Publicación de Azerta

Acontecimientos que llevan ocurriendo en valencia desde que tengo uso de razón pero te los venden ahora como fenómenos nuevos apocalípticos y con nuevos nombres... Lo curioso es que los radares meteorológicos llevasen tiempo sin funcionar como para predecir y prepararse en los diferentes municipios de lo que vaya a ocurrir, como ocurre casi todos los años en algún que otro punto de la comunidad valenciana.

Vaya por delante siempre lo más importante que es lamentar las pérdidas humanas en esta catástrofe. Descansen en paz las personas fallecidas y ojalá se puedan localizar al máximo de personas desaparecidas con vida, aunque con el paso del tiempo es mucho más complicado. Algunas reflexiones sobre este episodio en forma de preguntas retóricas: -Viví más de 6 años trabajando en Cuba en los que tuvimos que afrontar múltiples episodios de emergencias y huracanes fuerza 3 y 4. Tuvimos que lamentar escasas perdidas humanas. Sabíamos que hacer, nos avisaban, nos movían de lugares y nos decían cuando salir de nuevo a la calle. ¿ Puede una DANA calificada como emergencia nivel rojo causar esta desolación en España en el siglo XXI?. -Se habla de protocolos de prevención y de actuación. Existen y están perfectamente definidos en la teoría. SIEMPRE LO ESTÁN EN LA TEORÍA( Lo sabemos muy bien por nuestro trabajo), pero ¿ por qué no se conocen en la práctica? ¿ por qué no se aplican?, ¿ por qué se reacciona mal?. -Vivimos en una sociedad en la que cada vez más queremos vivir nuestras libertades de una manera completamente individual. Pero cuando hay desgracias tan grandes como son la pandemia, esta situación y cualquier otra, TODO EL MUNDO SE ACUERDA DEL ESTADO Y CRITICA LA TARDÍA REACCIÓN del ESTADO sea de las CCAA o sea del nivel central. ¿ Por qué nos acordamos y exigimos que el Estado deba responder totalmente en estas situaciones cuando pedimos que nos "deje en paz en otras" para que disfrutemos de "nuestras libertades"?. Y eso no obsta para criticar su tardanza, descoordinación e intereses políticos. -¿ Por qué demostramos que podemos ser genuinamente solidarios y empáticos con la situación de los demás en circunstancias excepcionales y no lo hacemos en el día a día?. -Los jóvenes son egoístas, es una generación de cristal y solamente piensan en ellos. ¿ por qué vemos tantos y tantos jóvenes queriendo movilizarse y ayudar?. -¿Por qué haya tantos y tantos impedimentos y llamamientos de determinadas instituciones y organismos a que las personas voluntarias no se movilicen porque pueden "entorpecer" las labores de rescate y ayuda, y no hubo tantos llamamientos de las mismas instituciones y organismos para evitar que la gente saliese a la calle y se hiciese vida normal antes del episodio que se había declarado como alerta roja?. -¿ Por qué las altas instancias políticas sabiendo que han reaccionado tarde y mal descoordinadamente se exponen a ponerse un chaleco de emergencias asesorados por sus asesores de comunicación para "visitar" y "solidarizarse" con familias y personas que se han sentido desamparadas? FUERZA VALENCIA . https://lnkd.in/dVRd75ez

