¿Cuáles son las tendencias emergentes y las mejores prácticas en la gestión de riesgos ambientales y sociales?

1 Presión regulatoria

Uno de los principales impulsores de la ESRM es la creciente presión regulatoria de diversas autoridades y normas, como el Pacto Verde de la Unión Europea, el Grupo de Trabajo sobre Divulgaciones Financieras relacionadas con el Clima (TCFD), los Principios de Ecuador y las Normas de Desempeño de la Corporación Financiera Internacional. Estos marcos requieren que las organizaciones divulguen y gestionen sus riesgos ambientales y sociales, como las emisiones de gases de efecto invernadero, la pérdida de biodiversidad, las violaciones de los derechos humanos y la participación de la comunidad. Para cumplir con estas regulaciones, debe adoptar políticas y procedimientos sólidos de ESRM, realizar evaluaciones de impacto y diligencia debida, e informar sobre su desempeño y progreso.

2 Expectativas de los grupos de interés

Otro factor clave que influye en la ESRM son las crecientes expectativas de los grupos de interés por parte de clientes, inversores, empleados, proveedores y la sociedad civil. Estas partes interesadas exigen cada vez más transparencia, rendición de cuentas y responsabilidad de las organizaciones con respecto a sus impactos y contribuciones ambientales y sociales. También buscan evidencia de resultados positivos y creación de valor, no solo mitigación y prevención de riesgos. Para cumplir con estas expectativas, debe alinear su estrategia de ESRM con su propósito y valores corporativos, interactuar con sus partes interesadas de manera regular y proactiva, y demostrar su impacto y beneficios a través de la narración y los datos.

3 Innovación tecnológica

Una tercera tendencia que da forma a la ESRM es la rápida innovación tecnológica que ofrece nuevas oportunidades y desafíos para la gestión de riesgos ambientales y sociales. Tecnologías como la inteligencia artificial, la cadena de bloques, el big data y la teledetección pueden ayudarle a recopilar, analizar y comunicar la información de ESRM de forma más eficiente y eficaz. También pueden permitirle monitorear y administrar su desempeño ambiental y social en tiempo real, identificar y abordar problemas emergentes y optimizar el uso de sus recursos y la gestión de residuos. Sin embargo, estas tecnologías también plantean nuevos riesgos, como los ciberataques, las violaciones de datos, los dilemas éticos y la exclusión digital. Para aprovechar estas tecnologías, debe garantizar su fiabilidad, seguridad y accesibilidad, así como su alineación con los objetivos y principios de su ESRM.

4 Acción colaborativa

Una cuarta tendencia que caracteriza a la ESRM es la necesidad de una acción colaborativa entre diversos actores y sectores para hacer frente a los complejos e interconectados desafíos ambientales y sociales a los que se enfrenta el mundo actual. Estos desafíos, como el cambio climático, la pérdida de biodiversidad, la pobreza, la desigualdad y los derechos humanos, requieren esfuerzos colectivos y coordinados de los gobiernos, las empresas, la sociedad civil y la academia. Al colaborar con otras partes interesadas, puede compartir conocimientos, recursos y mejores prácticas, crear sinergias y asociaciones, y amplificar su impacto e influencia. Para fomentar la acción colaborativa, es necesario identificar y comprometerse con las partes interesadas relevantes, establecer objetivos y métricas comunes, y generar confianza y respeto mutuo.

5 Mejora continua

Una quinta tendencia que define a la ESRM es la necesidad de mejora continua y aprendizaje para mantenerse al día con el contexto y las expectativas ambientales y sociales dinámicos y en evolución. La ESRM no es un proceso único o estático, sino cíclico y adaptativo que requiere una revisión y evaluación periódicas de su desempeño y progreso, así como retroalimentación y aprendizaje de sus partes interesadas y pares. Al mejorar continuamente sus prácticas de ESRM, puede mejorar su conciencia y gestión de riesgos, identificar y aprovechar nuevas oportunidades y aumentar su resiliencia y competitividad. Para lograr una mejora continua, es necesario establecer objetivos e indicadores claros y medibles de la ESRM, supervisar e informar sobre sus resultados e impactos, e incorporar las lecciones aprendidas y las mejores prácticas en sus planes y acciones de la ESRM.

6 Esto es lo que hay que tener en cuenta

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