Morfopsicología: Los 3 niveles del rostro 2/3- LOS PÓMULOS (Nivel Medio/Emocional).
Ayer estaba pensado sobre los contenidos que he compartido y cuáles serán los siguientes, me di cuenta de que ya son varios los artículos en relación a las herramientas interpersonales, y que contamos con algunos items que son lo suficientemente indicativos para establecer un marco de diálogo durante una intervención.
En este artículo vamos a ver el nivel medio del rostro, donde se encuentran los pómulos y la nariz. En el próximo artículo hablaremos con detalle de la nariz.
Conociendo la tendencia psicológica en función de la forma de los pómulos, nos va servir para obtener información de la persona que esté más dispuesta a hablar, elegir las palabras y el uso del lenguaje en función de si es más o menos emocional. Lo cual es más completo si aplicamos lo visto en la zona alta del rostro y la emociones universales.
Hacer las intervenciones de manera personalizada es gratificante ya que aportamos más valor, el tiempo parece ir a otro ritmo y en mi opinión, tenemos mejor percepción de nosotros mismos.
El artículo está hecho de manera que resulte practico. Se compone de 5 partes:
¡EMPEZAMOS!
Morfología y conceptos generales
El pómulo es la extensión que ocupa el hueso malar en ambos lados del rostro, siempre en relación con los elementos fundamentales de otras áreas faciales.
Ni la dilatación ni la retracción de los pómulos deben interpretarse de manera positiva o negativa. Simplemente son formas diferentes de experimentar las emociones.
El tamaño, ya sea grande o pequeño está relacionado con la extroversión o la introversión. Esta regla se aplicará junto con la tonicidad y la apertura o cierre de las fosas nasales, aunque por ahora y como norma general por ahora vamos a utilizar los conceptos explicados en este artículo.
En los pómulos se puede observar la capacidad para la amistad, la ternura, el amor propio, los romances o el resentimiento. Reflejan y nos informan del nivel de conexión afectiva.
Existen diversas actitudes y comportamientos relacionados. Se habla de la habilidad de amar, de tener una vida emocionalmente rica, de simpatizar, de la amistad, la camaradería, las alegrías y la tristeza, entre otros.
Se reflejan sentimientos sociables, familiares, el amor hacia la pareja o los hijos, la ternura, la delicadeza, la brusquedad, la provocación y el odio. En resumen, son diferentes formas de expresar emociones y afecto.
Los pómulos actúan como un archivo de recuerdos de naturaleza emocional. En ellos se registran todas aquellas emociones y sentimientos que en algún momento de nuestra vida fueron significativos. Cada uno de estos recuerdos puede ser evocado por un detalle, ya sea una palabra, un gesto, un sonido, un color, una experiencia, una situación o cualquier otro elemento insignificante que lo active cada vez que se repite.
A continuación vamos a ver de manera más concreta sus características.
Cuando son Dilatados (Grandes)
Características a favor:
Características en contra:
Cuando son Retraídos (Pequeños)
Características a favor:
Características en contra:
Cuando los pómulos son Altos
Características generales:
Cuando los pómulos son Bajos
Características generales:
Cuando los pómulos se encuentran en Proyección
Los podremos diferenciar porque se encuentran más próximos a la nariz.
Características a favor:
Características en contra:
Cuando los pómulos se encuentran en Contención
Los podremos diferenciar porque se encuentran poco proyectados a la nariz, más próximos de los ojos.
Características a favor:
Características en contra:
REFLEXIÓN FINAL
Los pómulos juegan un papel clave en la interpretación de cómo una persona se relaciona emocionalmente con los demás. Ya sean dilatados o retraídos, altos o bajos, se proyecten o estén en contención… su forma refleja estilos únicos de vivir y expresar las emociones.
Las personas con pómulos dilatados tienden a buscar abundancia y variedad en sus relaciones afectivas, mientras que quienes tienen pómulos retraídos prefieren la estabilidad y profundidad emocional. Además, la altura de los pómulos influye en la calidad o simplicidad con la que valora sus interacciones emocionales. Mientras que la proyección dinamiza la comunicación en este plano y la contención la frena.
Por último, como hemos visto en los pómulos, las leyes de dilatación y retracción son una norma general en Morfopsicología. Conociendo las funciones de las diferentes partes del rostro, podemos cuantificarlas e interpretar sus preferencias en el comportamiento.
Si habéis llegado hasta aquí, quiero agradeceros la lectura del artículo. En próximas publicaciones, seguiremos conociendo más herramientas interpersonales con las que ampliar nuestro conocimiento y nos harán mejorar en nuestro trabajo.
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