El dolor que embarga a Valencia tras el paso devastador de la DANA es inmenso. Las vidas arrebatadas, las familias destrozadas, el paisaje irreconocible… una herida profunda que tardará mucho en sanar. Pero al dolor se suma la indignación, un sentimiento que crece con cada hora que pasa, con cada imagen de desolación, con cada testimonio de impotencia. ¿Cómo es posible que, en pleno siglo XXI, una tragedia de tal magnitud se cobre tantas vidas? ¿Cómo es posible que la respuesta de las instituciones haya sido tan lenta, tan ineficaz? Tres días han tardado en llegar los efectivos del ejército, tres días en los que la desesperación se ha apoderado de los valencianos. Tres días viendo cómo el agua arrasaba con todo, mientras los responsables políticos parecían mirar hacia otro lado. Y lo que es aún más indignante: el ejército estaba preparado, listo para actuar, esperando una orden que no llegaba. ¿Quién es responsable de esta negligencia criminal? ¿Quién ha tomado la decisión de dejar a miles de personas abandonadas a su suerte, mientras la ayuda estaba a su alcance? Mientras tanto, países de la Unión Europea se han ofrecido a colaborar, a enviar efectivos de emergencia para paliar la situación. Pero el Gobierno de España, en un alarde de soberbia incomprensible, ha rechazado la ayuda. ¿A qué esperan? ¿A que el número de víctimas siga aumentando? La indignación se extiende como la pólvora. Los valencianos se sienten traicionados, abandonados por aquellos que deberían protegerlos. Exigimos responsabilidades, exigimos explicaciones. ¿Por qué no se tomaron medidas preventivas? ¿Por qué se ignoraron las alertas meteorológicas? ¿Por qué se ha actuado con tanta lentitud e ineficacia? No podemos permitir que esta tragedia quede impune. Es hora de que los responsables políticos asuman las consecuencias de sus actos. Es hora de que se depuren responsabilidades. Es hora de que se haga justicia. Valencia llora a sus muertos, pero también grita su indignación. No olvidaremos lo sucedido. No perdonaremos la inacción de quienes tenían el deber de protegernos.

Desde que vi La Sociedad de la Nieve que confirmo algo que hace un tiempo entendí. Cada día es un regalo y es lo único que tenemos... Nuestra actitud cambia totalmente. ¿Por qué no tomar el riesgo? ¿Por qué no disfrutar más con nuestra familia, nuestros amigos? ¿Por qué no? La vida puede ser un juego espectacular dependiendo de nuestra actitud. Muy bueno este artículo de Juan Bautista Segonds sobre La Sociedad de la Nieve. A vivir.

La capacidad de algunos para hacer el mal es infinita y no repara en si la sociedad sufre el dolor de una tragedia que la devasta. Con los cadáveres aún calientes en el lodo de #Valencia, hemos visto a esparcidores de #bulos escupiendo delirios, a aprendices de inquisidores que saben más que los expertos en inundaciones y emergencias y a agitadores mediáticos adictos a la carroña. En las tragedias nos topamos con la bondad, con la valentía y con la solidaridad, pero también con la #mezquindad. Y no hay mejor patio de butacas para asistir a un espectáculo de miseria que darse una vuelta por X o por Tik Tok. Cuánto odio y cuanta desinformación. Cuántas ganas de mentir y qué impunidad. Se sostiene con razón que una de las primeras víctimas de una guerra es la verdad. Aplicadlo también a los casos de desastres naturales con centenares de muertos en las calles, donde las patrañas se abren paso como anguilas y las hienas ejercen de salvadoras del pueblo sin que nadie se lo haya pedido. La tragedia nos tiene a muchos de nosotros enredados en las redes, viendo todo lo que se publica, cada foto, cada imagen, cada declaración. Enganchados a lo que ocurre. Pero, en estos casos, y a sabiendas de que las #redes son un canal potentísimo para distribuir la información que importa y para encontrar el calor de una buena conversación, casi que lo más recomendable es alejarse de ellas para huir de la toxicidad que lo impregna todo. Un descanso, una tregua, para que el odio no te atrape. En estos momentos que son capaces de helarte el alma, es también el momento de saber elegir, de no dejarse influir por lo que te diga el primer predicador que te suelte una soflama en una red social, de no creer todo lo que escuchamos y, sobre todo, de desconectar cuando ves que va llegando el momento de la bilis. Hay alternativas. Mira un informativo, compra un periódico, sintoniza una emisora de radio. Y, si no, al menos, empieza a limpiar tu cuenta de salvapatrias y a mejorar tu dieta informativa para evitar tanta basura. P.D. No quiero ser injusto. Hay mucha gente buena en las redes que las ha usado para canalizar su solidaridad y demostrar que los ciudadanos se unen ante el dolor tan grande que se vive estos días por las riadas de Valencia y Castilla La Mancha. El problema no son ellos. En todo caso, ellos son las víctimas de todos estos traficantes de maldades que aprovechan la tragedia para ganar clicks, dinero y votos sin remordimiento alguno. [Foto: Heraldo de Aragón]

