"Ajustes en la política pública enfocada al mercado laboral salvadoreño POSTCOVID"

¿Cuál es la situación antes y durante la pandemia alrededor del mercado laboral salvadoreño?

El Salvador es un país cuyas remesas históricamente equivalen en promedio al 20% del PIB anual según cifras de los últimos años registradas en el Banco Central de Reserva de El Salvador, durante la pandemía hubo caídas en las remesas de hasta un 20% de disminución mensual (marzo y abril del 2020). Para el mes de julio 2020, las remesas incrementaron un 14% con respecto al mes anterior.

El auto-empleo o empleo informal con micro-empresas no legalizadas, es una opción laboral para 7 de cada 10 salvadoreños; es decir que el 70% del mercado laboral se ha visto afectado de manera directa en esta pandemia (en situación de suspensión de labores el patrono informal no tiene las mismas obligaciones de ley de brindar un salario al empleado). El sistema de pensiones genera su soporte financiero en el 30% de los empleados del país y esta informalidad del mercado laboral es una explicación rápida del porque El Salvador tendrá un impacto mayor en el PIB a nivel regional.

Según estudios económicos hechos por FUSADES para el año 2016, 8 de cada 10 inactivos (no buscan empleo) son mujeres dedicadas a las labores del hogar.

Antes de la pandemia, las cifras de 4.9 de incremento anual de desempleo afectaba principalmente el mercado de jóvenes que necesitan su primera experiencia laboral, pues ante la poca oferta laboral su demanda laboral no es atendida. La falta de empleo en mujeres genera dependencia económica y en los jóvenes migración y delincuencia.

Los costos directos e indirectos, así como las consecuencias en obligaciones patronales que implica formar una empresa, influye directamente en que cerca del 95% de microempresas en el país no estén formalizadas por lo tanto son incapaces de brindar prestaciones de ley a sus empleados. El costo patronal para que un empresario establezca una relación laboral con un empleado ronda el 30% adicional al salario nominal.

En otras palabras, un empleado le cuesta a una empresa un promedio de 2.8% del valor nominal de su salario es decir es superior el crecimiento económico promedio de los últimos 25 años (2% promedio anual).

A esta fecha después del inicio de la pandemia en el país, según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), existen 1,3 millones de empleos salvadoreños en "situación de riesgo".

El sistema de gestión pública en El Salvador se basa predominantemente en el modelo tradicional, a pesar de que en el pasado ha habido esfuerzos aislados de neoinstitucionalismo como haber tenido una Oficina Administradora del Premio de la calidad salvadoreño, actualmente ya no existe. En algunas instituciones se tienen modelos de calidad implementados a la fecha.

¿Qué ajustes se deben hacer en cuanto a políticas públicas para que la experiencia de la pandemia sean lecciones aprendidas?

1.      Actualizar marco legal en caso de pandemias: Definir protocolos de trabajo dentro de las organizaciones públicas y privadas para que su actuación sea expedita en caso de pandemia y establecer la modalidad del trabajo en casa en empleados de gobierno y privado, así como la asignación de recursos de emergencia con los controles adecuados.

2.      Generar un plan de educación financiera e inversión para la población para aprovechar las remesas: Se deben promover programas de educación de la familia que recibe remesas para ser usadas con fines de inversión y no de gasto, esto permitirá generar auto-empleos o emprendimientos que a su vez genere más empleos.

3.      Apostarle más a la inclusión financiera: Impulsar una ley en el sistema financiero que busque digitalizar la moneda, las transacciones comerciales se harían electrónicamente sin el uso de moneda o billete, sin necesidad de abrir una cuenta de ahorro o corriente.

4.      Disminuir el costo de la burocracia para formalizar una empresa: Generar una serie de ajustes en los requisitos y tramitología para formalizar una empresa con el objetivo de incentivar el formalismo laboral.

5.      Inversión de la actualización tecnológica de los micros y pequeños empresarios para el "E-commerce": Estimular el uso de herramientas tecnológicas y facilitar su masificación en los negocios de estas empresas, lo que evitará que sean golpeados por limitar formas de comercialización en una nueva pandemia (por medio de canales digitales redes sociales, App´s, etc).

6.      Elaborar programas de empleabilidad dirigidos a mujeres en casa: Para que puedan incorporarse a las labores desde su casa, favoreciendo un sector vulnerable a la dependencia económica.

“La calidad es la única carrera que no tiene meta”

Bladimir Aly Henríquez