¿Cómo funciona la iluminación de alto montaje?

Seguro has escuchado el término iluminación de alto montaje para nombrar a cierto tipo de luminarios industriales. Particularmente estos equipos se caracterizan por contar con componentes diseñados para garantizar su funcionamiento al ser instalados en estructuras arquitectónicas de altura elevada, aproximadamente seis metros o superior. 

También conocidos como luminarios de alta bahía, o high-bay en inglés, son fuentes luminosas de gran potencia con capacidad de iluminar grandes áreas a pesar de que la distancia entre estos y el suelo sea mayor.

Podemos encontrar gran variedad de usos para los espacios con estas características. Ya sean naves industriales, almacenes, plantas de manejo de alimentos, incluso algunos espacios de retail como supermercados, centros de convenciones o gimnasios, el objetivo será conseguir una luz general uniforme. 

Gracias a la ingeniería de producto y el diseño óptico que estos equipos suelen tener, ofrecen una iluminación homogénea y de calidad con mínimos niveles de deslumbramiento. 

Hasta hace algunos años, en las áreas industriales todavía podíamos encontrar antiguas tecnologías de iluminación como lámparas de descarga que de igual manera ofrecían una gran potencia y un consumo de energía medianamente moderado. 

Con la aparición de la tecnología LED, la oferta tecnológica de iluminación de alto montaje se incrementó para ofrecer productos que además aportan capacidades de atenuación, control y alta eficacia que contribuye al ahorro energético. La elección de los luminarios de bahía alta adecuados para cada proyecto dependerá de las necesidades de instalación, el uso del espacio, las características de las personas que lo habitan, la infraestructura y el nivel de consumo energético deseado.

Actualmente, encontramos productos tan variados como las necesidades de los usuarios: desde equipos diseñados para áreas especializadas que soportan la corrosión, altas temperaturas y humedad, hasta tecnologías innovadoras que responden a los ritmos circadianos y los ciclos naturales de la luz. Así, la iluminación de alto montaje se ha reinventado para dar un valor agregado a los espacios industriales a través de la luz.