𝐈𝐧𝐮𝐧𝐝𝐚𝐜𝐢𝐨𝐧𝐞𝐬 La DANA que esta semana ha golpeado varias zonas de España, con mayor fuerza en la Comunitat Valenciana, es una catástrofe que marcará a generaciones. El número de víctimas mortales y desaparecidos, las imágenes, los testimonios, el colapso de carreteras y municipios, se clavan en la retina y la piel ahora pero perdurarán aferradas durante décadas en la memoria colectiva. También lo serán para los viveristas y otras empresas del sector verde de las zonas afectadas. Todavía a falta de recuentos oficiales nos llegan las primeras informaciones de viveros devastados en Valencia y Andalucía, y muchos profesionales no han podido siquiera acceder todavía a sus instalaciones, que han quedado aisladas o bloqueadas. Es por ello que habrá que esperar unos días para conocer el alcance de los daños en cifras, que se prevé que sean cuantiosas. El equipo de #Guiaverde se solidariza con todos los ciudadanos afectados de una u otra forma por esta tragedia y se pone a disposición de los profesionales del sector para lo que estimen oportuno.

Más de dos semanas han pasado desde que el martes 28 de octubre una DANA convirtiese Valencia en el epicentro de unas de las tragedias más importantes de la historia española. Los hogares valencianos fueron los principales escenarios de esta catástrofe que asoló toda la zona hace ya 20 días. El 45,8% de las 218 víctimas mortales en la Comunidad Valenciana fueron halladas en el interior de casas (68) y garajes (32) y al menos 45 levantamientos se realizaron en la calle y en el campo. Los datos provisionales publicados por el Centro de Integración de Datos emitidos por el Tribunal Superior de Justicia valenciano también muestran que al menos 104 fallecidos tenían más de 70 años. De manera más desglosada, la franja de edad con más víctimas mortales es la de los 80 años (52), seguida de las personas que estaban en el periodo de los 50 (38), de los 70 (37) y de los 60 (33). Esta catástrofe también le ha arrebatado la vida a nueve menores de edad, siete de ellos no habían cumplido aún los 11 años. Si se tiene presente los aún 13 desaparecidos y 218 fallecidos contabilizados, el análisis de las cifras y los lugares donde fueron encontrados los cuerpos que he realizado en El Mundo, evidencia la magnitud gigantesca de una de las cicatrices imborrables que ha quedado marcada en la población valenciana. #DANA #Valencia https://lnkd.in/dagg3tht

La catástrofe que se está viviendo en el este de España, con inundaciones que están dejando un devastador saldo de muertes y destrucción, ha revelado una vez más el contraste entre la voluntad solidaria de los ciudadanos y la falta de coordinación en la clase política. Mientras las calles de Valencia y sus alrededores sufren los estragos de la DANA, los vecinos se han organizado para brindar apoyo, ayudando en las evacuaciones, ofreciendo alimentos y ropa, y apoyando a las familias afectadas. La gente, a pesar del dolor y las pérdidas, se ha unido en un esfuerzo común, mostrando una empatía y compromiso que ha sido, como en tantas otras crisis, un ejemplo de solidaridad. Sin embargo, y como es habitual en este país, este esfuerzo colectivo contrasta amargamente con la respuesta de los dirigentes políticos. A pesar de la urgencia de la situación, los líderes siguen enfrascados en disputas partidistas y críticas vacías, en lugar de unir fuerzas en un frente común. El jefe de la oposición, en lugar de tender la mano y ponerse a disposición del gobierno para coordinar ayudas y acciones, ha preferido una vez más hacer el ridículo, como de costumbre, y centrarse en alimentar una rivalidad política que resulta vacía e inoportuna en un momento de tanta necesidad. Esta tragedia vuelve a poner de manifiesto la realidad de la clase política, que en vez de priorizar a las personas, parece más interesada en mantener sus disputas incluso en situaciones así. Mientras tanto, los ciudadanos y los servicios de emergencia (Bomberos, Guardia Civil, Policía, UME, Protección Civil, Ejército....) con su unión y su esfuerzo en primera línea demuestran ser los verdaderos protagonistas en momentos de crisis, recordándonos que la humanidad y la ayuda mutua siempre estarán por encima de los intereses partidistas . . . Y no hay que olvidar tampoco a los que están rescatando animales, las víctimas olvidadas y silenciadas de esta tragedia.

