¿Cómo gestionar el cambio en vuestra organización (y no morir en el intento)?

No es fácil identificar una gran idea de cambio para que nuestra organización alcance mejores resultados. Sin embargo, ponerla en marcha es aún mucho más difícil.

Por lo tanto, me animo a escribir mi primer articulo sobre la gestión del cambio tras constatar que muchas organizaciones siguen teniendo grandes dificultades en conseguir los objetivos que se habían imaginado a la hora de iniciar proyectos de transformación.

¿POR QUÉ FRACASAN LA MAYORIA DE LOS PROYECTOS DE CAMBIO?

Mis experiencias en diferentes sectores durante 18 años así como los numerosos estudios disponibles convergen hacia el mismo criterio: el factor humano es él que hace derivar un proyecto hacia el éxito o el fracaso. Hoy en día, la tecnología puede con todo lo que nos estamos planteando. A modo de ejemplo, todavía no hemos asistido a un proyecto de implantación masiva de ERP o CRM que se haya parado porqué la solución no podía adaptarse a los requisitos de la organización o por cualquier motivo técnico.

En definitiva, la gestión de cambio HUMANO es clave para el éxito de una transformación. Sin embargo, me he dado cuenta de que existe todavía un gran desconocimiento en esta materia. Y el coste de este desconocimiento para las empresas se valora en varios millones de euros. Solo por poner un par de ejemplos, he visto como un gran grupo automovilístico alemán gastó millones en implantar un CRM en España que tuvo que quitar finalmente dos años después por falta de aceptación y adaptación a las expectativas de los usuarios de la filial. O como un grupo español del sector teleco implantó un nuevo proceso y sistema para gestionar las operaciones en su mayor filial italiana, lo cual finalmente no se usó por motivos todavía inexplicados.

Pues no Harry, ¡no existe! Pero tranquilo, sí existen varios “ingredientes indispensables”.

Ahora mismo y como aperitivo, mencionaré tres de ellos:

1)    EL PROPOSITO DEL PROYECTO

Es la razón de ser de su proyecto, el ¿por qué? debemos luchar por ello.

Este propósito se formula mediante una narrativa cautivadora y entendible por parte de todos los implicados. Idealmente apela a los valores de las personas para emocionarlas.

En este sentido, considero cada vez más necesario que el propósito de un cambio abarque no solo objetivos económicos sino también sociales o medioambientales. De esta forma se alinea mucho más con los valores de las personas a implicar y demuestra la responsabilidad social del equipo de dirección.

Y ¿Cómo creamos un propósito potente? Os recomiendo mucho el uso de The Story Board Method para aprender a crear narrativas cautivadoras.

2)    LA CO-CREACIÓN

¿Algunos lectores vivieron un proyecto relevante impuesto “desde arriba” que les afecte en primera persona? ¿Qué reacciones tuvieron? A las personas nos gusta que se nos escuche, que se nos tome en cuenta.

Por lo tanto, una de las claves de éxito del cambio se resume perfectamente con esta frase:

Existen muchas oportunidades de hacer participe a los implicados en un proyecto: un brainstorming para definir un nuevo modelo, una toma de requisitos, la selección de un proveedor, una encuesta de clima, etc.

Y hoy en día las dinámicas de Design Thinking nos permiten dinamizar workshops de forma novedosa y más entretenida. Asimismo, las participantes no solo tienen la oportunidad de aportar sus ideas y nutrir el proyecto inicial, sino también de descubrir nuevas formas de hacer y pasárselo bien.

Las personas motivadas por el cambio y empoderadas por el proyecto pasarán a ser vuestros primeros embajadores.

3)    EL EQUIPO

Ningún de estos dos primeros ingredientes puede funcionar sin un equipo de proyecto bien diseñado.

Las personas que conforman el núcleo principal del proyecto deberían demostrar las siguientes actitudes: Cercano/a con los diferentes colectivos a implicar, Experto/a en su campo y sector, y Disruptivo/a para plantear soluciones a nuevos retos.

En este sentido, recomiendo la composición de equipos mixtos juntando personas de la organización del cliente con consultores externos.

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Por supuesto, existen unos cuantos ingredientes más indispensables para alcanzar el éxito del cambio que deseáis. Y sus dosis dependerán mucho del contexto, de la olla que utilicéis.

Si estáis actualmente encontrando dificultades en un proyecto de cambio complejo, o a punto de empezar uno nuevo, podemos conversar sobre cual es la receta que mejor se adapta a vuestro paladar… y ¡al de vuestros huéspedes!

¡Un abrazo!