La realización de ajustes razonables viene siendo una obligación para los empleadores recogida en el Derecho de la UE desde el año 2000. Sin embargo, ni el concepto ni su aplicación en la práctica están claros en toda la UE, y muchas personas no siempre saben dónde encontrar información y apoyo. Las presentes directrices proporcionan información, ejemplos. Las presentes directrices proporcionan información, ejemplos prácticos y referencias para ayudar a los empleadores a cumplir este requisito. Se han elaborado con ayuda de los miembros de la Plataforma sobre discapacidad y de los interlocutores sociales, quienes no solo aportaron sugerencias, sino también ejemplos de buenas prácticas. Las directrices podrían servir a modo de valioso recurso para ajustar las prácticas en el lugar de trabajo a fin de prestar un mejor apoyo a la población activa en general y de crear un entorno laboral más inclusivo y adaptado para todos los empleados, independientemente de sus capacidades.