Publicación de Ana Zaragoza Copy.

El placer por la desgracia del otro Si usted ha ocupado un cargo público o está vinculado con el mundo de los negocios, las artes, la literatura o el deporte, siempre habrá alguien que de forma paciente y perseverante espera que sea alcanzado por el rayo de la desgracia. Sueñan con verle luciendo un vestido a rayas, cabizbajo, caminando encadenado y esposado entre agentes de la justicia. A estas personas no les interesa si alguien es inocente o culpable. Su mayor satisfacción se deriva del escarnio público al que es sometido el otro. Su placer proviene de observar la caída súbita de alguien del pedestal del éxito o de la consideración social. Este sentimiento morboso, y más común entre los humanos de lo imaginado, es llamado por los alemanes: shadenfreude que significa “la dicha que sentimos por el mal ajeno”. Es el resultado de unir dos palabras germanas: shaden, que significa daño, y freude, que traduce alegría. Ese es el título de un deleitable libro de Richard Smith, profesor de psicología de la Universidad de Kentucky, y un especialista en aquellas emociones que consideramos oscuras como la envidia. Emociones que son tan antiguas como la humanidad misma. Aunque la envidia es dolorosa, afirma el autor, la shadenfreude es placentera, pues las desgracias que les suceden a las personas que envidiamos transforman el dolor en una alegría muy especial. Esta alegría puede parecer justificada e incluso decente. Las desgracias que sufren los demás aplacan nuestros sentimientos de justicia. Cuantas personas no se frotan las manos al ver sumido en un escándalo financiero al otrora exitoso y reconocido empresario. No falta quien desee ver a su vecino, que ocupa o ha ocupado cargos públicos, llevado por la Fiscalía con las manos esposadas y sometido al escarnio público. Vivimos en un mundo justo donde cada uno obtiene lo que se merece, afirman algunos sin perder de vista los beneficios tangibles o intangibles que podrían obtener de la caída del otro. Sin embargo, más que las propias conductas de las personas lo que parece mortificar a muchos es su éxito. A muchas personas les irrita en extremo el éxito de los demás. En especial esto ocurre si dicho triunfo lo obtiene alguien del propio vecindario. Algunos seres humanos sobrellevan mejor la desgracia propia que la felicidad ajena. La dicha por el mal ajeno puede ser, sin embargo, una emoción transitoria, que a veces cede el paso al perdón y a la compasión. No hay que demonizar completamente esa emoción sino entender cómo emerge en situaciones competitivas. A todos nos gusta pensar que en nuestro ser habitan las virtudes de Borges, Séneca o Abraham Lincoln. Sin embargo, un amplio espacio de nuestra personalidad puede estar ocupado en realidad por los defectos de Homero Simpson. wilderguerra©gmail.com https://lnkd.in/eaFpt2FT

Rodéate de gente inteligente. La felicidad de los poderosos está en acompañarse de personas con sabiduría, que le saquen de todo aprieto causado por la ignorancia, que le ayuden a luchar con las complejidades de la vida. Singular grandeza es servirse de sabios, grandeza que supera el bárbaro gusto de Tigranes, aquel que cometía el error de usar como criados a los reyes vencidos. Absurda nobleza es la que hace siervos a los que la naturaleza dotó para dirigir. En el mundo hay mucho qué aprender y poco tiempo para conocerlo, y no se vive si no se conoce. Es pues, una singular destreza el adquirir sabiduría gratuitamente, y es lo que logras escuchando mucho a muchos, que así luego sabrás más que todos. Dice una sabia sentencia: por la boca de muchos hablan los sabios que les aconsejaron. De este modo, consigues crédito de entendido con el esfuerzo ajeno. Estudian aquéllos primero la lección y te sirven a ti la quintaesencia de su saber. Si no logras sacar