La primera pista de que Toni Braxton estaba destinada a grandes cosas llegó en 1992, con su aparición en la banda sonora de la comedia romántica Boomerang. “Give U My Heart”, un dueto con el legendario productor, cantante y compositor Babyface, y “Love Shoulda Brought You Home” llegaron a lo alto de las listas de R&B casi al instante y dieron a conocer al mundo la voz conmovedora y sensual de Braxton. Su debut de 1993 la revelaba como una diva nacida para el estudio y le valió comparaciones con leyendas como Whitney Houston y Anita Baker. Los productores y compositores L.A. Reid y Babyface combinan elementos de R&B, new jack swing y pop a lo largo de las 12 canciones que situaron a Braxton en lo más alto del mainstream. Con sus baladas y medios tiempos alrededor del amor, el sexo, los corazones rotos y todo lo demás, Toni Braxton tiene las hechuras de un clásico de los 90. “Another Sad Love Song” late con una angustia romántica que se funde de forma casi imperceptible con la agridulce “Breathe Again”, la crónica de la pérdida de un amante y una mejor amiga. Hay espacio también para un trío de temas cercanos al pop de ritmo ágil, “Spending My Time With You,” “I Belong to You,” y “How Many Ways”, que celebran la llegada de un nuevo amor. De principio a fin, Braxton canta con la confianza de una veterana y la frescura de una debutante. Todo sin esfuerzo aparente. Más adelante, llegarían nuevos éxitos (especialmente “Un-Break My Heart” y Secrets en 1996), pero todos los ingredientes estaban en su lugar desde el principio. El talento de Braxton para navegar por distintos géneros ha sido una constante a lo largo de una influyente carrera en la que siempre se ha mantenido fiel a sí misma.