Publicación de Ambrosía

Los eventos sociales no tienen por qué ser sólo para cientos de invitados, hay ventajas claras si optas por un evento íntimo de pocas personas (y no sólo nos referimos al presupuesto): 1. Invitar sólo a la gente que quieres ver: A veces, las listas de invitados se hacen enormes por toda la gente que nos sentimos obligados a invitar, ya sea por el trabajo o por la familia, pero en un evento íntimo, puedes reducir la lista a esas personas que no pueden faltar en ese momento especial. Claro que eso significa que habrá gente que se sienta excluida, pero puedes resolverlo con una conversación honesta sobre el por qué no fueron invitadas. 2. Más opciones de lugares: Hay pocos espacios para un evento de más de doscientas personas, pero un venue histórico o incluso tu casa pueden ser un lugar perfecto para un evento íntimo, en el que todo mundo se sienta parte de la celebración; esto también te permite pasar más tiempo con todas las personas invitadas. 3. Atención al detalle: Desde las invitaciones hasta los recuerdos y el plan de asientos, la atención que se tiene al detalle en un evento de 50 personas contra uno de 350 es completamente diferente, tanto tú como la persona experta que te acompañe en la organización podrán dedicar más tiempo a construir una experiencia única. 4. Menos estrés: Muchas personas experimentan ansiedad social, y sumado a los nervios de un evento importante, la experiencia puede ser muy difícil de llevar, pero una reunión sólo con las personas más cercanas reduce el estrés y permite que todo mundo disfrute el evento.

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