Gary Lightbody vivió la creación del nuevo disco de Snow Patrol como un proceso entre dos extremos. El primero fue el primer intento de grabar su octavo álbum, un plan que terminó encallando y dejó al trío de indie rock norirlandés sin una idea clara de su futuro. “Nadie tuvo la culpa”, explica Lightbody a Apple Music. “Las estrellas se alinearon para crear una situación caótica y estábamos estresadísimos. Además, teníamos una fecha límite. El disco tendría que haber salido un año antes. Ahora nunca volveríamos a trabajar así. Trabajar con plazos no es forma de crear arte”. Lightbody y el resto de la banda, Nathan Connolly y Johnny McDaid, se reunieron para intentarlo de nuevo con el productor Fraser T. Smith (Stormzy, Adele), que convirtió la grabación de The Forest Is the Path en una empresa relativamente sencilla. “La segunda vez fue mucho más relajada. No solo por cómo trabaja Fraser en el estudio, sino también por su personalidad tranquila, dulce y divertida”, dice Lightbody. “No parábamos de reírnos y hacer el tonto. La primera vez tardamos cinco meses, y esta, cinco semanas”. El alivio es casi palpable en The Forest Is the Path, un álbum de espacios amplios en el que Snow Patrol proyecta su talento melódico sobre instrumentaciones expansivas y atmosféricas. Todo lo que ha definido al trío hasta ahora suena renovado, de himnos de pop rock para cantar a voz en grito a emocionantes baladas y medios tiempos reflexivos y luminosos. “Estoy convencido de que esto es el principio de algo”, afirma Lightbody. “Llevamos 30 años de carrera y nunca habíamos estado en el lugar que ocupamos ahora. Estamos en territorio desconocido hagamos lo que hagamos”. Aquí, el cantante y guitarrista nos lleva por el primer capítulo de su nueva etapa canción a canción. All “Conocí a Fraser cuando nos juntamos para escribir por primera vez en octubre o noviembre de 2022. Era la primera persona de fuera de la banda con la que componía para Snow Patrol y fue como una cita a ciegas a la que vas con la idea de escribir una canción en un día. Cuando llegué, Fraser ya tenía la guitarra y, después de saludarme, me preguntó qué me parecía lo que estaba tocando. Todavía no me había quitado el abrigo y ya estábamos empezando. Le dije que me sonaba genial y empecé a cantar encima. Después, me quité el abrigo, me puse a escribir la letra y en una hora teníamos la canción”. The Beginning “Es la canción con la que Johnny y yo empezamos cuando nos pusimos en serio a componer para el álbum. Yo había estado escribiendo un montón de letras en cuadernos y en el teléfono durante los tres o cuatro meses anteriores. Uno de los versos que tenía era ‘I wanna be in love/Without being loved in return’ (Quiero estar enamorado/Sin que me quieran a cambio). De ahí salió todo. A Johnny se le ocurrió la parte de piano y yo empecé a cantar la melodía encima y a trabajar en la letra. Johnny y su equipo se ocuparon sobre todo de la música. Will Reynolds, uno de sus colaboradores, aparece en los créditos aquí y en una o dos canciones más. La idea de esa guitarra increíble que parece que se tambalea en el estribillo fue idea suya”. Everything’s Here and Nothing’s Lost “Terminamos ‘The Beginning’ el primer día que pasamos en Somerset y esta la compusimos el segundo. Estaba intercambiando ideas con Johnny, se me ocurrió la melodía y el resto fue bastante rápido. Hacía un día precioso y salí al jardín para escribir la letra. Cuando volví, Johnny tenía un estribillo monumental. Al principio, era todavía más grandioso, pero tuvimos que rebajarlo porque a la gente le habrían estallado los oídos después de haber subido el volumen para escuchar la parte tranquila que viene antes”. Your Heart Home “La grabé con GarageBand en casa y se la mandé a Fraser y a Scott, el ingeniero del disco, que la plasmaron en glorioso tecnicolor. Me defiendo con GarageBand, pero no soy productor. Mi idea de la producción tiene más que ver con pensar en lo que la canción necesita que con la capacidad técnica de hacerlo realidad. Cuando nos juntamos en el estudio, empezó a cambiar y a evolucionar de una manera que yo no esperaba. Me encanta eso”. This Is the Sound of Your Voice “Es una melodía un poco inusual para nosotros. La primera vez que se la puse a alguien a quien quiero, en quien confío y con quien trabajo mucho, me dijo que le sonaba a musical del West End. Ni se me había ocurrido pensarlo. Johnny aportó muchos detalles intrincados. Tiene 200 pistas de audio. Johnny sabe cómo