Publicación de Hospitalarias Valencia

SALVEMOS LA LONJA DE ZARAGOZA Pero, ¿la Lonja está en peligro? Porque cuando uno la ve parece que está en un estado de salud estupendo, ¿verdad? Pues se avecinan curvas, amigos, y de las peligrosas. Os hago un resumen. El tejado de la Lonja, como el de tantos edificios, no apoya directamente sobre las bóvedas, sino sobre los muros laterales, que se elevan varios metros sobre éstas. Eso significa que en la parte alta hay un espacio de varios metros de altura y completamente diáfano. Maravilloso, ¿a que sí? Pero... siempre hay un pero, y en este caso lo que ocurre es que el acceso (una escalera de caracol situada dentro de una torrecilla cilíndrica) desapareció hace mucho, y no hay ninguna forma sencilla de entrar (hace falta, por ejemplo, una escalera de bomberos). ¿Solución? El Ayuntamiento de Zaragoza... ¡¡¡la ha encontrado!!! Colocar delante de la fachada que da al río un par de ascensores (sí, sí, no uno, sino dos) y entrar por las ventanas de la galería superior. Agrandándolas, claro, porque las que hay son un poco pequeñas. Total, ¿a quién le importa la Ley de Patrimonio? ¿Quién se acuerda de que la Lonja es #BIC (o sea, Bien de Interés Cultural), la máxima protección que otorgan la legislación española y aragonesa, y que sólo se puede intervenir en ella para restaurar y consolidar, pero para nada más? Eso convertiría la intervención en ilegal, pero ¿qué es eso? La fortuna es de los audaces, y si hay que saltarse la ley se la salta uno, y en paz. Aunque sea precisamente quien más debería velar por su cumplimiento, o sea, la administración, pero eso son naderías irrelevantes, ¿verdad? En fin, que esto hay que pararlo como sea. ¿Os vais a quedar de brazos cruzados para lamentaros cuando lo veáis ya hecho? De eso nada. Sólo os pedimos que firméis en contra de este despropósito y que lo hagáis correr, que lo compartáis entre vuestros amigos, conocidos y familia. Es muy grave, y Zaragoza no puede permitirse seguir destruyendo su patrimonio. ¿No creéis que nos tenemos que plantar ante una barbaridad de este calibre? Nosotros sí, desde luego. ¡¡¡FIRMAD, POR FAVOR, AÚN ESTAMOS A TIEMPO!!! gozARTE

Contacté a una fundación cultural, por recomendación de un amigo. En el primer contacto de presentación vía whatsapp fue todo bien. Conociendo el nombre de la organización, busqué en Internet todo tipo de información posible. Esa información la crucé con las necesidades de esa organización. Saqué mis primeras conclusiones y volví a contactar a su representante para compartir algunos avances, y ahorrar tiempo para ambos. Viendo que la cuestión se orientaba a la posibilidad de tener que salir yo, carpeta en mano, a llamar puertas, mi advertencia fue que los indicados para obtener un beneficio económico eran los responsables de la organización, a quienes se les exige "mostrar sus credenciales". Acto seguido, repasé la idea desde otro ángulo "no soy el indicado para esa tarea, pero sí para armar la estrategia". Y por si hubiera alguna duda al respecto, rematé "conseguir esponsor NO ES COMO SALIR A VENDER UN ESPACIO DE PUBLICIDAD EN UNA REVISTA. Ser esponsor es acompañar una causa que reporte imagen simbólica al aportante". Acordado todo esto, llegó la reunión, un día feriado, en una cafetería en las cercanías. Cuando me citan en una cafetería y no en la sede de la organización y ni siquiera ofrecen un café, se me encienden las alarmas. Además del sentido de cordialidad ausente, el no poder apreciar el carácter de la organización ni el rango de mis interlocutores me crea dudas. Viéndolo objetivamente éramos cuatro desconocidos en un café tramando, quizás, una estafa. No falló. Pasamos de un interrogatorio inquisidor, a momentos de hostilidad. No es la primera vez que me pasa y sé por experiencia que lo del café ausente, es un indicador importante. Podría escribir varias páginas sobre cómo fue la fallida reunión, pero para simplificarle la vida a los colegas y estudiantes que me leen, si los citan a un lugar y no les ofrecen las condiciones mínimas de atención y respeto, huyan sin mirar atrás. Sí, salga corriendo porque el dinero allí será escaso y doloroso, y usted gastó mucho tiempo en ser un profesional digno de confianza y hay muchos lugares en donde estarán felices de recibirlo. ------------- Lo positivo fue volver silbando por la famosa avenida Santa Fé aquel hit que decía: "..un día de paseo en Santa Fé, no le hace mal a nadie, ya lo sé..." Lo sabía de memoria. Por 1969 tenía 9 años y me la pasaba silbando. Cuando venía una visita a casa, era el número artístico del niño silbador. Odiaba compartir mi incipiente arte. #gestioncultural #sponsor