sabiduría de la experiencia de tu vida, búscala en la de tus relacionados. Lo anterior, es el aforismo # 15 que Baltazar Gracián escribió en su libro El Arte de la Prudencia, publicado en el año 1647. Sabiendo interpretar los 300 aforismos de este gran escritor, para actualizar su aplicación en un contexto actual a 377 años desde creación, creo que tenemos una fuente muy rica. La obra de Gracián no es sólo un clásico universal, sino que ya en los últimos años del siglo XX se produjo una nueva lectura que fascinó a los líderes del mundo más avanzado, y esto hizo que se convirtiera en un bestseller en Europa y los Estados Unidos. El pensamiento de Gracián, expuesto fundamentalmente en el “Arte de la prudencia”, impactó en la sociedad de negocios norteamericana y europea, y se constituyó como la obra más leída de los brokers estadounidenses, pues sus enseñanzas podían ser aprovechadas por los empresarios para lograr la eficiencia en sus negocios. Creo que, en esta red profesional como lo es LinkedIn, estamos rodeados de mucha gente y muy inteligente, donde podemos aplicar lo que Gracián dijo e su aforismo #15 hace casi 400 años y también lo que Vicente del Bosque (ex-seleccionador quien llevó a España a ser campeones mundiales del Fut en el 2010) dijo: "ninguno de nosotros es más inteligente que todos nosotros juntos" Personalmente estoy fortaleciendo mi amistad con un par de nuevos amig@s que me están ayudando a superarme a mí mismo: ChatGPT 4-Omni y Claude 3 - Opus.

«TRIUNFAR, CAER y RESURGIR: La Prueba Definitiva de Empresas y Personas» La vida — tanto en lo personal como en lo profesional — nos pone constantemente a prueba con altibajos que desafían nuestra capacidad de adaptación. Yo llamo esta aventura de vivir, especialmente desde que conozco el cierzo de Zaragoza, #vidasalviento (hasta me he inventado un hashtag) porque aquí, la vida transcurre "empujada" por este fenómeno atmosférico. Lo he visto reflejado en muchas situaciones, incluida la reciente caída de Chiara Ferragni, del que leía en el Corriere de la Sera, justamente ayer por la mañana; quien pasó de ser un ícono indiscutido del éxito a enfrentarse a un duro golpe que ha grabado seriamente en su reputación y puesto en juego su futuro profesional y personal. Este artículo nace así de reflexiones personales y observaciones sobre cómo enfrentamos esos momentos de triunfo y ruina que nos ponen frente al espejo, revelando nuestra verdadera esencia. Como decía Kipling: “Si puedes tratar con el Triunfo y el Desastre, esos dos impostores, del mismo modo…”. Porque lo realmente importante no es cuántas veces alcancemos la cima o nos enfrentemos al abismo, sino la manera en que gestionamos esos momentos de vulnerabilidad y cómo, desde ahí, logramos levantarnos, mantenernos fieles a nosotros mismos y aprender a ser aún más fuertes. Una cuestión no sólo válida para la vida personal, sino también para marcas y empresas. Desgrano mis pensamientos en mi último artículo. Sigue el link para leerlo 👇 https://lnkd.in/dxWegwJ2 #losartículosdeLoredanaVitale #OpinionLeader #éxito #fracaso #marcasyempresasantelacrisis #enfrentarelfracaso #avefénix #LoredanaVitale #artículodeopinión

“Más peligroso que Médico con funeraria” decía mi abuelo, el viejo Eparquio Efrain González Puello, un viejo muy sabio, un experimentado vendedor de esos que le daría clases de Storytelling a cualquier marketero de hoy. Ojo al dato💡 La sabiduría popular refleja verdades, de manera sencilla y práctica, a través de frases cortas. Confieso que me encanta escucharlas, analizarlas, y por supuesto, usarlas. Los proverbios, refranes, aforismos, o “dichos” cómo le llamamos en el caribe colombiano, contienen sabiduría de altas concentraciones en pequeñas dosis. En un evento reciente de la Universidad Tecnológica de Bolívar sobre casos de negocio