2018: EL AÑO QUE SE NOS VIENE ENCIMA

Para los mexicanos, el nuevo año estará marcado por las campañas, las elecciones y el cambio en la titularidad del Poder Ejecutivo y la renovación de la totalidad de las dos cámaras del Congreso de la Unión. Nuestro futuro inmediato se definirá a partir de la elección de un nuevo Presidente, pero también de otros 3 mil 325 cargos de elección popular que estarán en juego, entre los que destacan 500 diputados federales, 128 senadores de la República y 9 gobernadores.

No resulta exagerado decir que el próximo domingo 1º de julio se definirá el proyecto de país que queremos, tras décadas de promesas, diagnósticos diversos, ocurrencias y propuestas de reformas que, si bien llegaron, no terminan por conformar una pista de despegue que permita a nuestra economía el abatimiento de la terrible desigualdad que lacera a millones de mexicanos en todo el país.

Seguramente, durante las campañas electorales, resurgirá la esperanza, misma que podría desaparecer bajo el peso de la guerra electoral que se nos viene encima, con descalificaciones, ataques, fobias y fake news distribuidas a diestra y siniestra por medios tradicionales y redes sociales.

Como lo menciona Héctor Aguilar Camín, en el prólogo del libro ¿Y ahora qué? México ante el 2018, “en este medio siglo, México ha soñado de más y conseguido de menos. Ha intentado las fórmulas probadas en otros países para volverse un país moderno, pero esas fórmulas han sido insustanciales o insuficientes, cuando no simples remedos de soluciones, más caros a veces que los males que intentaban corregir”.

En el terreno de la política, Aguilar Camín señala: “Una revolución de terciopelo, hecha de reformas graduales y transiciones pactadas, convirtió la agotada hegemonía priista en una prometedora primavera democrática. Descubrimos poco a poco, sin embargo, que la nuestra era una democracia sin demócratas. Del fondo de nuestras costumbres políticas, más que de las leyes vigentes, emergió paso a paso una partidocracia rentista, cuya especialidad fue gastar crecientes cantidades de dinero público legal y de dinero oculto ilegal en elecciones que cuestan cada vez más e inducen cada día mayores desvíos de recursos públicos, mayor incredulidad ciudadana y mayores cuotas de corrupción en los gobernantes”.

Podemos agregar nosotros que las campañas y los comicios del 2018 se desarrollarán en medio de un entorno de creciente violencia e impunidad en diversos puntos de nuestro país. Desde 2015 la violencia está imparable y el 2017 se ha transformado en el año más violento en la historia de moderna de México. Es una problemática abrumadora y desesperante que no puede ser ignorada por los candidatos.

Ese es el entorno complicado que marcará la competencia política de este nuevo año. Y en ese contexto, los jóvenes mexicanos podrían ser los principales protagonistas. Los mexicanos de entre 18 y 23 años que votarán por primera vez en las elecciones de 2018 están preocupados por la inseguridad, pobreza y corrupción en el país. Son alrededor de 14 millones de jóvenes, y la mayoría está consciente de que, ante la situación económica y laboral que prevalece, será complicado encontrar un trabajo.

Actualmente, en México viven 37.9 millones de jóvenes de entre 15 y 29 años. Casi la mitad, 12.2 millones, son “vulnerables” por enfrentar dificultades para acceder a un trabajo “decente” en el que tengan posibilidades de desarrollarse, con buen salario y seguridad social, según datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

Seis de cada 10 jóvenes mexicanos laboran en la informalidad, y entre éstos un 34 por ciento gana de uno a dos salarios mínimos. Otro millón 209 mil ni siquiera cuentan con un empleo. En este contexto, los jóvenes mexicanos desconfían de los gobernantes y ninguno de los aspirantes a la Presidencia que estarán en la boleta electoral de 2018 les llena el ojo.

Ese es el marco en el cual los mexicanos enfrentaremos la elección del 2018, la más grande y compleja en la historia de nuestro país, lo que implicará una millonaria movilización de personas, recursos, esfuerzos y tiempo aire en medios tradicionales y bytes en Internet y redes sociales.  Más vale que preparemos el ánimo y endurezcamos la piel para que este 2018 no se nos venga encima.


Inicia sesión para ver o añadir un comentario.

Más artículos de Sergio Uzeta M

  • AMLO: Balance primer año (Sergio Uzeta)

    AMLO: Balance primer año (Sergio Uzeta)

    Llega diciembre de 2019, mes en el que se está cumpliendo el primer año de gobierno del presidente Andrés Manuel López…

  • ¡No Basta!

    ¡No Basta!

    No basta con que el presidente López Obrador quiera para poder transformar a México. Por: Sergio Uzeta M.

  • El asedio al Poder Judicial

    El asedio al Poder Judicial

    LA CORTE Y LA 4 T Por: Sergio Uzeta M. “Con la Cuarta Transformación nos hemos topado”, es seguramente la frase…

  • Poder o no poder, esa es la cuestión

    Poder o no poder, esa es la cuestión

    Por: Sergio Uzeta M. “La persistente terquedad rinde frutos”, pensaba para si el candidato triunfador mirando al cielo…

  • ¿Qué nos deja el 2017?

    ¿Qué nos deja el 2017?

    El legado del año que se va Por: Sergio Uzeta El año 2017 llega a su fin dejando a su paso una serie de hechos y…

  • ¿Volver a la normalidad?

    ¿Volver a la normalidad?

    Soy Sergio Uzeta y les comparto algo que acabo de escribir. Tras los devastadores terremotos de septiembre de 2017…

  • Modernizar al TLCAN el objetivo

    Modernizar al TLCAN el objetivo

    CONOCE LAS CLAVES DE LA RENEGOCIACIÓN DEL TLCAN Por: Sergio Uzeta Los representantes de Estados Unidos, México y Canadá…

Otros usuarios han visto

Ver temas