Cambio de paradigma: del cuidado frente a la enfermedad al cuidado de la salud

La filosofía del cuidado de la salud está en proceso de transformación. Estamos pasando de abordar las necesidades de la población enferma a mantener el bienestar de la población sana. Sin embargo, todavía consultamos a nuestros médicos cuando nos enfermamos en función de los síntomas visibles en lugar de monitorear de manera inteligible y continua los signos tempranos, o no tan invisibles, antes de que se vuelvan más graves. 

La atención médica requiere un modelo diferente, donde los datos vitales puedan transmitirse a equipos de atención integrados para que una red de expertos conectados (que sabrán el momento exacto y la estrategia para intervenir) brinden apoyo y recomendaciones sobre cambios en el estilo de vida o tratamientos a seguir. Ese es nuestro futuro.

¿Cómo vamos a crear ese ecosistema? ¿Qué tecnologías innovadoras apoyarán la reforma? ¿Cómo va a funcionar todo esto? Podemos mencionar al menos dos cuestiones fundamentales que pueden responder estas preguntas.

Medicina Transdisciplinar, ¿por qué son importantes los equipos de atención integrada ?

De acuerdo con el informe Global Health Care Outlook de 2018 realizado por la empresa Deloitte, una atención médica es inteligente cuando se brinda la atención adecuada, en el momento y el lugar correctos; donde los profesionales se comunican y usan de manera centralizada datos de los pacientes para diagnosticar de manera imperativa y precisa a personas de alto, moderado o bajo riesgo. 

Según Medteryx, sin estos nuevos modelos de atención integrada, el aumento de los ingresos hospitalarios y los costos per cápita se volverán insostenibles debido al aumento de las tasas de obesidad, enfermedades crónicas, el envejecimiento de la población y el rápido aumento de las tasas de enfermedades mentales.

El uso del soporte digital en el cuidado de la salud es fundamental para romper las barreras. Los "grandes datos" de los pacientes deben recopilarse y compartirse continuamente entre el equipo de atención integrada, proporcionando experiencia  y generando un monitoreo continuo de señales. Acá entramos en la segunda tendencia. 

Análisis de los datos, la segunda llave para impulsar este cambio

El análisis de Big Data es el uso de técnicas analíticas avanzadas contra conjuntos de datos muy grandes y diversos que incluyen datos estructurados, semiestructurados y no estructurados, de diferentes fuentes y en diferentes tamaños. 

Hoy en día, los datos de atención médica vienen en muchos formatos. Por lo tanto, necesitamos plataformas modernas que combinen todos los puntos de datos, los analicen de forma ágil, flexible y rápida, y les permitan a los profesionales de la salud tomar mejores decisiones.

El análisis predictivo de información puede promover la atención preventiva de diversas enfermedades. Al mismo tiempo, mapear los conjuntos de datos permite predecir afecciones que se intensificarán en áreas específicas, lo que facilita la planificación de estrategias de tratamiento o el almacenamiento de sueros y vacunas para mejorar la gestión de la salud de la población, por ejemplo. 

Una sociedad inteligente es una sociedad saludable, y una sociedad saludable hace un buen uso de sus grandes datos. 

Si bien los grandes datos son necesarios, no son suficientes. La simple acumulación de un gran conjunto de información no tiene ningún valor si los datos no se pueden analizar de una manera que genere conocimientos futuros sobre los que podamos actuar. 

Los datos sin procesar por sí solos no pueden conducir a una mejora sistemática, deben convertirse en información significativa. El liderazgo y la cultura institucional deben respaldar los esfuerzos de mejora, y los médicos y el personal de atención médica necesitan las habilidades para analizar y aplicar los datos. 

El concepto de priorizar nuestro bienestar en lugar de reaccionar a las enfermedades tiene mucho sentido y será una práctica normal dentro de 10 a 15 años. La dificultad radica en cambiar la mentalidad y reformular el sistema de atención médica. Lógicamente el COVID puso a la salud en el centro de la escena, y se generó una oportunidad para apalancar este cambio de paradigma. 

Todavía tenemos que trabajar en brindar un acceso amplio e igualitario a la atención médica. Solo así podremos garantizar tanto la innovación como la cobertura universal de todas las personas, para crear un mundo en el que todos tengan la misma y alta oportunidad de tener una vida saludable.