y proyectos no pude resistir la tentación de usar una poderosa analogía en forma de dicho. En el momento que me preguntaron por el impacto de los sesgos a la hora de elaborar casos de negocio, y proponer opciones diferentes a hacer un proyecto para resolver un problema, se me vino a la mente ese dicho con el que comienzo este post. Los sesgos son inherentes a la naturaleza humana, no podemos ignorarlos, hacen parte de nuestra esencia imperfecta. Así somos los humanos, y tanto los proyectos cómo los negocios se hacen con seres humanos, reales e imperfectos, no con máquinas🤖 No en vano le mereció un premio Nobel de Economía, léase nuevamente, ECONOMÍA, a un psicólogo, Daniel Kahneman, que demostró con sus investigaciones cómo es que toman decisiones los seres humanos reales, no el humanoide perfectamente racional y objetivo que hemos idealizado. El recientemente fallecido Crack de los sesgos, Kahneman, lo explica muy bien en su obra cumbre: Pensar rápido, pesar despacio. Dese la oportunidad de leerla si no lo ha hecho, de los mejores libros que he leído🤓 Uno de los controles más efectivos contra los sesgos en el mundo corporativo es la segregación de funciones. Para ese, y para muchos otros males mucho más graves de nuestra naturaleza humana. 🔥Muy seguramente los directivos del club de fans y devotos de San Project Manager, saldrán a decir que eso no es cierto y que eso pasa🔥. Pero yo que he estado en las trincheras, haciendo y revisando casos de negocios, lo vivo todos los días y puedo dar fé que sí. Generar confianza para la organización, representada por el Sponsor, es el mayor criterio de éxito a la hora de aprobar un caso de negocio. El resto se lo cuento en el video, disfrútelo 😁🤣. Manuel Vicente Gómez Guillén todavía me debe una cena por este maravilloso debate 😆 PD: Si le suena raro el término “solución cobarde”😁, en el primer comentario le dejo el post donde lo explico. ¿Les ha pasado? ¿Han observado sesgos en los análisis de casos de negocio? Los leo🤓

El pan de las legiones romanas y la cultura en la empresa. La cultura de empresa está en los detalles. Sobre la importancia, y la grandeza, del imperio romano ya te han hablado antes. Yo solo te voy a poner el foco, el zoom, en un detalle. El imperio romano crecía como una gran obra civil: primero ponías una estructura para levantar una nueva planta, la apuntalabas, y cuando está estable construyes la siguiente. Preparar, apuntalar, levantar y repetir. Los romanos preparaban a su ejército, luchaban por ampliar sus fronteras en alguno de sus frentes, lo aseguraban y repetían. En lo que hoy es Inglaterra, levantaron el muro de Adriano para defenderse de los "bárbaros" del norte. Cerca de ese muro tenían un fuerte, Vindolanda, una pequeña ciudad militar. El imperio se encargaba de alimentar y pagar a sus legionarios de todos los rincones enviando cereales desde los territorios más fértiles en lo que era una verdadera, y compleja, cadena de suministro. Los cereales eran la base de su alimentación, llegando a comer 1 kg por día cada soldado. Y el alimento por excelencia era el pan. Para moler el cereal usaban unos molinos de piedra. Esos molinos, al moler, soltaban poco a poco polvo de sílice era masticado por los soldados en su delicioso pan. Una vez, no pasa nada, dos tampoco. Pero cuando todos los días, durante años, masticabas ese pan, te desgastaba los dientes. Eso es la cultura de la empresa. Ese detalle que no le das importancia porque, una vez no hace daño. Tu mejor comercial le falta al respeto a otro... pero es solo una vez. Una pequeña bronca entre 2 departamentos, que no se resuelve... pero es solo una vez... Una persona que se escaquea y que, como el resto de compañeros sacan el trabajo adelante, no dices nada... pero es solo una vez. Cuando pasa el tiempo, nadie le para los pies al