... Y de nuevo se aplaza... Sobre Atención Primaria.

Por Mariela Carrillo MD.

La Seguridad Social es un concepto que es inherente a los derechos básicos del ser humano en el mundo civilizado. Si establecemos esta premisa como cierta, de manera inmediata debemos generar estrategias para garantizarla y esto se debe realizar desde todos los sectores.

En el tema de salud, la Seguridad Social, debe iniciar desde el conocimiento mismo de la población a la que se atiende. El trabajo se hace imposible y las decisiones a tomar erráticas, si no cumplimos con ese primer acceso de los ciudadanos a un centro médico con su grupo familiar.

¿Por qué hay miedo? Por desconocimiento, por confusiones increíbles de conceptos y por defensa de intereses particulares que afectan necesariamente a las mayorías. No es posible hacer alcanzar los recursos y lograr un acceso equitativo a los servicios de salud, sin la distribución adecuada de los mismos.

La Atención Primaria en salud, no debería ni siquiera estar discutiéndose. A estas alturas del partido, todos sabemos que “es mejor prevenir que curar” y también que es más económico. Me refiero a que hay consenso mundial sobre su importancia y necesidad, que todos sabemos que evitar una complicación en términos de salud…está bien. Conceptos tan errados manifestados como: “…la atención primaria es solo para ahorrar…” , hacen que entendamos que definitivamente no estamos discutiendo en el mismo terreno.

El crecimiento de nuestra población, su curso hacia las patologías crónicas como base de las consultas diarias, entre otras, hacen OBLIGATORIO el conocimiento de las enfermedades de las que sufren los dominicanos, con el fin de practicar un ejercicio estandarizado por medio de protocolización de la medicina, las evidencias científicas y la expectativa de los pacientes en su entorno.

No se van a “quitar” pacientes a los especialistas, se van a devolver al nivel de donde los sacaron, llegarán a los especialistas cuando verdaderamente lo requieran y el sector hospitalario de la República Dominicana, tendrá disponibilidad de camas para quienes deban ingresarse y no se preocuparán porque las mismas estén ocupadas por pacientes con resfriados comunes. Las clínicas privadas y los hospitales continuarán teniendo pacientes y muchos. Por qué? Porque la gente se seguirá enfermando…solo que atenderán a los que realmente lo requieren y harán una relación directa y de colaboración con los demás niveles de atención porque cada uno de ellos tiene su importancia y función clara y establecida.

Los médicos especialistas -la mayoría-, que ejerce su profesión honrada y dignamente, seguirán dando soluciones honestas a sus pacientes y si investigan un poco más sobre el sistema, seguramente colaborarán con él, retornarán los pacientes que ya no requieran su labor especializada, para que continúen en un primer nivel controlándose y estarán prestos a recibirlos de nuevo, si algún signo de alarma se diera.

Terminaré diciendo que efectivamente existe el riesgo de que algunos inescrupulosos usen la atención primaria para enriquecerse y distorsionen su objetivo y gran propósito, eso sin embargo, es un riesgo que existe en cualquier esquema propuesto. De hecho hoy existen inescrupulosos –pocos, gracias a Dios- que cobran fuera de la ley, que ejercen pensando en sus bolsillos, que engañan al sistema y a sus pacientes. El deber ser es entonces que el rector de la política de salud de la República Dominicana: El Ministerio de Salud, fortalezca su músculo de supervisión y veeduría para que ello no ocurra, lo cual de hecho debe hacerse, aunque al final no entre en vigencia la Atención Primaria en Salud.