Se han reportado al menos cinco derrumbes esta semana en Cuba y tres de ellos han sido en un mismo día, en La Habana. Semana de derrumbes en Cuba: Una tragedia anunciada Esta semana se han reportado una serie de derrumbes en Cuba que han dejado un saldo trágico de víctimas, heridos y una creciente preocupación sobre la precariedad de las viviendas en la isla. Estos incidentes reflejan no solo la vulnerabilidad de las estructuras habitacionales, sino también la ineficacia de las autoridades para garantizar la seguridad de los ciudadanos. El primer incidente significativo ocurrió el 19 de junio en La Habana Vieja, donde un derrumbe dejó al menos una persona herida. Este evento subrayó la fragilidad de las edificaciones en una de las zonas más antiguas y densamente pobladas de la capital cubana. A pesar de los "esfuerzos por conservar el patrimonio histórico", la realidad es que la falta de mantenimiento y la sobrepoblación continúan siendo problemas críticos en este barrio. La tragedia se vio exacerbada por otro derrumbe en El Vedado, una zona conocida por su valor cultural y turístico, donde tres personas resultaron heridas tras el colapso de un balcón en una cafetería. En menos de 24 horas, el 21 de junio, se reportó uno de los incidentes más graves, una pared se desplomó, dejando un fallecido y dos lesionados en el municipio Cerro. Un tercer caso se reportó ese día, un derrumbe parcial, en el municipio Playa. A los residentes del lugar les dio tiempo de salir antes de que tuvieran peores consecuencias. El gobierno cubano ha intentado justificar estos derrumbes citando causas específicas, como la falta de mantenimiento adecuado y las condiciones meteorológicas adversas. Sin embargo, estas explicaciones resultan insuficientes frente a la magnitud del problema. La realidad es que la infraestructura de la isla está en un estado alarmante de deterioro, un hecho que las autoridades no pueden seguir ignorando. Esa misma noche, en medio de un apagón, una vivienda se derrumbó en Alacranes, Matanzas, agravando aún más la situación. Estos eventos no son aislados, sino parte de un patrón recurrente que pone en evidencia la mala gestión del gobierno cubano en materia de viv https://lnkd.in/gxRrRXrf

Aunque el título ponga 10, en el momento de compartir este enlace ya se elevan a 77. El nivel de estulticia y majadería de muchos de ellos es alarmante. En muchos casos se aprecia que la intención real es sembrar desconfianza en instituciones como Cáritas, la Cruz Roja, la comunidad científica pero, sobre todo, del Estado. En esta bendita red he llegado a ver publicaciones pidiendo la evasión fiscal como solución a todos los males por parte de alguien que ocupa un cargo que requiere, se supone, cierta cultura y honestidad. Por otra parte, se hace énfasis en eslóganes como "Solo el pueblo salva al pueblo", que aunque suena muy bien y refleja la solidaridad entre la gente, cosa que de por sí es encomiable, tiene un reverso tenebroso: "Los organismos públicos son inoperantes". En mi opinión (no es un hecho, que quede claro), la intención última es deslegitimar las instituciones democráticas a toda costa, paso necesario para la instauración del autoritarismo. Esto puede darnos indicios sobre quiénes están detrás de estos bulos: Toda la variedad de agentes interesados en que esto ocurra, sean de izquierdas, de derechas, nacionales o foráneos, aislados u organizados. Ahí no entro. Porque quien miente, intenta manipular la realidad para un fin determinado, del mismo modo que el mocoso de siete años que revienta un petardo dentro de una botella lo hace buscando determinado efecto. Ya no es necesario incendiar el Reichstag. Con incendiar la pantalla de tu móvil basta.