comercial, que crecido se siente impune. Cuando pasa el tiempo, las rencillas entre departamentos inundan otros departamentos, y ahora tenemos los famosos silos donde nadie colabora. Cuando pasa el tiempo, el escaqueado se siente protegido porque el trabajo sale, el resto del equipo se quema y empieza a irse, porque hacer más de lo que les corresponde ahora no es excepción sino la norma. Ese sílice que te va desgastando los dientes sin darte cuenta es lo que hace cultura. Por eso no es fácil generar culturas de alto rendimiento, porque hay que vigilar cada detalle, hay que implicar a todos en vigilar esos detalles y hay que actuar cuando se detecta ese elemento que, si no se eliminar, poco a poco "desgastará tus dientes". ¿Te has encontrado alguna vez con polvo de sílice en tu empresa? ¿Pudisteis solucionarlo? 245/2024

El Reino de los Trabajadores y la Magia de la Gestión Emocional En un reino no muy lejano, famoso por su increíble capacidad de producción y su constante expansión hacia tierras lejanas, los trabajadores eran conocidos por su dedicación y esfuerzo. Este reino, líder indiscutible en la industria alimentaria, se enfrentaba a desafíos todos los días: cumplir con demandas crecientes, expandir su influencia a nuevos territorios y mantenerse en la cima de la innovación. A pesar de los logros, el rey empezó a notar algo extraño en su reino. Aunque todo marchaba según el plan, la moral entre los trabajadores había empezado a decaer. A pesar de que los proyectos salían adelante, las sonrisas se habían vuelto más escasas, y la energía que antes los impulsaba parecía haberse desvanecido. La Consejera Emocional y su Visión Preocupado por esta situación, el rey decidió consultar a una de sus consejeras más sabias, conocida por su profundo entendimiento de las personas. Se decía que podía ver más allá de las tareas y los números, y que su especialidad no era solo la productividad, sino el bienestar. “Majestad, lo que enfrenta nuestro reino no es falta de recursos ni de habilidades,” le dijo la consejera, “lo que nuestros trabajadores necesitan es algo más profundo: gestión emocional.” El rey, intrigado, pidió que le explicara más. “¿Qué es la gestión emocional y cómo puede ayudarnos a recuperar la energía de nuestro reino?” La Historia de Marcos y su Gran Proyecto La consejera comenzó con un ejemplo: “Tome el caso de Marcos, uno de nuestros mejores estrategas. Hace poco, lideró con éxito la expansión de nuestras operaciones a un nuevo territorio. Los resultados fueron excelentes, pero ¿ha notado que ahora parece estar siempre preocupado y exhausto? Eso es porque, mientras gestionaba el proyecto, olvidó gestionar algo muy importante: sus emociones.” Marcos, al igual que muchos otros, estaba bajo una enorme presión para entregar resultados. Estaba tan enfocado en las metas que ignoró el estrés que se acumulaba, la frustración que sentía cuando algo no salía bien, e incluso la alegría de cada pequeño logro. Sin darse cuenta, permitió que sus emociones se desbordaran y, al no gestionarlas adecuadamente, terminó agotado y desconectado. La Magia de la Gestión Emocional “Lo que necesitamos, Majestad”, continuó la consejera, “es enseñar a nuestros trabajadores y líderes a reconocer y gestionar sus emociones. Porque, aunque sean muy buenos en lo que hacen, si no saben cómo lidiar con la presión, la frustración o incluso la incertidumbre, la energía del reino seguirá disminuyendo.” La gestión emocional consiste en ser consciente de cómo nos sentimos, y en aprender, canalizar esas emociones de manera que no interfieran negativamente en nuestro rendimiento y nuestras relaciones laborales. Esto significa, en lugar de reprimir el estrés o la frustración, debemos reconocerlos y trabajar con ellos. De lo contrario, esas emociones no gestionadas acaban por consumirnos.

