"APRENDER."
"APRENDER."
La mañana estaba muy agradable,el sol se anunciaba en el horizonte prometiendo un cálido día.
El cielo azul celeste espléndido y el aire puro
acompañaban mis pasos por aquellas serranías
tan apacibles y pintorescas verdes, ocres , azules y
entre algunas rocas grises que completaban el paisaje.
Al doblar en un recodo de aquel sinuoso y ancestral sendero tallado en el tiempo por quien sabe cuantos pastores o ignotos caminantes divisé en un montículo, sentado sobre una piedra y a la sombra de un copioso árbol a un hombre, al que sus cabellos canos delataban una considerable edad. En aquel paraje solitario me resulto curiosa su presencia y actitud. Pensé primero en saludarlo amablemente y no interrumpir su tranquilidad o sus pensamientos.Pero impulsivamente, y luego de saludarlo cortesmente; se me ocurrió continuar...¿Como está? Muy bien; replicó con una sonrisa y una notable serenidad. Me atreví a seguir....
¿Conoce usted aquí en esta soledad la felicidad?
¡Claro!!! Me respondió con un brillo en los ojos que resplandecieron entre las añejas arrugas de su rostro. Y continúo diciéndome; ¿Observa usted como brilla el sol que hace crecer a las flores silvestres, siente usted la generosa sombra de este árbol que nos refresca, puede escuchar el libre albedrío de los pájaros, que nos regalan tanto placer exultando sus trinos?
¿ Puede descubrir cuantos colores ha pintado el arco iris en esta maravillosa naturaleza?¿ Puede disfrutar de esta paz ?
Antes de responder me reservé un tiempo para meditar.
(Para mis adentros me dije...este hombre me responde con preguntas y me obliga a reflexionar.)
Entonces insistí con otra (Como para desafiarlo)...¿Sabe usted que es el amor...lo ha conocido?
Si, me dijo y sin pensarlo mucho...El amor es un estado interior, es un Dios que esta dentro de nosotros mismos, impulsándonos a ser buenas y dignas personas, mejores seres humanos, el amor es paz, serenidad, armonía, bienestar.
El amor es nuestra bondad interior y descansa en nuestro espíritu y aflora por nuestro corazón.
Me estaba asombrando con sus respuestas tan puntuales tan acertadas. Y cuando yo las trataba de asimilar, fue el quien me lanzo el desafió---¿Porque me hace usted estas preguntas?
Pensé darle la mas sinceras de las respuestas...y algo avergonzado le respondí: NECESITO APRENDER.
El dibujo una sonrisa amable entre las arrugas de su rostro,
yo le extendí mi mano y con un fraterno apretón entre las suyas me despedí con un: ¡Buenos días! ¡Muchas gracias!!!
Y así seguí alegremente caminando entre los sinuosos y ancestrales caminos de aquellas verdes montañas, entre las flores silvestres y escuchando los armoniosos trinos que melodiosos exultan los pájaros.
Carlos Alberto Marcionni CDMX Marzo 2020.-