La educación es esencial para lograr un mundo más equitativo. Por eso, estamos creando alianzas para llegar a estudiantes en más de 100 países y regiones, apoyar a educadores, brindar oportunidades de aprendizaje extraescolar y promover la igualdad y la justicia racial. Porque un mayor acceso a la educación abre más caminos para que todas las personas puedan desarrollar su potencial.
La educación ayuda a estudiantes, líderes, innovadores, comunidades y a todo el mundo a llegar más lejos.
Colaboramos con quienes educan para que el aprendizaje llegue más lejos.
Trabajamos codo a codo con los educadores para inspirar a los estudiantes e invertimos en su desarrollo profesional brindándoles recursos como planes de estudio, tutorías y herramientas.
programación.
Y a cambiar vidas.
Enseñamos a enseñar programación. Y a cambiar vidas.
Antes de ser instructor del Miami Dade College, Eduardo Salcedo era especialista en ciencia de datos, estudiaba Tecnología de la Información y todo el tiempo intentaba combinar sus pasiones por la educación, la tecnología y la gente.
En 2022, Salcedo descubrió una nueva forma de generar un impacto positivo: se inscribió en un curso para profesores sobre cómo enseñar a programar. Mediante una colaboración entre el Miami Dade College, la Coalición Nacional de Centros de Certificación (NC3, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos y la Community Education Initiative de Apple, este programa capacita a los educadores que luego ayudan a convertir a los estudiantes en profesionales a través de cursos de formación, programas educativos y certificaciones.
Desde 2020, en Miami ha habido un crecimiento significativo de empleos relacionados con la tecnología, y el Miami Dade College está preparando a sus estudiantes para cubrir estos puestos. El Miami Dade College se esfuerza por apoyar a su diversa comunidad, integrada en gran parte por inmigrantes, a unirse a la fuerza de trabajo local e internacional con las habilidades que necesitan para salir adelante. La alianza de la institución con la NC3 está sumando a personas como Salcedo a su cantera de instructores.
“Las personas necesitan ser bilingües. Y todo el mundo necesita saber programación”, afirma Salcedo.
El aprendizaje entre pares es la piedra angular del programa de dos semanas de duración de la NC3. Con poca o ninguna experiencia en programación, los educadores obtienen una certificación que les permite capacitar a otros para que enseñen lo que aprenden. El plan de estudios está elaborado a partir de materiales educativos desarrollados por Apple usando el lenguaje de programación Swift y permite que profesores sin ningún conocimiento previo aprendan a programar, a crear prototipos de apps y enseñar a otros a hacer lo mismo.
“Enseñar a profesores es muy diferente a enseñar a estudiantes”, comenta Salcedo. “Comenzamos por preguntarles qué le dirían a un estudiante que no sabe nada de programación o cómo le explicarían algo a una persona que nunca antes ha tocado una Mac. Nos enfocamos en las estrategias y en cómo lograr el éxito”.
Ahora Salcedo es Master Instructor en la NC3 y capacita en persona a profesores de otras instituciones y organizaciones sin fines de lucro. Un notable 96% de los educadores que asisten a su clase pasan las pruebas de certificación.
Luis Napoles es uno de los estudiantes que ha tenido éxito tras asistir al curso de programación que imparte Salcedo en el Miami Dade College. Apenas seis meses después de su llegada a Estados Unidos procedente de Cuba, su app On Watch apareció en una presentación del programa. Este logro marcó un importante hito en su nueva vida en Estados Unidos y su futuro académico. Ahora es un profesional de sistemas a tiempo completo y trabaja en Miami, donde aplica de manera efectiva los conceptos que aprendió en el curso de Swift de Apple.
Pero este programa es mucho más abarcador que obtener nuevas habilidades y aprobar certificaciones. La NC3 ha creado una comunidad de educadores en todo el país.
Muchos participantes colaboran para mejorar el programa y los métodos de enseñanza, y esa comunidad se está expandiendo rápidamente. El Miami Dade College es parte del Global Hispanic Serving Institution (HSI) Equity Innovation Hub y funciona como un centro de innovación de igualdad regional, una iniciativa respaldada por Apple en colaboración con la Universidad Estatal de California en Northridge. Estas distinciones, junto a la firme inversión de Apple, permiten a Salcedo y al Miami Dade College actuar como un recurso para otros centros interesados en preparar a los estudiantes para el éxito en las carreras con mayor demanda en la economía tecnológica.
“Llevo casi dos años trabajando con la NC3 y he conocido entre 40 y 50 instructores que están cambiando vidas al enseñarles a los estudiantes nuevas habilidades que pueden aplicar de inmediato en el mundo laboral”, expresa Salcedo.
Reduciendo las barreras de acceso a una educación inclusiva.
Jordyn Zimmerman, diagnosticada con autismo en la niñez, tenía la cabeza llena de ideas y opiniones, pero hasta los 18 años vivió con muchas dificultades para comunicarlas. Fue entonces cuando recibió ayuda para acceder al iPad y a las apps de comunicación. Estas herramientas le permitieron comenzar a transmitir sus conocimientos, expresar su curiosidad y luchar por sus necesidades. Zimmerman suele señalar que no poder hablar no significa no poder expresarse, por eso defiende el acceso a herramientas de comunicación sólidas para ella y para otras personas que no hablan.
Obtuvo su licenciatura en Política Educativa en la Universidad de Ohio, donde trabajó para lograr una experiencia universitaria más integradora para ella y los demás. También hizo una maestría en Educación en el Boston College y actualmente está cursando otra en Administración de Empresas.
Gracias a sus experiencias en la enseñanza, reconoció las desigualdades e injusticias que existían para las personas con discapacidad y decidió hacer más. Comenzó a generar conversaciones sobre los sistemas y las estructuras que causan desigualdad. Ahora, a través de su labor política y colaboraciones, continúa reduciendo las barreras de acceso.
Por sus esfuerzos, fue nombrada presidenta de la junta directiva CommunicationFIRST, una organización nacional sin fines de lucro, y es parte del Comité del Presidente de Estados Unidos para Personas con Discapacidad Intelectual (PCPID, por sus siglas en inglés). Allí colabora con agencias gubernamentales para identificar barreras y oportunidades, influir en políticas y promover iniciativas que apoyen la inclusión y la accesibilidad para personas con discapacidad.
“Es increíble poder contribuir a cambiar sistemas. Esta es una obra en curso y no tengo todas las respuestas, pero sí puedo entablar diálogos que lleven a reducir las barreras de acceso a través de políticas o colaboraciones, lo cual es un avance enorme”, dice Zimmerman.
Su trabajo se enfoca en la accesibilidad y la inclusión, como tener al alcance experiencias y productos que todo el mundo pueda usar y de los que puedan aprender. Y aunque la accesibilidad es un componente de la inclusión, no es suficiente. “Para fomentar una verdadera inclusión, no sólo se deben tener herramientas tecnológicas: se debe contar con apoyo físico o digital para que las personas con discapacidad puedan desenvolverse en sus entornos con dignidad, respeto y autonomía”, comenta Zimmerman.
