ASÍ LO DEBO HACER
Dentro del entorno laboral cotidiano, nos vemos enfrentados a una serie de retos y funciones que determinar qué es lo que debemos hacer, como lo debemos hacer y lo más importante estoy dispuesto a hacerlo.
Por lo cual asumir las responsabilidades dentro de nuestras funciones diarias, no solo implica cumplir a cabalidad las mismas que son asignadas, sino que debemos apropiarnos, hacerlas nuestras, dentro del sistema de valores implícitos que lleva consigo el puesto que desempeño y a su vez ponerlo en práctica para el beneficio de la organización.
Si bien, las responsabilidades que asumen los Colaboradores son parcialmente determinadas por las organizaciones mediante los acuerdos y descriptores de puestos, el compromiso del colaborador que pone sus conocimientos, habilidades y actitudes de ser autodidacta y propositivo, posibilita su desarrollo profesional gracias a que estas iniciativas aumenta la autoestima y creatividad.
Adjudicarse una responsabilidad laboral implica ser responsable de nuestras elecciones y acciones, de nuestro tiempo, de nuestro trabajo, del cuidado de los procesos que se llevan a cabo, de nuestras relaciones profesionales y de nuestras emociones y pensamientos.
Los obstáculos a nivel profesional se presentan en toda la vida laboral y en cada reto que se asume. Lo importante es aprender a encontrar la salida más indicada para ellos.
Hay que considerar que el funcionamiento de las organizaciones depende en gran medida de la capacidad de su recurso humano para resolver situaciones y encaminar los objetivos propuestos, por eso cuando se cometen errores a nivel profesional no se deben tomar a la ligera. Si bien es cierto que el hecho de afrontarlos no garantiza una redención absoluta, sí implica un crecimiento profesional.
Por eso, aquí unos consejos útiles para tener en cuenta al momento de afrontar los errores con responsabilidad en el trabajo:
- Realice un plan de acción con el fin de enfrentar el problema y solucionarlo por completo.
- En caso de ser necesario, pida ayuda. No sea orgulloso, recuerde que todos en la vida estamos para aprender.
- Tenga en cuenta que la calma, la actitud y la madurez son factores determinantes y a la vez aliados al momento de enfrentar una mala situación.
- Deje el miedo de lado y cualquier sentimiento o pensamiento que evite poder analizar y actuar de manera objetiva en pro de una solución.
- Aprenda de los errores para no volver a cometerlos. Pero no se preocupe demasiado, seguramente seguirán presentándose.
- Evite tomar decisiones apresuradas si tiene alguna duda.
Por último, tenga en cuenta que no todo es absolutamente controlable en la vida. Existen circunstancias ajenas a nuestra responsabilidad de las cuales no podemos culparnos porque se salgan de control. Hay que tener muy claro qué cosas dependen de nosotros y cuáles no, para encontrar un equilibrio en nuestro entorno laboral.
CEO en Agencia de seguros y fianzas Fernando Zapón
7 añosExcelente artículo y bueno compartamoslo amigos ya que tiene un gran mensaje para todos