crear algo en lo que todo está tocado, todos los sonidos son reales, muchas veces cosas que encuentra por ahí. Por eso no resulta abrumador, sino que todo tiene su lugar en la canción y algunos elementos entran y salen. Johnny hizo un trabajo fantástico, igual que Nathan. Las guitarras son maravillosas de principio a fin”. Hold Me in the Fire “La escribí con Johnny en su casa. Desde el primer momento, sonaba a canción de rock que quería expandirse. Lo único que teníamos que hacer era no estorbar y dejar que se hinchara el globo, pero no es lo que ocurrió cuando intentamos grabarla por primera vez. Tenía la sensación de que no dejábamos de añadir cosas y no conseguíamos nada. Es un rompecabezas complicado, porque tienes que andar quitando y poniendo cosas, y a veces las piezas nunca terminan de encajar. Lo que ocurrió con Fraser es que todo lo que añadíamos hacía que el tema creciera, que se inflara en el mejor sentido. Todo lo que flotaba en el aire empezó a concordar. Fraser nos ayudó una barbaridad. Y las guitarras de Nathan son abrasadoras”. Years That Fall “La compuse con Garage Band en casa, en Bangor, y empezó siendo una cosa bastante extraña, nada que ver con la canción de rock en la que se convirtió. Nos inspiramos mucho en esa versión, pero el verdadero monstruo no apareció hasta el estudio. Esta cosita como de indie rock enclenque fue por un camino muy diferente. Fue algo espectacular”. Never Really Tire “Dios, lo que trabajó Johnny McDaid aquíELL Otra canción con más de 200 pistas. Las cosas entran y salen de manera que puedes escuchar cualquier sección y siempre vas a encontrar algo diferente. Desde el principio, yo tenía la visión de un águila volando sobre un bosque y viendo la línea de los árboles subir y bajar como olas en mitad del océano. Así quería que sonara la batería. Se lo expliqué a Ash (Sloan, batería) pensando que me iba a tomar por loco, pero lo pilló a la primera. La idea era tocarla en directo de la forma más espontánea y ver lo que pasaba. Ver cómo mi visión se hacía realidad fue una de las experiencias más extraordinarias que nunca haya vivido en un estudio”. These Lies “Cuando mi padre murió, estuve como anestesiado un año entero. Pasó a finales de 2020 y no podía llorar ni sentir nada. Pensaba que me había roto para siempre. Hasta que un par de días antes del aniversario, leí un poema de Rumi y se me saltaron de golpe las lágrimas de todo un año. Al día siguiente estaba agotado y me metí en la cama. Me desperté con la sensación de que estaba conectado a algo y que necesitaba papel y lápiz. Escribí una canción sobre mi padre y, 10 minutos después, ‘These Lies’, que aunque evidentemente no hable de él también surgió en un estado de trance. Es como si las lágrimas que no lloraba hubieran estado bloqueando todas esas cosas”. What If Nothing Breaks? “Johnny se ocupó de toda la producción, aunque pasó por distintas formas. Empezó como un tema con ritmo de Motown y un estribillo diferente, pero había algo que no terminaba de funcionar. Cuando Johnny cambió los acordes de sitio y yo empecé a cantarla de otra manera, nos dimos cuenta de que esa era la dirección en la que debía ir. Cobró vida definitivamente el día que llegué con otros acordes para el estribillo y lo empecé a cantar tal y como quedó al final”. Talking About Hope “Estoy orgulloso de las letras del disco. Me he permitido abrirme a lo que pueda ocurrir en lugar de forzarme a escribir, que es lo que a veces necesitas si te tiras meses mirando un folio en blanco. Esta vez no sentí ningún bloqueo creativo. Esta canción está escrita desde la honestidad, especialmente las estrofas. Me encanta la letra, que es algo que no suelo decir a menudo sobre mi propio trabajo”. The Forest Is the Path “Michael Keeney tuvo un papel muy importante en este tema. Entre otras muchas cosas, es el productor de Joy of Nothing de Foy Vance, que me parece el mejor disco que haya grabado un artista norirlandés. Con nosotros, escribió y arregló algunas de las partes de cuerda del álbum. Un día que estábamos en su estudio, Nathan empezó a tocar la línea melódica. La grabé en el teléfono, me la llevé a casa, escribí la canción en GarageBand y se la mandé a Fraser. La guitarra que recorre toda la canción es la grabación de mi teléfono. Me parece una forma estupenda de terminar el disco, ese momento espontáneo en el que no tienes que preocuparte de colocar los micrófonos ni nada. Es tan sencillo como ‘Me encanta eso, ¿te importa si lo uso?’”.