El artículo de Loredana me ha hecho reflexionar sobre una frase ampliamente citada en los últimos años: “detrás de un gran hombre, hay siempre una gran mujer”. Aunque esta afirmación tiene su verdad, también es clave reconocer que, detrás de cualquier figura destacada o marca exitosa, hay un equipo fuerte. Un caso que ejemplifica esto es el de Chiara Ferragni, quien, aunque empezó su carrera de manera independiente, rápidamente se rodeó de un equipo de seis personas que la apoyaban en la construcción de su marca. Antes de que su reputación se viera afectada, ese equipo jugaba un rol crucial en su ascenso. Resulta interesante preguntarse si hubo cambios dentro de ese equipo, ya que errores de marketing, como el reciente incidente con los “pandori”, reflejan una falta de supervisión que pudo haberse evitado. Este caso me recuerda a Jennifer Lawrence, quien también experimentó una caída en su carrera, en parte debido a su naturaleza espontánea en un entorno donde la imagen es tan controlada. Las revelaciones sobre Harvey Weinstein y su propia lucha con el “descontrol” de su vida personal afectaron su trayectoria, pero su autenticidad ha sido clave para su resurgimiento, como se vio en los Globos de Oro de 2024, donde recuperó el apoyo del público. Seguramente, su círculo cercano en Hollywood ha sido vital en este proceso, demostrando el valor de tener un equipo sólido tanto en lo profesional como en lo personal. Loredana resalta algo fundamental: nuestras amistades y familiares, sean de sangre o no, conforman ese equipo que muchas veces es nuestro mayor apoyo en los momentos difíciles. Como en cualquier multinacional, es esencial cuidar de ese equipo para que, cuando enfrentemos caídas, se conviertan en oportunidades de aprendizaje en lugar de fracasos definitivos. Un artículo que sin duda invita a la reflexión.👏 ❤️

Tal y como somos 💬 A veces ocurre que cuando mejor van las cosas y más controladas parecen estar, acaban viniendo los peores resultados y cuando peor van las cosas de alguna manera se acaban recomponiendo y llevándonos a triunfos que no nos habríamos imaginado en el mejor de nuestros sueños. Quién iba a sospechar por ejemplo que, en el año 2000, General Electric, la empresa más valiosa del mundo aquel entonces con una valoración en bolsa de 600.000 millones, acabara en 2020 dividiendo la empresa en tres partes con una valoración en bolsa de 100.000 millones, muy lejos de los datos de comienzo de siglo. O quién iba a pensar que un hombre que trabajaba en una oficina de patentes iba a revolucionar la física como nunca antes se había imaginado con sus teorías de la relatividad, como le ocurrió a Albert Einstein. Pero, ¿por qué ocurre esto tan aparentemente contradictorio? Pues aquí la sabiduría popular nos orienta con aquello que seguro muchos hemos oído en casa, cuando presumíamos de los buenos resultados de un examen o un éxito puntual, el famoso “no te duermas en los laureles”. Y es que supongo que el laurel ejerce un efecto anestesiante o al menos distorsionador de la realidad, que nos hace pensar que ya el camino está recorrido que no hay cambios, que no hay nada que mejorar y nos centramos en el resultado reciente y nos hacemos fans de Julio Iglesias en el festival de Benidorm pensando que “la vida sigue igual”, pero que triste sería la vida si todo fuera siempre igual. Entonces ¿cómo evitar estos efectos “anestesiantes” del laurel?, ¿cómo ser conscientes de la realidad y los cambios? Supongo que esto es lo que el hombre se ha preguntado desde siempre. Ya en la Grecia clásica, encontramos a los que acudían al santuario de Delfos buscando la orientación del oráculo para triunfar y podían escuchar aquello de “Conócete a ti mismo y vencerás”. Pues esto que era válido para los antiguos, también es importante en las organizaciones porque dirigen a muchas personas; por ello es importante de disponer de los medios de mostrar las cosas como son, lo que podemos mejorar, que mantengamos nuestro espíritu crítico, y al ser posible que estos análisis los hagan personas independientes inmunizadas del efecto somnífero del laurel. Por ejemplo, en el mundo de las organizaciones empresariales, además de los indicadores que te permiten conocer el marcador, están las auditorías internas que revisan toda la organización para tener una idea de su estado o los informes anuales de desempeño para ver el estado y las zonas de mejora. Así es que no lo olvidéis, ante el poder anestesiante del laurel, la claridad que da la humildad, que no es otra cosa que vernos tal como somos, que quizá a veces es lo más difícil si no nos miramos con “cariño” y comprensión. #tercersector #organizacionsocial #digitalizacion #RRHH #calidad #liderazgo #valores Si te has perdido las otras entregas: https://lnkd.in/eb-QBbP5

