Iron Maiden

Iconos por antonomasia del heavy metal, los británicos Iron Maiden y su inseparable mascota Eddie encarnan como nadie el sonido, la imagen y el espíritu de uno de los géneros que mayores pasiones despierta en todo el mundo. Encabezada por el bajista Steve Harris, principal compositor y único miembro fijo de la formación a lo largo de su dilatada trayectoria, la banda nació en Londres el día de Navidad de 1975 y debutó discográficamente en 1980 con Iron Maiden, el primero de los dos álbumes que grabaron con Paul Di’Anno al frente. La imagen, la voz y la actitud del cantante, más cercanas al punk que al heavy metal, no acababan de casar con las ideas que Harris tenía en mente, lo cual sumado a sus problemas con las drogas y el alcohol acabó provocando su salida del grupo. Bruce Dickinson, vocalista de los también británicos Samson, fue el encargado de ocupar su lugar y rápidamente se reveló como la pieza clave que Iron Maiden necesitaban para despegar definitivamente. Con él al frente, inscribieron con letras de oro en la historia del heavy metal títulos tan imprescindibles como The Number of the Beast (1982), Powerslave (1984) o Seventh Son of a Seventh Son (1988). A mediados de los 90, década particularmente poco propicia para el hard rock y el heavy metal, Iron Maiden vivieron su personal travesía por el desierto tras la marcha de Dickinson y su sustitución por Blaze Bayley, un vocalista que, pese a sus encomiables esfuerzos, no logró cubrir en ningún sentido el enorme vacío dejado por su predecesor. Reconvertida en sexteto tras el regreso en 1999 de Dickinson y del guitarrista Adrian Smith, otro hijo pródigo que había abandonado la formación en 1990, la banda inauguró con Brave New World (2000) una nueva etapa de esplendor en la que, gracias a álbumes como The Final Frontier (2010), The Book of Souls (2015) o Senjutsu (2021), han logrado mantener intacta su vigencia y seguir ampliando una colosal base de fans que reúne ya a casi tres generaciones de incombustibles fieles.