Como responsable de estrategia de producto del Proyecto Nora, codiseña planes de estudio que brindan a educadores y estudiantes herramientas para superar prácticas excluyentes, y un marco para evaluar, investigar, colaborar y abordar las barreras a la pertenencia. Estos recursos permiten a los alumnos generar ideas, definir colectivamente problemas relacionados al acceso e identificar soluciones innovadoras para su diseño e implementación.
“Educar a otras personas nos permite pensar como comunidad y desarrollar soluciones más innovadoras”, señala Zimmerman. “A su vez, esto permite que todas las personas puedan involucrarse de lleno”.
Como parte de la comunidad de Apple Distinguished Educators (ADE), un grupo de educadores pioneros que usan la tecnología de Apple para transformar la enseñanza y el aprendizaje, Zimmerman demuestra un liderazgo intelectual entre los suyos para garantizar el acceso a estrategias innovadoras de enseñanza y aprendizaje a estudiantes con discapacidades.
Se le atribuye haber cambiado la visión de los ADE sobre la tecnología accesible en el salón de clases. Zimmerman es una gran presentadora y comparte recursos en la Apple Education Community, un centro de aprendizaje profesional online para educadores que usan la tecnología de Apple, incluidos planes de estudio que integran principios de diseño inclusivo. Su trabajo brinda a otros educadores acceso a más oportunidades para desafiar los sistemas que perpetúan la exclusión.
“Me enorgullece compartir un espacio con tantos educadores increíbles”, afirma Zimmerman. “Y tener un impacto en la vida de los demás”.
Leer la publicación de Zimmerman en el foro de la Apple Education Community
Aprender inglés aprendiendo a programar.
Para muchos inmigrantes y refugiados que llegan a Estados Unidos, integrarse a una nueva comunidad puede convertirse en una experiencia realmente abrumadora. Sobre todo a la hora de buscar trabajo o continuar los estudios, las barreras lingüísticas pueden llegar a ser un verdadero obstáculo.
El objetivo del programa Onramp es impulsar la fuerza laboral en el estado de Idaho, fomentando el desarrollo de los educadores y ampliando las oportunidades para los estudiantes. Este programa estatal representa una alianza entre Apple, la Universidad Estatal de Boise, la Digital Learning Alliance de Idaho y el College of Western Idaho (CWI). Para los instructores del CWI, como Sarah Strickley, ayudar a los inmigrantes y refugiados a desarrollar habilidades de comunicación en inglés les permite sentirse más cerca de sus comunidades y cambiar su situación. “Si queremos una equidad real, necesitamos educar líderes que se vean reflejados en sus semejantes”, comenta Strickley.
Los programas del CWI de aprendizaje de inglés (ELL, por sus siglas en inglés) e inglés como segundo idioma ofrecen clases gratuitas de inglés y de conocimientos informáticos. Con el apoyo del equipo de Community Education Initiative de Apple, este programa integra el plan de estudios “Creatividad para todos”, una introducción a “Desarrollo en Swift” y dispositivos que potencian las habilidades digitales.
Hace más de 10 años, Strickley imparte el programa de aprendizaje de inglés, y para ello diseñó un curso que enseña el idioma a través de la programación y viceversa. Trabaja con más de 150 estudiantes procedentes de 30 países que, en conjunto, hablan más de 31 idiomas.
Los estudiantes tienen distintos niveles de educación y experiencia con la tecnología. Algunos nunca habían usado un iPad, mientras que otros ya venían con conocimientos avanzados. Pero el factor que los une es la barrera de comunicación que limita sus posibles oportunidades laborales. Dice Strickley que “el propósito es crear un programa sostenible que cada estudiante pueda aprovechar, sin importar en qué etapa del proceso académico esté”. Y con su metodología de enseñanza, tanto en idiomas como en programación, pretende reforzar las fortalezas y habilidades individuales de sus estudiantes.
“Cuando integras creatividad, comunidad y programación, algo mágico ocurre. Porque la tecnología sale al rescate y llena todas las carencias lingüísticas o de aprendizaje que los estudiantes puedan tener”, asegura Strickley.
Strickley cree que la creatividad juega un papel fundamental cuando se trata de acercar a las personas a su comunidad. Por eso incorpora el aprendizaje basado en desafíos, que busca aprovechar la tecnología para resolver problemas reales, lo que a menudo representa el primer choque de estos estudiantes con sus comunidades. De esta forma, aprenden activamente a hacer relaciones y buscar soluciones con creatividad y, a su vez, desarrollan la confianza personal y un valioso capital social.
Los inmigrantes y refugiados suelen llegar a Idaho sin ningún tipo de red de contención, razón por la que Strickley y el CWI concentran sus esfuerzos para que logren encontrar su propia voz y afiancen su lugar en la comunidad que es ahora su hogar.
“Cada uno de nosotros alberga conocimiento, más allá de la lengua que hablamos, nuestro acento, historia o circunstancia”, dice Strickley. “Y la educación nos ayuda a compartir estos conocimientos con los demás para comprendernos mejor unos a otros”. Para ella, la tecnología es como un ecualizador que nos ayuda a estar en sintonía. Con dispositivos y nuevos conocimientos tecnológicos a la mano, cada miembro de la comunidad cuenta con la posibilidad de encontrar o construir su propio camino al éxito.
Comunidades que salen adelante.
Dice el proverbio: “El mejor momento para plantar un árbol fue hace 20 años. El segundo mejor momento es ahora”. Y en Birmingham, Alabama, Ed Farm intenta desarrollar el talento y las habilidades digitales en el sector tecnológico pensando en las generaciones futuras. A principios de 2020, Apple se asoció con las Escuelas de la Ciudad de Birmingham, el Alabama Power Foundation y TechAlabama, para lanzar Ed Farm, con el objetivo de fomentar la equidad educativa y desarrollar la fuerza laboral del mañana. Las oportunidades y la tecnología ahora son más accesibles en este ecosistema educativo impulsado por la comunidad.
Los residentes de todas las edades del área de Birmingham pueden participar en Ed Farm de diversas maneras. El programa Teacher Fellows, con el apoyo de los especialistas de Apple Professional Learning, capacita a educadores apasionados por las innovaciones en el aprendizaje y los ayuda a integrar en sus clases el plan de estudios “Programación para todos” de Apple. Student Fellows cultiva las habilidades de los estudiantes de secundaria y preparatoria mediante el aprendizaje basado en desafíos, que busca aprovechar la tecnología para resolver problemas reales. Y Pathways to Tech es un curso gratuito sobre Swift, el lenguaje de programación de Apple, que también promueve la obtención de credenciales en educación técnica vocacional. Ed Farm tiene una conexión singular con Birmingham, ya que cuenta con el apoyo de la comunidad, en pos de reinventar la educación a través de la tecnología.
