Cómo trabaja la función ejecutiva en un cerebro cuando decide
La función ejecutiva es un conjunto de procesos que se dan en la parte prefrontal de nuestro cerebro y que se encarga de decidir la mejor salida a un problema.
Como dato adicional les dejo que la zona prefrontal de nuestro cerebro es la que se encuentra detrás del hueso de nuestra frente, por eso el nombre de Pre-Frontal, es de las que se desarrolla más tarde y se encarga de procesar de manera racional y planificada cada una de nuestras interpretaciones y respuestas a los estímulos del exterior.
Aquí un ejemplo que me permite explicarlo mejor.
En los cumpleaños con piñata se suele dejar para el final el ritual de romperla a palazos, un adulto monitorea el momento y lo dirige, hasta que por los golpes o por decisión del adulto se abre la piñata y cae sobre el grupo de niños con bolsitas plásticas en mano listos para recolectar el contenido.
Esta dinámica resulta apropiada para explicar algo como la “Función ejecutiva” porque los niños aún no la tiene tan desarrollada y una vez que la van desarrollando comienzan a tomar en cuenta otras variables.
En el mismo momento que se rompe la piñata ellos están debajo y como adultos podemos ver dos opciones:
1. Seleccionar en el menor tiempo posible los juguetes y dulces que más les gusten y que no estén maltratados para llevar a la casa lo mejor de la piñata, aunque sea poco.
2. Llevar todo lo que quepa entre las piernas y meterlo en las bolsas, para luego clasificarlo en casa, lo que irá a la basura, al pesebre de navidad y a la caja de juguetes favoritos.
La mayoría de los niños por no tener tan desarrollada la función ejecutiva suele, elegir la segunda opción, luego de unos años se darán cuenta de que en cada cumpleaños pasa lo mismo, se terminan llevando un montón de caramelos pisoteados que no les dejarán comer en casa o que siendo niño lo que más recolectó fueron pulseras y anillos color rosa.
De igual manera, pasan por alto que el recuerdo (cotillón) que les entregan al finalizar la fiesta les trae un juguete de mayor calidad y dulces que no han sido pisoteados.
Si pudieran activar su función ejecutiva podrían anticipar que obtendrían mayores beneficios del recuerdo de la fiesta (cotillón) que de la piñata.
Cuando somos adultos, desarrollamos diferentes niveles de análisis y es muy probable que ante una situación con diferentes variables hagamos una valoración de cada una y terminemos tomando la que nos genere mayor confort.
No sé si ustedes, como a mí, les da placer descubrir cosas como estas, que hace nuestro cerebro sin percatarnos. Estoy casi segura que si, ¿Saben por qué? Otro día les cuento, hay muchas curiosidades sobre nuestro cerebro que nos faltan por descubrir.
Fotografía: la imagen de este artículo es una composición propia con elementos extraídos de freepik.es. Foto de hombre creada por drobotdean e ilustración de Luce Avérous.