Accesibilidad de Software

Según el Informe Mundial sobre la discapacidad publicado por la Organización Mundial de la Salud y el Banco Mundial, más de mil millones de personas tienen algún tipo de discapacidad, lo que significa un 15% de la población mundial.

El software accesible para estas personas puede suponer una mejora en su calidad de vida, pero la accesibilidad no sólo es importante para hacer la vida de las personas discapacitadas más fácil, sino también a nivel de mercado. Es decir, si hay un % de los clientes de cualquier empresa de TI que tiene alguna discapacidad (permanente o temporal) y el software no es accesible, optarán por comprar/utilizar el software accesible de la competencia.

Antes de adentrarnos en las pruebas de accesibilidad, ¿qué es exactamente la accesibilidad?

La accesibilidad es el grado en el que todas las personas pueden utilizar un producto, independientemente de sus capacidades físicas, cognitivas y sensoriales. Si hablamos de productos de software podemos definir los siguientes perfiles de usuario según sus limitaciones:

Según un estudio estadístico realizado por el INE, en España un total de 4,38 millones de personas residentes en hogares afirmaron tener discapacidad o limitación en el año 2020. Por sexo, 1,81 millones eran hombres y 2,57 millones mujeres.

El estudio de las características de la discapacidad se ha centrado en la población de seis y más años, ya que para los menores el pronóstico de evolución es incierto y solo se analizan las limitaciones adaptadas a su edad en el grupo de dos a cinco años. El número de personas de seis y más años con alguna discapacidad fue de 4,32 millones en 2020, lo que supone un aumento del 14,0% respecto a la anterior encuesta, realizada en 2008.

El 55,7% de las personas con discapacidad presentaron dificultades importantes de movilidad, el 24,3% de visión, el 21,9% de comunicación y el 28,5% de audición.

Conocer estos datos es muy útil a la hora de diseñar una aplicación o un producto de software que sea accesible para todos. Tenemos que ponernos en el lugar del usuario y pensar en las circunstancias en las que va a utilizar el software. La población con discapacidad suele ser fiel a los productos que los tienen en consideración, lo que conlleva múltiples beneficios en cuanto a la parte de negocio.

Destacamos 5 principales beneficios:

1. Impulsar la marca: la marca gana prestigio al considerar esas limitaciones. Por ejemplo, si soy miope voy a comprar un dispositivo móvil que tenga un sistema operativo que me permita aumentar la letra.
2. Innovación: las soluciones accesibles tienden a buscar soluciones creativas.
3. Mayor captación de mercado: lo utilizan todos; tanto las personas que no tienen discapacidad como las personas que sí la tienen.
4. Ser más competitivo: podemos poner como ejemplo Netflix y HBO. Netflix fue demandada por no cumplir criterios básicos de accesibilidad mientras que HBO sí los tenía en consideración, por lo que hubo más personas que se decantaron por el uso de HBO.
5. Minimizar riesgo legal: existe un estándar mundial WCAG (Web Content Accessibility Guidelines) creado por el consorcio W3C. Este consorcio está enfocado en usuarios con discapacidades y establecen normativas para generar productos accesibles a todos.

La normativa WCAG ofrece estos cuatro principios de accesibilidad del software:

1. Información perceptible.
2. Información comprensible.
3. Interfaz de usuario operable.
4. Contenido robusto e interpretación confiable.

Por tanto, las pruebas de accesibilidad deben evaluar cada una de estas características:

1. Perceptible. Consideramos que una aplicación es perceptible cuando la información que contiene puede identificarse por más de un sentido: imágenes, texto, vídeo y audios adaptados. Se valora la estructura bien definida, las secuencias intuitivas o el tamaño de la letra, entre otros. Audio descripción (lectores de pantalla), subtítulos y lengua de signos son igualmente necesarios. Para que el software sea perceptible debe presentar el contenido en formatos y colores que lo hagan fácil de entender. Para lograr este objetivo, los diseñadores de software pueden utilizar viñetas y listas para el texto, permitir la ampliación y diseñar pantallas con fondos de alto contraste.
2. Comprensible. Software comprensible significa que el usuario comprende tanto la información que presenta como los requisitos para su funcionamiento. El contenido de la aplicación debe ser fácil de leer y de comprender siendo el lenguaje una herramienta de conexión y no una barrera. Las páginas predecibles e intuitivas son más accesibles.
3. Operable. Las aplicaciones deben permitir a todas las personas que las utilicen, realizar las acciones necesarias para navegar por la interfaz de usuario, incluida la forma en que completan los componentes de la interfaz, como formularios y entradas. La navegación debe ser fluida a través de todos los métodos, como el ratón, las teclas de flecha del teclado y el panel táctil, facilitando el uso de tecnologías de asistencia como palitos bucales o reconocimiento de voz.
4. Robusto. El software debe ser compatible con las tecnologías de asistencia, con todos los navegadores y dispositivos. El software debe adaptarse ampliando sus funcionalidades para garantizar que el contenido sea accesible a medida que evolucionan las tecnologías.