“Nunca eres demasiado mayor para aprender algo nuevo. Si no estás aprendiendo, no estás creciendo”, comenta Nikia Hackworth, participante del programa Pathways to Tech.
Para Nikia Hackworth, el programa Pathways to Tech fue una experiencia que cambió su vida y la de su familia. Luego de una larga carrera en la industria financiera, encontró información sobre Ed Farm en las redes sociales que despertó su interés. Cuando describe su experiencia en Pathways to Tech y cómo adquirió más conocimientos sobre programación y tecnología, afirma: “Siempre es buena idea aprender algo nuevo”. Ella comenzó a implementar esas habilidades digitales en una nueva carrera como analista de negocios. Su papel no está basado en escribir un lenguaje de programación, sino en hablar el lenguaje que involucra codificación ya que trabaja como enlace entre los equipos de tecnología y negocios.
Ed Farm no sólo enseña a las personas a programar, también demuestra que el campo de la tecnología tiene múltiples caminos: se puede ser propietario de productos, gestor de proyectos y analista de negocios como Hackworth, y mucho más. Ella cree firmemente que “la educación te ayudará a crecer. Cuanto más sabes, más creces”.
Ed Farm es un aliado en la educación digital de la comunidad y su impacto alcanza a las escuelas primaria y secundaria, la educación superior y la fuerza laboral, transformando a Birmingham en el Silicon Valley del sur. Esta alianza arroja luz sobre oportunidades que sus residentes quizás ni conocían y abre nuevas puertas para el progreso. Según Hackworth, “para crecer, tenemos que salir de la pequeña caja en la que nos encontramos y entrar en otra donde podamos florecer y convertirnos en el gran árbol que se supone que seamos”.
Una cultura de creatividad e innovación.
Hollyhill, un suburbio situado en las afueras de Cork en Irlanda, es la sede europea de las oficinas de Apple. Y es también el hogar de Terence MacSwiney Community College, una escuela que forma parte del Cork Education and Training Board y a la que asisten estudiantes de 12 a 18 años. En el año 2015, esta institución formalizó una alianza con Apple.
Como parte de esta colaboración, los voluntarios de Apple comenzaron a trabajar codo a codo con los profesores de la escuela para implementar los planes de estudio “Programación para todos” y “Creatividad para todos”, que buscan promover la participación de los alumnos mediante la programación y la creatividad. Además, Apple aportó fondos y tecnología con el fin de que los estudiantes pudieran tener experiencias de aprendizaje prácticas.
Esta alianza prendió los motores creativos de toda la comunidad. Los estudiantes de Terence MacSwiney Community College tuvieron acceso a lo último en tecnología y creatividad y, al trabajar con los voluntarios de Apple, comenzaron a descubrir carreras que muchos ni siquiera sabían que existían. “Nuestra institución se llenó de gente interesante que abrió a nuestros estudiantes un mundo de sueños y posibilidades”, afirma Eva Corbett, profesora de posprimaria de Terence MacSwiney.
“Muchos estudiantes no se consideraban personas creativas hasta que asistieron a ‘Creatividad para todos’”, dice Corbett. “Aquí empiezan a dibujar en el iPad y terminan descubriendo
un mundo de innovación”.
Corbett, quien imparte cursos basados en el plan de estudios de Apple, ha sido testigo de los frutos de esta alianza y tiene muchísimas anécdotas de estudiantes de éxito. Una de ellas nació en la clase “Programación para todos”, donde los estudiantes desarrollaron un prototipo de app llamada “Food Fund” (fondo de alimentos). “La app está diseñada para ayudar en un proyecto de acción social también desarrollado por estudiantes, que busca reducir el desperdicio de comida en escuelas locales, redistribuir los alimentos a Penny Dinners, una institución benéfica de la ciudad y, al mismo tiempo, tomar consciencia sobre las necesidades alimenticias de nuestra comunidad”, explica Corbett.
Otra anécdota que comparte es la de un grupo de niñas en la clase “Creatividad para todos” que compuso una canción titulada “Live Out Loud” (Vive en voz alta). Fue un himno tan contundente que resultó seleccionado como parte de una campaña gubernamental a nivel nacional que celebra a la comunidad LGBTI+. Ahora el grupo está usando GarageBand y iMovie para producir sus propias canciones y videos. “En términos de cómo impactará su futuro, esto les dará confianza para seguir creando”, asegura.
En definitiva, concluye Corbett, la alianza con Apple ha traído a Terence MacSwiney Community College la cultura de la creatividad y la innovación. “Muchos estudiantes no se consideraban personas creativas hasta que asistieron a la clase de ‘Creatividad para todos’”, dice. “Aquí empiezan a dibujar en el iPad y terminan descubriendo un mundo de innovación”.
Aprender hoy
para abrir
las puertas del mañana.
Ayudamos a personas de todas las edades a prepararse para su vida profesional mediante el aprendizaje creativo, el desarrollo de habilidades y experiencias prácticas.
Desarrollando confianza. Y apps.
Rutgers University‑Newark tiene la población estudiantil más diversa de todo el país, y una buena parte asiste a la universidad a pesar de estar indocumentados o sin vivienda, entre otros obstáculos. Los profesores saben que, para que esta población ingrese en la universidad y logre graduarse, deben llegar a ellos cuando todavía están en la preparatoria. Y también consideran que uno de los mejores catalizadores del éxito es la programación.
Para ayudar a acortar la distancia entre la preparatoria y la universidad, los directivos universitarios crearon un campamento llamado (G)eneration Code. Liderado por la exvicerrectora, Dra. Sherri Butterfield, y desarrollado en conjunto con Prime Factors Learning Lab, el campamento dura siete semanas y adopta un enfoque holístico para el desarrollo de los jóvenes. Prime Factors es una organización sin fines de lucro fundada por Elliot Ikheloa, natural de Newark y egresado de Harvard, junto con sus amigos de la infancia, Emmanuel Larose y Daniel Gadabor. Con esta organización tienen la oportunidad de retribuir a su comunidad, además de trabajar con Rutgers-Newark para incentivar las ambiciones futuras de los alumnos de escuelas preparatorias locales.
Los estudiantes aprenden a programar con un plan de clases desarrollado por Apple y, en siete semanas, crean una app completamente funcional con el lenguaje de programación Swift en la Mac y el iPad. También promueven el trabajo en equipo realizando actividades prácticas, como escalada en roca y arte, e incluso diseñan un mural que se exhibe en el campus.
Apple apoya el programa con dispositivos Mac y iPad, y pone en contacto a empleados de todos sus departamentos con los estudiantes, demostrándoles que existen oportunidades para ellos en un creciente mundo tecnológico. Apple también proporciona becas y opciones de formación profesional dentro de la red de la Community Education Initiative para ofrecer más avances en el desarrollo de apps y capacitación en Swift.
