

Carl Maria von Weber desempeñó un papel importante en el desarrollo de la ópera romántica en Alemania, liberándola de las influencias italianas y francesas. El cazador furtivo, su obra más célebre, estuvo inspirada en el folclore y mitología, y sus novedosas orquestaciones hicieron de Weber uno de los pioneros del romanticismo alemán. Otros importantes trabajos incluyen Euryanthe y Oberón.