Descubre la única catedral románica de Cataluña: un ejemplar único del siglo XII que está en los Pirineos

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La Catedral de Santa María de Urgell, ubicada en la Seu d'Urgell, Lleida, es un verdadero tesoro arquitectónico y cultural. Considerada la única catedral íntegramente románica de Cataluña, su historia y su estructura imponente la convierten en un referente del patrimonio medieval en los Pirineos, atrayendo a visitantes de todo el mundo. Este monumento, construido entre los siglos XI y XII, es una joya que combina espiritualidad, arte y legado histórico.

El lugar donde se levanta esta magnífica catedral fue un importante enclave religioso desde el periodo visigodo, cuando ya existía un templo cristiano primitivo. Durante la etapa carolingia se edificó una iglesia prerrománica, pero no fue hasta el siglo XI que se impulsó la construcción de la actual catedral bajo el liderazgo del obispo Ermengol, concluyendo su edificación en el siglo XII bajo el obispado de Odón de Urgell.

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Sara Castellanos

Su diseño sigue el estilo románico lombardo, destacando por su robustez y una decoración austera. Elementos como lesenas, arcos ciegos y columnas aportan equilibrio y sobriedad, mientras que su estructura refuerza su carácter monumental y casi defensivo, un sello distintivo de las construcciones de esta época.

Una joya del románico catalán

La Catedral de la Seu d'Urgell no solo es un hito arquitectónico, sino que desempeña un papel singular en la historia política de la región. Su obispo ostenta el título de copríncipe de Andorra, un rol que comparte con el presidente de Francia, en virtud de un acuerdo que se remonta al siglo XI. Este detalle añade una dimensión histórica y diplomática que pocos monumentos pueden ofrecer.

El interior de la catedral revela una planta basilical de tres naves separadas por pilares, un transepto y una cabecera con cinco ábsides, de los cuales solo el central se proyecta al exterior con una decoración de arquillos ciegos y columnas. En su ábside principal se encuentra una imagen románica de la Virgen de Andorra, datada en el siglo XIII, que sigue siendo un símbolo de devoción y admiración artística.

El claustro, construido en el siglo XII, es otro de los espacios destacados. Sus galerías de columnas dobles sostienen 51 capiteles tallados que narran escenas bíblicas y motivos vegetales, convirtiendo este lugar en un auténtico museo al aire libre de la iconografía medieval.

La Catedral de Santa María de Urgell continúa siendo un centro activo de la vida religiosa y cultural. Además de albergar la sede del obispado, cuenta con el Museo Diocesano, que guarda piezas de gran valor histórico como el "Beatus de La Seu d'Urgell", una de las copias ilustradas del Comentario al Apocalipsis de Beato de Liébana, considerada una obra maestra de la iluminación medieval.

Llegar a este rincón de los Pirineos es sencillo desde Barcelona, con un trayecto de aproximadamente dos horas y media en coche, siguiendo la C-16 y la C-14. La visita, accesible por un coste máximo de cuatro euros, ofrece una experiencia única que conecta historia, espiritualidad y arquitectura en un solo lugar.

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La Catedral de la Seu d’Urgell es una parada imprescindible para quienes buscan comprender el legado románico en Cataluña. Cada rincón de este templo, desde sus muros austeros hasta los capiteles esculpidos del claustro, narra historias de fe, poder y resiliencia. Su papel como centro religioso, cultural y diplomático sigue vigente, ofreciendo a los visitantes una ventana al esplendor medieval en un entorno único.