Muhammed Fakunmoju, estudiante de Rutgers University‑Newark, participó en (G)eneration Code cuando asistía a la escuela secundaria. En ese momento no sabía qué universidad elegir y dudaba de su futuro en la educación superior siendo un estudiante indocumentado. Pero luego de conectarse con la comunidad y los profesores de Rutgers-Newark, y sentir el cuidado y la dedicación de los directivos de la universidad, supo que había encontrado su lugar. Fakunmoju cursa el segundo año en Rutgers-Newark con una beca y es pasante en la oficina del vicerrector. A través de un programa financiado por Rutgers-Newark, la universidad incluso lo ayudó en sus trámites para obtener la ciudadanía. Como considera que su experiencia en (G)eneration Code fue un punto de inflexión en su carrera y su vida personal, ha regresado al programa como instructor ayudante.
“Sólo quiero cambiar el mundo y siento que la informática me ayudará a lograrlo”, confiesa Fakunmoju.
Otros estudiantes de (G)eneration Code también están teniendo una gran influencia en la comunidad de Newark al usar Swift y Xcode en la Mac para crear apps que solucionan problemas sociales. Con una app pueden acceder a la atención médica, y con otra ayudan a personas necesitadas poniéndolas en contacto con bancos de alimentos del área.
La colaboración entre Rutgers-Newark, (G)eneration Code y Apple demuestra la repercusión que pueden tener los cursos de programación inclusivos e integrales para estudiantes, así como la importancia del apoyo institucional.
“Para el personal directivo, se trata de desmantelar sistemas o cambiarlos por otros que permitan a los estudiantes desarrollar su potencial”, expresa la doctora Butterfield.
Inspirando a las nuevas generaciones por medio de la mentoría comunitaria.
Como exprofesora de secundaria convertida en empresaria, Seretha Tinsley ha pasado su vida retribuyendo a su comunidad a través de tutorías. Desde 2009, ha desempeñado varias funciones de liderazgo dentro de la National Coalition of 100 Black Women, Inc., donde encontró inspiración y propósito como consejera de niñas y jóvenes negras de la comunidad, al tiempo que daba paso a una nueva generación de líderes jóvenes dentro de la organización.
Serenity Bryce, una joven que se les unió como pasante en 2020, ahora colabora con Tinsley para liderar el programa educativo más impactante de la organización: “Keeping It 100 with Code”. Aunque las separan varias generaciones, ambas mujeres son brillantes ejemplos de mentoras, que combinan sus experiencias personales en una misión colectiva para enseñar programación a los jóvenes.
“La programación está en todo lo que hacemos. Nos dimos cuenta de que necesitábamos estar informadas y garantizar que nuestras jóvenes tuvieran información, acceso y conocimiento”, dice Tinsley.
Con 62 sucursales en 27 estados, la National Coalition of 100 Black Women, Inc. defiende los intereses de las mujeres y niñas negras en todo el mundo y aspira a ser un catalizador del cambio para la igualdad de género en cuestiones de salud, oportunidades económicas y educación. Son muy pocas las jóvenes negras en el ámbito tecnológico, y Tinsley y Bryce reconocieron la necesidad de un programa que aprovechara las herramientas que las estudiantes ya tenían a mano para enseñarles un lenguaje nuevo que las preparara para carreras en esta industria.
Las alumnas que participan en “Keeping It 100 with Code” no tienen experiencia en desarrollo y muchas provienen de comunidades de bajos recursos. En cinco meses, pasan de principiante a nivel avanzado del plan de estudios basado en “Programación para todos” de Apple. Un sorprendente 80% de las estudiantes se gradúa y comparte sus proyectos de programación, y las de nivel avanzado comparten diseños de apps creadas con Xcode. Apple apoya el programa proporcionando dispositivos, contenido de programación y tutores de todos los equipos de la empresa.
“El programa no sólo enseña a programar, sino que crea un espacio donde las jóvenes pueden ayudar a sus compañeras”, comenta Tinsley.
Tinsley recuerda a una estudiante que era la más introvertida del grupo. Durante la ceremonia de graduación, reveló que tenía una discapacidad de aprendizaje que le impedía participar plenamente en el programa. A lo largo del curso, ganó la confianza para usar su voz y expresar cómo logró algo que creía inalcanzable: aprender a programar.
“Lo mejor de trabajar con estas jóvenes es ver cómo crecen y desarrollan su confianza, listas para salir al mundo. Para mí, esa es la mejor parte de mi trabajo”, dice Bryce. Las estudiantes aprenden a resolver problemas, identificar errores en su código y trabajar juntas para encontrar soluciones. Estas habilidades cruciales se les inculcan para que sean mujeres de éxito y las acompañen toda la vida.
Con la programación como base, Tinsley y Bryce trabajan juntas para mejorar los resultados profesionales de las futuras generaciones de mujeres y niñas negras en la tecnología. Sus historias representan el fruto esperado del programa. Cuando se activa la tutoría, en este caso entre dos mujeres de una organización, puede causar un efecto dominó que incida en los programas que se diseñan y en el efecto que esos programas tienen en las comunidades a las que sirven.
“Trabajar con Seretha es una bendición y un honor”, afirma Bryce. “Como jóvenes de esta generación, al igual que muchas en nuestro programa, buscamos mentoras que nos muestren el camino y nos den la confianza para volar”.
“Estoy convencida de que si esperas lo mejor de alguien, obtendrás lo mejor”, dice Tinsley.
Preparar educadores.
Crear oportunidades.
El Women’s Empowerment Center, una extensión de la cárcel del condado, abrió sus puertas en febrero de 2023 en el centro de Houston, Texas, para ayudar a las reclusas a transformar sus vidas. Los fundadores del programa y su personal las ayudan a conseguir un buen empleo y romper el círculo vicioso del encarcelamiento. El centro brinda apoyo integral que incluye programas educativos diseñados por el Houston Community College y ofrece talleres de capacitación, oportunidades de tutoría, crecimiento personal y sanación emocional.
Una de las clases es Apple Technology Fundamentals, un curso de seis semanas que imparte Jorge Gabitto, conocido entre sus estudiantes como “Mister G”. Gabitto es un apasionado educador con un profundo deseo de retribuir a la comunidad y cambiar la vida de las personas que a menudo se sienten olvidadas.
“Quiero que todo el mundo sepa que quienes están en la cárcel son seres humanos. Necesitan desarrollar destrezas para seguir adelante y conseguir un trabajo”, afirma.
Gabitto cree en el poder transformador de la educación y sabe que es una herramienta vital para la rehabilitación y el empoderamiento. Durante el curso Apple Technology Fundamentals, las internas del Empowerment Center pasan tiempo en un laboratorio de Apple equipado con dispositivos iMac, MacBook Pro y iPad. Aprenden a usar Numbers para crear hojas de cálculo, administrar presupuestos y usar tablas dinámicas para negocios. La escritura es una de las aptitudes principales del programa, por lo que las residentes usan Pages para redactar cartas profesionales, diseñar currículums y escribir a familiares. Muchas reclusas están interesadas en hacer música, por lo que Gabitto preparó lecciones en GarageBand para brindarles formas creativas y terapéuticas de expresarse. También se inician en el mundo de la programación utilizando Swift Playgrounds y tienen un acercamiento a carreras relacionadas a la ciencia, tecnología, ingeniería, artes y matemáticas.