Error no forzado: Lecciones de la Casa Real española El último año, la Casa Real española ha destacado en redes sociales, especialmente al mostrar el crecimiento y actividades de las princesas, Leonor y Sofía. Este enfoque cercano ha permitido mejorar la percepción pública, logrando un balance entre formalidad y accesibilidad. Sin embargo, la reciente visita de los Reyes a Valencia tras las devastadoras inundaciones demostró lo frágil que puede ser la imagen pública. Pese a las buenas intenciones, la decisión de visitar a la comunidad afectada generó reacciones inesperadas, con ciudadanos visiblemente molestos, gritos y hasta barro lanzado a la comitiva real. Este “error no forzado” mostró cómo, ante situaciones de alta sensibilidad, una reacción precipitada puede revertir los esfuerzos de una estrategia digital exitosa. La gestión de la imagen pública exige un análisis cuidadoso de cada paso. En Veraz, entendemos que el verdadero valor de una estrategia reside en la empatía y en una comunicación que responda genuinamente a las necesidades del contexto.

⛲ Cibeles opta por la gestión privada para el abandonado auditorio del parque Juan Carlos I Hay que hacer un ejercicio de memoria para recordar la última vez que un espectáculo coordinado de luces y agua, tuvo lugar en el auditorio del parque Juan Carlos I en el distrito de Barajas. Algunos recordarán las excursiones familiares cargados de bocadillos y refrescos en las que muchas familias madrileñas buscaban un lugar refrescante para paliar las sofocantes noches veraniegas de la ciudad. Esta infraestructura cubierta ahora por las pintadas y el moho del paso de los años vuelve ahora a la actualidad tras 16 años de desidia y con varios anuncios ineficaces de planes para este enclave que ahora Ayuntamiento de Madrid plantea que gestione una iniciativa privada que haga frente además a los más de 5,7 millones de euros que supondría hacer frente a su rehabilitación tal y como señala el Consistorio en un informe de la Dirección General de Patrimonio Cultural al que ha tenido acceso Madridiario, unos costes a los que habría que sumar los 89.655 euros que al año costaría el mantenimiento de unas instalaciones que han sufrido constantes actos vandálicos durante este tiempo. ➡En MADRIDIARIO SL ➡ https://lnkd.in/duKRR-tu

Una nueva mirada. Que las nuevas generaciones que se incorporan a nuestro sector lo hacen con una nueva mirada, con un estilo diferente a la hora de encarar la profesión y la vocación de curar y cuidar, creo que a ninguno se nos escapa. Esto ha pasado siempre. Esta tensión generacional existe desde que el mundo es mundo. Pero que hoy, y en España concretamente, el cambio exige una profunda reflexión sobre como procurar que este ejercicio de adaptación mutua se produzca de una manera beneficiosa para todos, y principalmente para nuestros pacientes y usuarios, no tengo muy claro que sea tan obvio ni que lo estemos encarando bien. Estamos ante un cambio tan brutal en todos los sentidos que o evolucionamos, y lo hacemos rápidamente, o no seremos capaces de conseguir que las nuevas generaciones se alimenten, como nosotros lo hemos hecho, de la vocación por querer cuidar. De las profesiones más bonitas del mundo; las del procurar el bien a los demás. Escuchar como entienden la profesión y comprender que estilo de vida es al que aspiran se me antojan claves pero que las instituciones les podamos acoger y que ellos se sientan a su vez acogidos. En la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios Provincia de España estamos reflexionando internamente sobre ello y quiero compartir con vosotros una campaña interna que hemos lanzado porque tenemos que adaptarnos a ellos, y ellos a nosotros. Os invito a ver el vídeo y abrir este debate también en vuestras organizaciones porque creo que todos debemos trabajar en esta línea con altura de miras. Desde todas las instituciones empezando por las académicas. Con una nueva mirada. https://lnkd.in/daxDBf8q

