Basta de juegos

¿A qué juega el gobierno de Dina Boluarte? A través del proyecto de adelanto de las elecciones que presentó el Ejecutivo, sería el propio gobierno el que empezó a aplicar una receta para jugar a la política de cancelar esta iniciativa. Tal como sucedió con Castillo, la izquierda y la derecha parlamentaria se oponen sin argumentos y tibiezas... se trata de una política infantil porque buscan quedarse. Nadie cede un milímetro, especialmente la izquierda que quiere gobernar basándose en el chantaje, tal como dijo Boluarte. Era previsible que la tirada de pelota al Congreso iba a hacer imposible el adelanto para el 2023. Si se logra discutir en la siguiente legislatura, los tiempos que quedan son: ¿2024 o 2026? Todo depende del humor del pueblo porque el escenario será distinto en unas semanas.

Entre tanto las redes y el Whatsapp fueron llenados con inquietantes relatos. El mejor proviene de Umberto Jara, y nos indica que la presidente Boluarte y su premier Otárola son un remedo de la "democracia fake" de Castillo. Ambos estarían buscando la Asamblea Constituyente y el adelanto de elecciones para que la izquierda siga en el poder. Esta fase dos de la izquierda radical viste un disfraz político que tiene un modo de hablar educado, capaz de articular discursos más agradables, rodearse de gente correcta, pero no actúan con firmeza contra Sendero, el lumpen y sus fuentes de financiamiento... Dejan que el caos siga. Pararon todo un mes la intervención de la Fuerzas Armadas y los recursos de inteligencia para la Policía justo cuando era urgente.

En el juego del manejo de Estado, las maniobras en medio de los problemas son el día a día. La presidente y el premier se quedan en silencio al escuchar que muchos analistas evidencian su “disfraz político”. Así gana la percepción de “El que calla otorga”… Sí solo observas y no haces nada, ¿qué puedes esperar?… 

La violencia y el caos, de quienes el propio gobierno tildó como izquierda democrática, ha paralizado por completo Puno, Cusco, Apurímac y Madre Dios. Si el caos sigue en estas regiones, la recesión traerá miedo y muertes al pueblo. Asimismo, mantendrá alejada a las inversiones y encima el Perú ya no aparece como destino internacional de turismo. Tenemos una economía que estará en rojo para el primer trimestre 2023, algo que no pasaba desde hace 14 años, según Credicorp y Thorne Asociados. 

Dejar que sigan actuando los violentistas para crear caos es imperdonable. Vamos hacia una emergencia económica más fuerte que en la pandemia, y agravada por la recesión mundial. Algunos dicen que recibimos una de las 7 plagas de Egipto, cuya lección estaría dejando destruida a la izquierda por completo. Esa mirada es incompleta porque la frustración social crece en medio de actores empresariales entumecidos, sindicatos y grupos sociales mimetizados al pedido de salida del gobierno, medios que replican incesantemente a los pseudo-manifestantes y la ausencia de líderes que hablen con la verdad. Para colmo, han llegado los nefastos políticos argentinos de izquierda que son paseados como observadores con libretitos preparados sobre los derechos humanos a favor de los violentistas. Todo esto como comparsa a las declaraciones de Castillo en la prensa española. 

El juego de Boluarte se llena de caos sin reformas y un terrorismo que recula por ahora -no pararán-. Nadie gana sin propuestas de verdad. Un gran sector popular se ha cansado y enfrentado sin miedo a los violentos en diversas partes. La Policía y las Fuerzas Armadas hacen lo posible y han recibido más apoyo de la población, pero sin dirección política clara todo acaba en un juego que pone en peligro al Ejecutivo por su inacción. Y ahora pensaremos, ¿así eras Dina? Sería bueno que responda presidente; es hora de salir de la pose política.

Vea aquí el artículo de Diario Expreso publicado 11 de febrero 2023