Una de las internas, Christina, ha pasado casi toda la vida luchando contra la adicción y ha estado entrando y saliendo del sistema carcelario desde que tenía 15 años. Descubrió que el Women’s Empowerment Center es diferente a la cárcel del condado: aquí la han ayudado a reconstruirse y ha aprendido habilidades importantes para la vida.
“Tengo metas que quiero lograr y sé que puedo alcanzarlas gracias a este programa. Y ampliar mis opciones profesionales con Apple Technology Fundamentals me ha dado una segunda oportunidad”, dice Christina.
Christina también disfrutó la clase de redacción. “Le escribí una carta a mi padre, que acababa de fallecer, y también le escribí una carta de agradecimiento a mi hija de 11 años porque ha tenido que hacerse cargo de muchas cosas mientras yo estoy aquí”. Christina ha ido adquiriendo más confianza en sí misma y en sus capacidades. “Me las he visto duras. Sé que puedo llegar a ser alguien, lo siento en cada paso que doy. He llegado a un nuevo punto de partida”. Christina planea completar su GED, que es una prueba de equivalencia de la escuela secundaria, y continuar estudiando cuando salga en libertad. Más adelante le gustaría ser electricista.
Esta iniciativa es una prueba irrefutable del poder de las oportunidades y la resiliencia del espíritu humano.
Contribuimos a desarrollar el talento local en Detroit.
Telayne Keith, oriunda de Ohio, dice: “Confío muchísimo en mis estudiantes y en lo que son capaces de hacer. Aunque ellos no lo vean, yo sí”. Keith lleva su pasión por la educación y la comunidad dondequiera que vaya. Es una de las tantas personas talentosas de Detroit que están abriendo caminos en este mundo donde la tecnología tiene un papel preponderante. Fue instructora en el Boys & Girls Clubs del sureste de Michigan (BGCSM), donde enseñaba los principios del diseño enfocado en el ser humano y la creación de prototipos de apps. Ahora, es mentora principal de diseño en la Apple Developer Academy.
En julio de 2021, Apple se asoció con el BGCSM y Grow Detroit’s Young Talent (GDYT) para crear el programa “Code to Career”. Esta iniciativa invita a estudiantes de entre 16 y 18 años a buscar soluciones a desafíos comunitarios en áreas como la moda y la movilidad sostenibles. El objetivo es que los jóvenes desarrollen habilidades clave para su futuro académico y profesional.
Como instructora, Keith incorpora el aprendizaje basado en desafíos de Apple (CBL, por sus siglas en inglés), que busca aprovechar la tecnología para resolver problemas reales. Además, orienta a grupos de estudiantes para identificar necesidades en la comunidad y desarrollar soluciones creativas. “No podemos construir sobre lo que ya tenemos sin expandir lo que sabemos. La curiosidad es vital”, afirma Keith. Sus estudiantes pueden reconocer su propio potencial creativo y su capacidad para lograr un cambio. Al pensar en su infancia, Keith recuerda que su madre usaba métodos similares a los del CBL para animarla a encontrar respuestas a través de la investigación y visitas a museos.
“La educación no necesariamente se ciñe a cuatro paredes y un libro. La educación viene también de lo que aprendes de la gente a tu alrededor, aunque no se vean o piensen como tú”, dice Keith.
Aunque sus estudiantes no tienen experiencia con la programación, al final del curso pueden presentar sus prototipos de apps con confianza ante el jurado y los legisladores de Michigan. Algunos estudiantes se unen al Foundation Program de la Apple Developer Academy, un programa de un mes de duración que sirve de introducción a la programación y al diseño. Algunos incluso buscan inscribirse al programa de un año que ofrece la academia.
Keith sostiene que “siempre hay una manera de forjar tu propio destino y la educación lo hace posible”. Junto a los especialistas de Apple Professional Learning en el BGCSM, Keith está fomentando un ciclo de desarrollo constructivo en las comunidades de Detroit. Y los estudiantes de la Apple Developer Academy están regresando a sus universidades para compartir sus experiencias e inspirar a las generaciones más jóvenes. Para Keith, “la educación en verdad es poder” y permite que cada uno de los miembros de la comunidad contribuya a desarrollar un Detroit aún más extraordinario.
Tradición y tecnología conviviendo en armonía.
Ya’an, en la provincia Sichuan, es el hogar de las primeras plantaciones de té registradas en la escritura china. Los cuatro ríos de la ciudad y los picos que la rodean forman un entorno ideal para su cultivo. Y el té de renombre mundial que aquí se cosecha pronto será igualado por el valiosísimo talento de su gente.
En 2015, Apple comenzó a apoyar a la Fundación China para el Desarrollo Rural (CFRD, por sus siglas en inglés) en un esfuerzo por organizar a los agricultores en cooperativas y capacitarlos para vender sus productos de manera más eficiente. Los líderes de las cooperativas ayudan a desarrollar las habilidades de los agricultores y promover el crecimiento empresarial en todo el ecosistema de comercio electrónico de China. Y en 2020, Apple colaboró con la CFRD en la creación de la Mengdingshan Academy para brindar cada año capacitación en habilidades digitales a más de mil líderes de cooperativas.
Ying Wang, directora de una cooperativa, aprendió a usar la tecnología y dispositivos como el iPad para cultivar de forma más eficiente. Antes lo hacía todo con notas de papel, por eso reconoce que el iPad ha facilitado el aprendizaje de la información y las habilidades necesarias para mejorar la producción de té. Muchos de los agricultores que ingresan a la Mengdingshan Academy nunca habían visto o usado tablets, y líderes como Wang los motivan a aprender, al ver su confianza en que la tecnología fortalece a la comunidad. Más de 3,300 líderes de cooperativas rurales como Wang han recibido capacitación en habilidades digitales en la academia.
Al mismo tiempo, con el apoyo de Apple, la CFRD ha colaborado con socios para desarrollar un plan de estudios sobre entornos ecológicos para la revitalización rural. La capacitación busca promover la concientización sobre el desarrollo sostenible y mejorar las habilidades de los líderes de las organizaciones cooperativas rurales.
“Los directores de las cooperativas son como semillas en las comunidades: echan raíces y brotan”, dice Wang repitiendo las palabras de su maestro mientras reflexiona sobre el impacto de la educación. La academia incorpora un amplio plan de estudios, que abarca desde la eficiencia de los cultivos de temporada y el conocimiento de la cadena de producción hasta el marketing y, en última instancia, la comercialización óptima de los productos. Los agricultores y empresarios pueden aprovechar sus nuevas habilidades digitales para cultivar un té aún mejor para la exportación y prosperar en sus economías locales. “Estamos en la era de la tecnología y la información. Ya no es como antes, en los tiempos de la agricultura tradicional. Desarrollar nuestros talentos nos ayuda a lograr la transformación”, expresa Wang.
