¿Cómo comunicar los #valoresintangibles de una compañía?

Quien no ha oído frases como:

“Nuestro valor son nuestros empleados”,

“El mejor lugar para trabajar”,

“Somos socialmente responsables”

y otras parecidas.

Todas ellas responden a los recursos intangibles de una empresa que suponen su valor diferenciador. Pero por el hecho de ser inmateriales, son más difíciles de percibir y comunicar.

Dar a conocer estos valores requiere una comunicación corporativa estratégica que traslade el mensaje de adentro hacia el exterior de la empresa, partiendo de la premisa del mayor compromiso posible de la dirección, plasmada en acciones que los difundan y consoliden.

Autenticidad en la defensa de los valores es imprescindible para que, en primer lugar, nuestro público interno los interiorice y los traslade de forma correcta y efectiva al exterior.

"Tus hábitos se convierten en tus valores, tus valores se convierten en tu destino".

Mahatma Gandhi

Para ello, antes de comunicarlos a nuestro público, es vital una comunicación interna fluida y clara que transmita la misión, visión y valores corporativos.

Por otro lado, fundamental no comunicar una cosa y hacer lo contrario, ¿os suena? Desgraciadamente ocurre muy frecuentemente y no hay nada peor para desmotivar a un equipo, que comprobar como la mayor parte de las consignas son de cara a la galería.

Una marca conseguirá una buena reputación si consigue conjugar con éxito las percepciones y la realidad, lo que decimos con lo que hacemos.

Se trata, por tanto, de generar a través de la comunicación un canal de difusión que parta de la dirección hacia los empleados, fluya de éstos a los clientes, de los clientes a los potenciales clientes y de estos últimos a la sociedad en su totalidad. De forma que, si apostamos por la comunicación eficaz, offline y online, obtendremos:

•   Interiorización del proyecto empresarial.
•   Motivación y mayor compromiso del equipo.
•   Confianza interna y externa.

Confianza, coherencia, empatía, son intangibles que coexisten con la Comunicación, otro intangible.

Pero entonces, ¿Por qué es tan importante la comunicación corporativa? El motivo es que se trata de otro intangible que gestiona el resto de intangibles, imprescindibles para construir una marca fuerte, que se diferencia por la fortaleza de sus valores y lo que aporta a la sociedad.

Por ello la comunicación corporativa debería tener, dentro de la empresa el mismo nivel que el de otros departamentos, ya que es imprescindible para alcanzar los objetivos estratégicos que ponen el foco en el cliente y en la motivación de su equipo.

Sin embargo, en la mayoría de las empresas, no se le presta la atención que merece, por dos motivos principales:

•      No se percibe el valor que aporta.
•      Se la considera un gasto.

En un entorno cada vez más interconectado, de una comunicación eficaz pueden depender el éxito de nuestro negocio y nuestra reputación empresarial.