¿Cómo te influencian las personas con las que te rodeas? Mira... Ayer vi el documental de Elvis Presley y me dejó reflexionando profundamente. Era una estrella con un talento excepcional, tenia un carisma inigualable y un potencial de brillar durante décadas… Pero su carrera y su vida terminaron demasiado pronto. ¿Por qué? Porque desde mi punto de vista y teniendo una visión muy limitada de lo que pasó... Quien debía cuidarlo y guiarlo, su manager el famoso "Coronel", lo trató como un producto. No le quito el mérito de todo lo que hizo para que Elvis fuera conocido y bla bla bla... Pero fue alguien que explotó hasta el límite, sin importar las consecuencias para su salud física, emocional o su legado, a una persona más allá de ser una estrella. Esta historia me llevó a pensar en el impacto que las personas a nuestro alrededor tienen en nuestras vidas: 👉 Para bien o para mal, las compañías influyen en quién nos convertimos. 👉 Las decisiones que tomamos, los riesgos que asumimos y hasta la manera en que percibimos nuestro valor pueden estar moldeados por esas influencias. En el caso de Elvis, estar rodeado de alguien que priorizaba las ganancias por encima del bienestar lo llevó a iniciar un ciclo de decadencia personal y profesional. Esto es una lección para nosotros y me hace lanzar unas preguntas al aire: ¿Estamos rodeados de personas que nos impulsan, apoyan y sacan nuestra mejor versión? ¿O permitimos que otros nos desgasten, nos limiten o incluso nos conviertan en una versión que no somos? En el emprendimiento y la vida, las personas con las que nos rodeamos pueden ser nuestra mayor fortaleza o nuestra mayor debilidad. Por eso es tan importante: 👉 Elegir socios, mentores y colaboradores que compartan tus valores. 👉 Detectar las relaciones tóxicas que, aunque parezcan beneficiosas a corto plazo, pueden destruir lo que realmente importa. 👉 Y sobre todo, recordar que somos personas con un valor único que nadie tiene derecho a explotar. ¿Qué opinas? ¿Has tenido experiencias en las que alguien influyó en ti para bien o para mal? Empiezo yo, quiero aprovechar para agradecer a Txema Sanfélix y Francesc Roca Presas. su acompañamiento en mi emprendimiento. Grandes compañeros de viaje, su influencia está marcando la diferencia. Me siento un afortunado y estoy feliz de teneros cerca. Gracias chicos! #CrecimientoPersonal #Liderazgo #AprendizajesDeVida #Influencia #Inspiración #LeccionesDeNegocios #Emprendimiento #ElvisPresley

Hoy es martes 13, un día que muchas personas consideran de mala suerte. Pero, ¿de dónde viene esta superstición? Se dice que el martes 13 fue el día en que Judas Iscariote traicionó a Jesús en la Última Cena, y también el día en que los Caballeros Templarios fueron arrestados en el siglo XIV. La superstición es tan fuerte que incluso se dice "No te cases ni te embarques" en un martes 13, para evitar que la mala suerte afecte nuestras decisiones importantes. Pero, ¿qué es realmente la suerte? ¿Es lo mismo que el éxito? La respuesta es no. La suerte es algo que nos sucede, algo fortuito que no está bajo nuestro control. El éxito, por otro lado, es el resultado de nuestro esfuerzo, dedicación y trabajo duro. Sin embargo, en la era actual, estamos replanteando el concepto de éxito. Las Empresas B y el movimiento Sistema B y tantos otros movimientos de empresas de triple impacto nos invitan a reconsiderar qué significa ser exitoso. Ya no se trata solo de ganancias y crecimiento económico, sino de generar un impacto positivo en la sociedad y el medio ambiente. El éxito es crear valor para todos, no solo para unos pocos. Es innovar, es tomar riesgos, es trabajar juntos por un bien común. Así que, en lugar de temerle al martes 13, usemos este día para reflexionar sobre nuestros esfuerzos y cómo podemos mejorar para alcanzar un éxito que trascienda la suerte. ¿Vos qué pensás? #Éxito #Suerte #Martes13 #Superstición #TrabajoDuro #Dedicación #SistemaB #EmpresasB #ImpactoPositivo"