Antes de la Mengdingshan Academy, muchos jóvenes de su pueblo emigraban a las ciudades en busca de oportunidades. Ahora eligen quedarse gracias al auge de la industria local, el acceso a tecnología de punta y una formación más práctica. Wang está agradecida de que los jóvenes no se marchen y espera que lleguen nuevos talentos al pueblo para juntos construir una comunidad más próspera.
La CFRD está ampliando el radio de acción de la academia a áreas rurales en más provincias. Apple también ha otorgado becas a 20 líderes destacados de cooperativas rurales para ayudarles a desarrollar mejor sus negocios y sembrar la semilla del autoaprendizaje en un nuevo grupo que transformará el campo.
“La educación influye sobre cada paso que damos en el viaje de la vida”, afirma Wang.
Como directora de una cooperativa, Wang estudia e investiga formas de administrar mejor su empresa y unir a sus miembros. Esto ha permitido que los ingresos de los miembros de la cooperativa aumenten y que sus habilidades digitales mejoren continuamente la calidad de su producto. La reputación de Ya'an con respecto al té sigue creciendo gracias al talento de su comunidad. Wang cree que “al nacer, somos iguales: nadie sabe nada. Sólo la educación nos brinda la capacidad de crear lo que somos. A partir de ahí, tenemos la confianza suficiente para explorar y disfrutar el viaje”.
Educación para impulsar la igualdad.
Nos asociamos y apoyamos comunidades negras, hispanas o latinas e indígenas para ampliar su alcance.
Soluciones locales con trascendencia global.
Para Enactus, una organización sin fines de lucro, tanto crear oportunidades como mejorar el mundo son iniciativas que surgen en la comunidad. De la mano de líderes empresariales de todo el mundo, Enactus fomenta el espíritu emprendedor para resolver problemas locales y genera cambios sostenibles con impacto económico a largo plazo.
El programa Enactus Community Change Makers, una alianza con Apple, logra estos objetivos al ampliar el acceso equitativo a la informática en universidades y ayudar a los estudiantes a desarrollarse profesionalmente en la creciente economía de apps para iOS en México.
Hay nueve universidades en el programa, incluido el Tec de Monterrey, con un total de doce laboratorios de desarrollo de iOS. Cada laboratorio cuenta con dispositivos Mac y iPad donados por Apple y sigue planes de estudio inspirados en el aprendizaje basado en desafíos de Apple y los recursos de “Programación para todos”. Desde 2017, los profesores y directores de laboratorio han enseñado a los estudiantes cómo sacarle todo el partido a la tecnología a través de cursos de programación en Swift y, en 2021, agregaron clases de introducción a la informática para jóvenes de su comunidad.
Para Elvia Rosas, profesora del Tec de Monterrey y Apple Distinguished Educator, esto significa motivar a sus alumnos con preguntas que los hagan reflexionar y pedirles que imaginen el mundo que anhelan.
“La tecnología tiene el poder de crear soluciones que resuelvan algunos de los problemas de nuestra comunidad”, comenta Rosas.
Rosas es una de las profesoras que forman parte del programa Community Change Makers de Enactus. Empezó a enseñar informática en el Tec de Monterrey después de 14 años en la industria tecnológica. Desde que creó su primer programa de software cuando era niña, en un pequeño pueblo cerca de Monterrey, Rosas ha creído que la programación es un medio para construir comunidad y promover un cambio verdadero. Anima a sus alumnos a darse cuenta de que “podemos marcar una diferencia en el mundo”.
Muchos estudiantes comienzan su curso sin experiencia previa en programación. En las primeras cinco semanas, comienzan a desarrollar con Swift y son capaces de crear algoritmos de aprendizaje automático con el entorno CreateML de Apple, además de desarrollar apps de computación espacial para el Apple Vision Pro. Al finalizar el curso de diez semanas, un grupo colaboró con la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud del Tec para desarrollar apps personalizadas, incluida una que usa visión por computadora para ayudar a identificar dónde colocar puntos alrededor de una herida y otra que usa modelos de CoreML para analizar radiografías de pulmón.
En el programa Community Change Makers, cientos de estudiantes participan en hackathons respaldados por Apple, con desafíos propuestos por empresas mexicanas líderes, en los que abordan temas como igualdad de género, salud y bienestar, educación y sostenibilidad. Los estudiantes desarrollan soluciones basadas en apps usando Swift y Xcode, y presentan sus trabajos a empresas que ofrecen vacantes para desarrolladores de iOS.
Gaby Sanchez, miembro del equipo ganador del primer hackathon nacional para mujeres de Enactus, utilizó su experiencia para abrirse camino en el ámbito de la ingeniería de software. “Desde que ganamos, no he parado. He ido a cinco hackathons. Es maravilloso ver a tantas personas, sobre todo mujeres, que comparten tu misma pasión”. Sanchez, estudiante del Centro de Enseñanza Técnica y Superior de la Universidad de Tijuana, sigue en contacto con otras participantes del hackathon para colaborar y pulir ideas.
La presencia de México en los programas internacionales de Enactus sigue creciendo. Cuando el director ejecutivo Jesus Esparza se unió a Enactus en 2009, México era el miembro menos relevante. Ahora el país representa casi el 50% de sus proyectos activos y se enorgullece de haber apoyado a universidades con 15 ganadores en el Apple Swift Student Challenge de 2024. Esparza es un firme creyente tanto de la plataforma global del programa como de su impacto local: “Estamos creando una comunidad internacional. No sólo con ideas, sino con acciones”.
Una rica mezcla de cultura, creatividad y programación.
Santa Fe, Nuevo México, es conocida por su arquitectura histórica, su ambiente artístico vibrante y su distintivo patrimonio cultural indígena, español y mexicano. También sorprende con una industria tecnológica en pleno auge. Pero muchos de sus jóvenes indígenas, hispanos o latinos no tiene el mismo acceso a estas oportunidades tecnológicas.
El Santa Fe Community College se propuso acortar las distancias mediante la Santa Fe Creative Coding Initiative para ofrecer más opciones de capacitación en creatividad digital y programación a estudiantes y educadores de toda la ciudad. Con el apoyo de la Community Education Initiative de Apple, esta alianza propone un plan de estudios en programación unificado para las escuelas públicas de Santa Fe, Santa Fe Indian School, Boys & Girls Club Santa Fe/Del Norte y STEM Santa Fe. Los alumnos y profesores aprenden en el salón de clases, en congresos, en laboratorios tecnológicos recién inaugurados y en el campus de la universidad.
Para la Santa Fe Indian School (SFIS), formar parte de esta alianza significó equipar sus laboratorios de informática con dispositivos iPad y Mac proporcionados por Apple, además de reactivar el departamento dirigido por la instructora Kate Sallah. Esta escuela, fundada originalmente por el gobierno federal como herramienta para integrar a los niños indígenas, ahora admite a jóvenes de tribus de todo el suroeste respetando y conservando su cultura y tradiciones. Además de los cursos sobre idiomas nativos y preservación de la tierra, el programa de informática, en colaboración con la Santa Fe Creative Coding Initiative, incorpora creatividad digital y programación en sus planes de estudio. Los estudiantes trabajan en proyectos enfocados en las identidades de sus propios pueblos y adquieren habilidades para compartir con su comunidad local.