El estándar WCAG ha tenido 3 grandes revisiones hasta el momento: WCAG 1.0, WCAG 2.0 y WCAG 3.0.

La variación de criterios y pautas se debe a que el estándar se encuentra bajo revisión continua por grupos de expertos considerando la evolución de las necesidades de los diferentes usuarios. Por ejemplo, hace unos años los móviles no eran táctiles, no existía el modo oscuro, etc.

Existen 3 niveles de conformidad:

1. A (básico)
2. AA
3. AAA (accesibilidad completa)

Los niveles de conformidad nos indican el grado de accesibilidad de una aplicación. Es importante conocer los criterios que demanda cada uno de los países que se adhieren al estándar de accesibilidad.

En el caso de España la norma que se aplica desde el 12 de febrero de 2022 en las Administraciones Públicas es EN 301 549 v3.2.1 (2021-03) «Requisitos de accesibilidad para productos y servicios TIC»  que recoge los niveles de conformidad A y AA de WCAG 2.1 y especifica los requisitos funcionales de accesibilidad aplicables a los productos y servicios que incluyan TIC (sitios web, software, apps nativas, documentos, hardware, etc.). Además, también describe los procedimientos de prueba y la metodología de evaluación a seguir para cada requisito de accesibilidad.

Esta nueva versión ha sido declarada por la Comisión Europea como el nuevo estándar armonizado para la aplicación de la  Directiva (EU) 2016/2102 de Accesibilidad Web , a través de la Decisión de Ejecución (UE) 2021/1339 de la Comisión, de 11 de agosto de 2021  sustituyendo a la norma EN 301 549 V2.1.2 (2018-08) anterior.

Por lo tanto, las empresas de desarrollo de software/aplicaciones deben:

1. Conocer e implementar el estándar.
2. Identificar en qué plataformas se aplica. Si es web/móvil, teniendo en cuenta los sistemas operativos.
3. Conocer y utilizar herramientas, plugins o acudir a empresas que se dedican exclusivamente a pruebas de accesibilidad. Existen consultores de pruebas de accesibilidad con certificados por la IAPP (Asociación Internacional de Profesionales de la Accesibilidad).
4. Reportar defectos.
5. Realimentación constante; si es posible involucrar a los usuarios finales con discapacidad.
6. Generar empatía y consideración con los usuarios finales.

Los equipos de diseño, de desarrollo y de calidad deben estar capacitados para desarrollar un producto accesible desde el principio del proyecto.

Dentro de este proceso para construir aplicaciones que cumplan con todos estos criterios, juegan un papel esencial la realización de las pruebas de accesibilidad de software. Dichas pruebas deben comenzar lo antes posible en el proceso de desarrollo para así evitar defectos de diseño, que suelen ser la causa principal de los problemas de accesibilidad del software y los más difíciles y costosos de remediar si se encuentran en un estado avanzado de los proyectos.

Cuando hablamos de pruebas de accesibilidad nos centramos en las pruebas manuales, pero hay ciertos escenarios en los que la automatización puede ser de gran ayuda.

TAST, nuestro framework completo de automatización de pruebas, ayuda en estas verificaciones, permitiendo que las empresas TI puedan evaluar si las aplicaciones cumplen los estándares de las pautas de accesibilidad WCAG.

En los proyectos en los que trabajamos con la administración pública contamos con la integración en TAST del Rastreador Observatorio de Accesibilidad Web OAW. Esta herramienta de software libre es utilizada por las administraciones públicas (AAPP) e instituciones, permitiendo verificar la accesibilidad de un sitio web y generar informes y documentos de resultados automáticos. Además, aporta recomendaciones sobre cómo solventar los problemas detectados. Las AAPP españolas tienen a su disposición el uso gratuito del Servicio de Diagnóstico en línea de la Comunidad de Accesibilidad, punto de encuentro donde las AAPP comparten información, experiencias y resuelven dudas sobre accesibilidad.

En SIPSA reconocemos la importancia de la accesibilidad y, como consultora tecnológica y expertos en pruebas y calidad de software, estamos muy implicados en trabajar por el software inclusivo, accesible y de calidad.

Contacta para más información.

Fuentes:

Consorcio W3

Normas de accesibilidad Portal Administración Electrónica.