque su cadencia se irá incrementando en los próximos meses, lo que obliga a este trasvase de personal entre líneas. El Sistema 2 dejará de tener un turno variable y asumirá cada mes cincuenta trabajadores de la línea 1 hasta el verano. Será después de las vacaciones de agosto cuando se recupere el turno de noche y más adelante, en octubre, se sumará el cuarto turno.

Aunque el proyecto acumula cierto retraso con respecto al programa inicial del lanzamiento, PSA es optimista con respecto a los volúmenes de producción para este año: más de 260.000 unidades entre las factorías de Vigo y Mangualde. Para 2019, ya con el lanzamiento consolidado, ese número deberá superar las 350.000 unidades. Este elevado volumen de producción de K9, sumado al todocamino que se lanzará en 2020, el proyecto V20, hará que Balaídos vuelva a superar la cota del medio millón de unidades al año, valor que no se alcanza desde 2007 (547.000 unidades).

Por otra parte, la plantilla de Balaídos cobrará este año cerca de unos 1.000 euros por la prima de objetivos, que se compone de una parte local (por el cumplimiento de las metas particulares de la planta) y otra de grupo, pendiente de las cuentas de PSA. Según cálculos sindicales, y a expensas del resultado de la multinacional, un trabajador con un salario bruto de unos 25.000 euros cobraría entre 964 y 1.054 euros por este concepto.


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