No se trata solo de los guadalupanos en Cuajimalpa o los sonideros en Tacuba; se trata de todos nosotros. De cómo queremos vivir y qué queremos conservar. Mi columna para Opinión 51

El #campoasturiano necesita atención. El del pasado sábado en #SotresPuebloEjemplar ha sido mucho más que un acto de entrega de esta distinción: ha servido de altavoz para que desde ese precioso espacio natural que son los #PicosdeEuropa se reclame comprensión, racionalidad y apoyo al campo asturiano. En su intervención agradeciendo el Premio la presidenta del Consejo Regulador de la D.O.P. #Cabrales, Jéssica López, ha sido muy clara y concreta, además de darnos una lección de sentido común: leyes que no tienen en cuenta la realidad de esos territorios, servicios públicos muy limitados, infraestructuras insuficientes y escaso apoyo efectivo para dinamizar otras actividades que generen economía están castigando la vida de los pocos habitantes que aún permanecen en Picos. Invocando principios de conservación mal entendida, tengo la impresión de que se olvida que el nucleo de este singular ecosistema son quienes precisamente lo han traido hasta el siglo XXI como hoy lo conocemos: los pastores, las personas. Y que es en ellas y en su medio de subsistencia en quienes hay que poner el foco principal. Reconoció S.A.R. la Princesa Leonor que es un desafío constante vivir en la alta montaña. En efecto, es muy dura la vida en estos pueblos por idílica que para los foráneos pueda parecer; y si no se apoya a quienes allí permanecen, desaparecerán irremediablemente. Es una reflexión que se puede hacer extensiva al conjunto del mundo rural asturiano. Tenemos un territorio privilegiado por su riqueza y variedad paisajística, ecológica, etnográfica y cultural. Pero también es un territorio que produce alimentos para el conjunto de la población; que genera actividad económica y, por tanto, se erige como medio de vida; y que necesita atención para su mantenimiento, cuidado y conservación Pero todo eso no ocurrirá si no hay personas que lo habiten. Personas que suelen estar enamoradas de los espacios en los que viven. Pero que necesitan regulaciones, modelos de gestión, servicios públicos similares a los del resto de la población e incluso apoyos específicos que, lejos de ahogarlas y condicionar negativamente su forma de vida, les permitan seguir adelante. Nos lo están diciendo alto, claro y repetidamente desde hace mucho tiempo quienes viven en #loRural. Ojalá no nos limitemos solo a escucharlos y pasemos a la acción de una vez. Porque de lo contrario, además de tener un grave problema, perderemos una riqueza irrecuperable.

Queremos museos, no hipermercados. Uno de los muchos peligros de la política cultural pública es que sus responsables consideren primero el valor comercial o turístico de una institución que su función social como vehículos de derechos. Una sociedad informada debe defenderse de este riesgo participando, reclamando y proponiendo otras maneras de diseñar lo público. Por eso hay que estar alerta cuando, sabiendo o sin saber, quienes se encargan de esas instituciones dejan que proyectos culturales ambiciosos deriven en espacios comerciales, con la cultura convertida en mercancía. Más allá del caso local, son muchos los ejemplos de esa expulsión de lo público para dar paso a lo comercial como argumento. De eso hablo en estas líneas: https://lnkd.in/dai62AAj

Los espacios culturales son infraestructuras básicas de un bien esencial, como es la cultura. Reclamar la presencia de bienes y servicios culturales en nuestro entorno que garanticen nuestro derecho de acceso a la cultura debería de ser tan natural como reclamar la asistencia médica de proximidad para que esté garantizado nuestro derecho a la salud. Pero en España todavía queda mucho camino por recorrer.

Les dejo mi columna del sábado en @Revista_VD sobre cómo las celebraciones urbanas de diferente índole y escala, nos llevan a utilizar comunitariamente nuestros espacios urbanos.