Sallah anima a los alumnos a programar sobre temas que les interesan y también les enseña a enlazar sus dispositivos Apple con plataformas electrónicas programables como Arduino y otros equipos. Muchos de sus alumnos se inspiran en la dinámica cultura artística de Santa Fe. Un grupo de secundaria está construyendo una guitarra láser basada en una obra de la exposición de arte interactiva Meow Wolf en Santa Fe. Los alumnos de STEM Santa Fe asesoran a otro grupo que está creando una app en Swift en el iPad. Otros proyectos se inspiran en obras de arte indígenas y latinas.
“Los niños usan los conocimientos que tienen de sus orígenes y cultura”, afirma Sallah. “Puedes expresarte de la forma que quieras”.
La Santa Fe Creative Coding Initiative ha tenido un efecto dominó, ya que los estudiantes no solo forjan lazos entre escuelas, sino también dentro de su comunidad. Ruby, la hija de Sallah, alumna de la Santa Fe High School, ayuda a otros estudiantes de la SFIS con los proyectos de “Creatividad para todos” en el taller “STEM Pathways for Girls” de la STEM Santa Fe. Este liderazgo entre pares es sólo un ejemplo de cómo el programa inspira a los jóvenes de Santa Fe. Ruby también es mentora de estudiantes de secundaria y preparatoria que asisten a las clases de informática de Sallah.
“Este programa puede abrir muchísimas puertas”, dice Ruby. “Y eso es fundamental para el futuro profesional”.
Programación que llega a nuevos campus.
La Dra. Robbie Melton, vicepresidenta asociada de National SMART Global Technology Innovation Strategies y vicepresidenta interina de asuntos académicos de la Universidad Estatal de Tennessee, ha llevado el programa HBCU C2 hacia territorios desconocidos desde su lanzamiento en 2019.
En 2022, el HBCU C2 cruzó las fronteras de Estados Unidos y llegó a África para beneficiar a estudiantes de secundaria y universitarios que cursaban carreras de dos y cuatro años en Monrovia y Sudáfrica. El programa ha tenido tanto éxito en esos países que Ghana también lo solicitó.
En colaboración con la HBCU Africa Education Coalition (HAEC), el programa ofrece su curso de programación de Apple acreditado por la TSU y capacitación para la certificación Apple Teacher a través de su nuevo centro SMART ubicado en la St. Martin de Porres School en Ghana.
“Vivimos en un mundo globalizado que necesita profesionales globalizados. El HBCU C2 es muy beneficioso para Ghana por su capacidad para abordar la carencia de habilidades digitales del país, fomentar la innovación y el espíritu emprendedor en un ecosistema tecnológico próspero y promover el desarrollo inclusivo empoderando a comunidades diversas”, afirma la Dra. Melton.
El curso era posible gracias a HBCU C2, una iniciativa de la Universidad Estatal de Tennessee en alianza con Apple que buscaba revitalizar instituciones de enseñanza superior históricamente para personas negras (HBCU, por sus siglas en inglés) y generar oportunidades en materia de creatividad y programación en sus campus y comunidades vecinas. HBCU C2 promueve la innovación y la equidad educativa, y busca abordar desafíos comunitarios mediante el diseño de apps y Swift, el lenguaje de programación de Apple.
Desde el lanzamiento del programa, Apple ha contribuido de diversas formas, ya sea con becas, recursos tecnológicos o el diseño del plan de estudios y los contenidos del curso. El equipo de Apple también ayudó en la capacitación de los profesores para impartir las clases mediante el plan de estudios Apple Teacher.
Además de los programas en Ghana, Monrovia y Sudáfrica, el programa ha llegado a 46 HBCU, que se han posicionado como faros de innovación en sus comunidades. Parte de este compromiso es el establecimiento de un “equipo de innovación” que se encarga de implementar el programa a nivel local, diseñar al menos dos cursos cada año académico con estrategias de creatividad y programación, y ofrecer experiencias educativas extraescolares en esas dos áreas a grupos de todas las edades mediante la educación primaria y secundaria, programas extracurriculares y organizaciones comunitarias locales.
Este compromiso compartido ha sido una poderosa herramienta para generar oportunidades que diversifiquen la fuerza laboral en los ámbitos de la creatividad y la tecnología, cerrando así las brechas digitales presentes en sectores minoritarios con baja representación.
“Esta mayor presencia en África representa un avance en nuestro compromiso con la educación global y el desarrollo de alianzas internacionales”, afirma la Dra. Melton.
Promover el acceso y las oportunidades para estudiantes de comunidades hispanas y latinas.
Durante la mayor parte de la infancia de Amanda Quintero, estudiar en la universidad no fue una opción. Como hija de inmigrantes que no habían cursado estudios superiores, era de esperarse que, una vez terminada la preparatoria, sencillamente se pusiera a trabajar. No fue hasta finales de su último año de preparatoria que un profesor suplente la animó a enviar su solicitud a la universidad. Ese encuentro fortuito cambió por completo el rumbo de Amanda. A partir de ese momento, comenzó a confiar en que efectivamente tenía todo lo necesario para ir a la universidad, y que era ahí donde debía estar.
Hoy en día, la Dra. Quintero ha hecho suya la misión de procurar que otros estudiantes universitarios de primera generación accedan a las mismas oportunidades que ella tuvo. Destacada experta en instituciones de servicio para los hispanos (HSI, por sus siglas en inglés) y reconocida innovadora en materia de éxito estudiantil, la Dra. Quintero trabaja actualmente como asesora sénior de la presidencia para Inclusive Excellence y como funcionaria de innovación y equidad del Global HSI Equity Innovation Hub de la Universidad Estatal de California en Northridge (CSUN, por sus siglas en inglés).
El CSUN Hub, que se lanzó en alianza con la Iniciativa de igualdad y justicia racial (REJI) de Apple, busca generar un verdadero cambio en la vida de estudiantes universitarios de primera generación en Estados Unidos, conectando una gran diversidad de talentos y oportunidades. Y con el visionario liderazgo de la Dra. Quintero, esta iniciativa se esforzará para que las instituciones de servicio para los hispanos a nivel nacional doten a los estudiantes latinos y de otras comunidades minoritarias históricamente excluidas de todas las habilidades necesarias para triunfar en carreras relacionadas con las ciencias, tecnología, ingeniería, arte y matemáticas (STEAM, por sus siglas en inglés), con un primer centro regional en Miami Dade College (MDC). De esta forma, MDC trabajará para promover resultados equitativos en los itinerarios educativos STEAM, en la preparación para el mercado laboral y en las oportunidades de transición a profesiones en estas ramas. También compartirá prácticas basadas en la evidencia y desarrollará una comunidad de prácticas para instituciones de servicio para hispanos. Las instituciones Santa Fe Community College y Rutgers University‑Newark colaborarán en el programa con propuestas educativas que forman parte de un registro nacional de prácticas innovadoras al servicio de grupos marginados.
