3 principios para romper los paradigmas de la identidad

Recientemente he tenido una conversación muy interesante sobre la persecución de estereotipos idealizados. Esta carrera por encajar nuestra vida en unas determinadas etiquetas, que en algún momento nos sedujeron a nosotros o al entorno que nos influye, origina tres problemas muy arraigados y dañinos en la sociedad actual y especialmente en mi generación: la extenuación en la persecución, la desconfianza de los demás por la percepción de irrealidad con su implicación de subida de listón de grupo y el manido síndrome del impostor.

Para combatir esto, en mi opinión hay tres principios básicos sobre la identidad que exploraremos a continuación.

• Invierte tiempo en conocerte

La reflexión es una herramienta necesaria y poco utilizada. No tenemos tiempo o seguimos la senda de la multitud porque es la opción cómoda. Esto no significa que la frustración actúe como un DJ ibicenco en nuestro cerebro. Conoce qué te gusta, qué te importa, cuáles son tus fortalezas y limitaciones, traza tu propio plan y revísalo cuando lo consideres necesario. Disfruta del viaje y no hagas las cosas porque todo el mundo las hace así o porque a todo el mundo le encantaría..

“Si realmente tienes tu propia identidad, seguirás haciendo lo que crees que es realmente adecuado para ti, y también entenderás el siguiente paso que quieres dar”. Helmut Lang.

• No tienes que impresionar a nadie

Es imposible complacer a todo el mundo, pero es que ni siquiera tienes que intentarlo. Y no tienes que saber hacer de todo. Un “no sé” a tiempo es una bendición divina y un acercamiento a la humildad de los mortales. Tienes que aprender a aceptarte y quererte tal y como eres y sacar tu mejor versión. No busques en los demás algo que solo tú puedes darte, tu propia aprobación.

Deja atrás las comparaciones y expectativas, la única persona con la que debes medirte es contigo mismo y con tus objetivos. Las decisiones importantes de tu vida, dependen de ti (ojo esto no significa que no tengas en cuenta el bienestar de los tuyos). Y las consecuencias también te pertenecerán, positivas o negativas. No desatiendas los consejos pero evalúalos desde tu perspectiva y no aceptes críticas de quien no aceptarías consejos. Y es que nadie sabe mejor que tú lo que es mejor para ti. Te equivocarás y aprenderás, pero sabrás que eres capaz de volver a intentarlo sin depender de nadie para ello y evolucionando en cada intento.

“Cuando hay muchas personas que te dicen lo que eres y te perciben de cierta manera, es difícil encontrar tu propia identidad”. Sia.

• Tu identidad debe seguir tu propósito y fundamentarse en tus valores

Eres tu mejor versión cuando tu pasión brilla, siguiendo tu propio instinto y empleando toda tu fuerza. Dale rienda las ideas y actividades que te hacen resonar. Centra en ello tus esfuerzos formativos, laborales, tu networking, etc. No te sabotees con disfraces que no son de tu talla y que no te representan.

 “El valor de la identidad, por supuesto, a menudo viene con su propósito”. Richard Grant.

 Los aplausos, los títulos, los premios… son efímeros y rellenan vacíos poco sustanciales. Pero las cosas que el dinero o el poder no pueden adquirir, eso amigx míx, es lo realmente importante. Tu personalidad genuina, tu honestidad y tu autoestima, eso sí habla de quién eres.

 Para concluir, si quieres relaciones reales y éxito real, solo lo percibirás como tal si parte de la autenticidad, de la persona que realmente eres.

“La identidad no se puede encontrar o fabricar, pero surge de adentro cuando uno tiene el coraje de dejar ir”. Doug Cooper.

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