La meta es equipar a una comunidad de estudiantes en gran medida de primera generación con las experiencias académicas y las habilidades necesarias para transformarse en la primera generación de profesionales en carreras STEAM. El Global HSI Equity Innovation Hub busca alcanzar este objetivo conectando instituciones de servicio para los hispanos con recursos, líderes de opinión y otros centros de la misma categoría, para compartir las mejores maneras de progresar hacia una equidad educativa y una futura fuerza laboral más inclusiva y diversa.
“La diversidad de talento es un elemento que nos beneficia a todos”, dice la Dra. Quintero. “Es un círculo cerrado de retribución, ya que muchos de los estudiantes invierten su talento en las mismas comunidades de las que provienen, dando jaque a la desigualdad intergeneracional”.
“El día de mi graduación fue la primera vez que mi familia puso los pies en un campus universitario”, recuerda la Dra. Quintero. “Y no quiero que esa sea la experiencia de otros estudiantes”.
El Global HSI Equity Innovation Hub representa un cambio de paradigma. Ya no se trata de qué deben hacer los estudiantes para triunfar, sino qué necesitan hacer las instituciones de servicio para los hispanos para ayudarlos de una manera efectiva. Esto implica que quienes ocupan puestos de liderazgo tengan la responsabilidad de repensar estructuras, políticas y prácticas desde la óptica de la equidad. Y permite a estudiantes, profesores y personal transformar las instituciones, algo que la Dra. Quintero considera esencial a la hora de abordar una educación centrada en la igualdad. Otra de las propuestas puntuales de los programas es lograr la participación de las familias de estudiantes universitarios de primera generación, que muchas veces quedan excluidas de la vida en el campus.
“El día de mi graduación fue la primera vez que mi familia puso los pies en un campus universitario”, recuerda. “Y no quiero que esa sea la experiencia de otros estudiantes”.
Los programas concebidos para toda la familia y la atención a los estudiantes y su círculo más cercano garantizarán que el acceso a la educación superior y a un título universitario no sean fruto de la casualidad.
Aprender sobre la cultura y la historia de las Naciones Originarias.
Hasta hace poco, la historia de las Primeras Naciones estuvo prácticamente ausente de los planes de estudios en Canadá. Las regulaciones históricas y en curso de la Ley Indígena de 1876, que intentó asimilar una extensa y heterogénea población de las Primeras Naciones a la cultura dominante, y el impacto de las escuelas residenciales, que durante generaciones despojó de su identidad a 150,000 niños, a menudo se pasaron por alto. La última escuela residencial de Canadá cerró sus puertas en 1997, lo cual contribuyó a impulsar esta enseñanza de historia y cultura de las Primeras Naciones en la actualidad.
En el año 2015, la Asamblea de las Primeras Naciones (AFN, por sus siglas en inglés) reunió a los responsables educativos de las Primeras Naciones de todos los rincones de Canadá. La AFN exhibió una colección de artefactos, mapas de escuelas residenciales y otros materiales para ayudar a los educadores a enseñar la historia del país desde la óptica de las Primeras Naciones. La demanda de esta colección fue impresionante.
Esto motivó a Apple a asociarse con la AFN para aumentar el acceso a la educación de los estudiantes indígenas y no indígenas. Renee St. Germain, directora de Lenguajes y Aprendizaje de la AFN y miembro de la Primera Nación Rama, afirma: “Es difícil para maestros y estudiantes obtener recursos confiables sobre historia y cultura”. St. Germain es parte del proyecto en curso con Apple para habilitar materiales digitales relacionados con la historia de las Primeras Naciones.
El resultado es una colección que brinda herramientas educativas prácticas sobre los derechos, la cultura y la historia de las Primeras Naciones. It’s Our Time: The AFN Educational Toolkit puede descargarse gratis desde Apple Books e incluye una recopilación interactiva para ayudar a educadores indígenas y no indígenas a integrar nuevas perspectivas en sus salones y fomentar un espíritu de cooperación, comprensión y acción.
“La educación es fundamental para abordar grandes problemas y eliminar la discriminación y el racismo sistémicos”, comenta St. Germain. “El sistema educativo por el que todo el mundo pasa debe modificarse para brindar el apoyo que la sociedad y la cultura de hoy necesitan”.
Apple ha contribuido con la AFN en la elaboración de 15 Apple Books en inglés y francés. Los esfuerzos combinados de los Apple Distinguished Educators, Community Education Initiative de Apple, especialistas en pedagogía, líderes indígenas del sector educativo y organizaciones de activismo continúan alentando a los docentes en la enseñanza de la historia de las Primeras Naciones. St. Germain cree que “cualquier momento es bueno para iniciar el diálogo, sin importar la edad”.
Los maestros ahora pueden integrar eficazmente las Primeras Naciones en los planes de estudio y generar más debate en torno a esta delicada historia. “La equidad está al frente de todo lo que hace la Asamblea y la colección de herramientas educativas está centrada en las Primeras Naciones”, asegura St. Germain. También enfatiza lo importante que es para los estudiantes verse representados con precisión. “Hay estudiantes de las Primeras Naciones en casi todos los salones”. El cambio sistémico está ganando terreno en todo Canadá, y la colección de herramientas educativas impulsa cada vez más una enseñanza equitativa para los estudiantes de las Primeras Naciones y de las generaciones futuras.
Ahora St. Germain busca crear alianzas con juntas escolares para ampliar el alcance de la colección. Como la comunidad de las Primeras Naciones es muy diversa, Apple y la Asamblea siguen colaborando con sus líderes del sector educativo para elaborar ediciones específicas para cada región. De esta forma, la colección de herramientas refleja mejor sus tradiciones, idiomas y culturas.
Según St. Germain, aún queda trabajo por hacer para las Primeras Naciones, desde construir viviendas hasta luchar por la igualdad de derechos y seguridad cultural para estudiantes y maestros. La educación es parte del proceso. Como dice ella: “Si no podemos encontrar equidad en la educación, ¿dónde la vamos a encontrar?”.
Nuestro trabajo en pro de la educación va aún más allá.
Educación básica y preparatoria
La tecnología de Apple ayuda a los profesores a despertar la creatividad en los alumnos con poderosos productos, soporte y programas que crean experiencias mágicas de aprendizaje.
Estudiantes universitarios
Los poderosos dispositivos Apple trabajan juntos y son compatibles con todo lo que necesitas en la universidad para que puedas enfocarte en lo que más te importa.
Educación superior
Apple lleva la innovación a toda la universidad: desde avances en investigación y deportes hasta mejoras en el día a día de maestros y estudiantes.
Descubre más acerca de Apple en la educación.
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