La salud poblacional y los datos, claves en la transformación del sistema de salud

La transformación del sistema de salud es un concepto amplio y complejo, que implica muchas áreas de actuación. Una de las principales es convertirlo en un sistema con enfoque de salud poblacional. Es decir, no solo reactivo ante procesos agudos, sino sobre todo proactivo en el mantenimiento de la salud, prevención de enfermedades y de episodios agudos. En el campo de la salud poblacional hay dos factores que juegan un papel fundamental: los datos y el comportamiento humano.

La recolecta y el tratamiento inteligente de datos puede trasladar numerosas oportunidades a los sistemas de salud. Por ejemplo, mucho antes de que muchas enfermedades llegan a ser críticas (es decir, costosas de tratar), se producen cambios dentro del cuerpo y a veces en el comportamiento de las personas. Estos cambios son datos. Nuestros cuerpos generan grandes cantidades de datos, que pueden ser recogidos y tratados para evitar que una enfermedad llegue a una etapa crítica y costosa. La tecnología hoy permite el tratamiento inteligente de todos esos datos, analizarlos y realizar simulaciones y predicciones de acontecimientos de salud.

Como paciente crónica que soy y defensora convencida de un sistema de salud público universal y de calidad del que me considero partícipe, me gustaría que fuese el sistema de salud público quien lidere el área de salud poblacional, y creo que todavía es posible. La realidad es que, si no nos damos prisa, otros lo harán por nosotros. Serán probablemente las grandes empresas tecnológicas no especializadas en el sector sanitario, quienes lanzarán soluciones enfocadas al usuario final, el ciudadano, pero que tendrán un impacto transformador grande en los sistemas sanitarios; primero en los privados, pero también en los públicos. Lo que muchos imaginamos como el Uber o Airbnb de la salud.

La semana pasada, una empresa de sistemas de información especializada en el sector salud, me invitó a su casa. Tras leer la “Carta de un paciente crónico desde el futuro”, en la que se habla de un registro de salud vital unificado y universal, querían mostrarme que parte de lo que se describe en esa carta era hoy posible.

Efectivamente, pude ver mucha funcionalidad ya existente e imaginar que añadir nueva es posible y no tan complicado. No me cuesta imaginar soluciones TICs, he pasado la mayor parte de mi carrera profesional en el sector de sistemas integrados de gestión empresarial. Un sistema de gestión de salud poblacional, no deja de ser un sistema integrado de gestión, con sus particularidades, como en otros sectores.

Pude constatar que existen ya soluciones que permiten absorber datos de diferentes historias clínicas, dispositivos, Apps y otros (si siguen ciertos estándares de interoperabilidad), que devuelven información de gran valor para el profesional sanitario, el gestor sanitario y para el propio paciente. Soluciones diseñadas para gestionar de forma inteligente la salud poblacional; contribuyendo a mantener la salud de los ciudadanos y a prevenir enfermedades. Entre otras cosas, permite a los sistemas sanitarios estratificar a la población por riesgos de salud, establecer programas de salud orientados a la prevención (cribado poblacional, acciones concretas de formación y otras), priorizarlos, programar y evaluar su efectividad. Un sistema que sugiere y permite a los equipos sanitarios planificar y llevar a cabo más y mejores programas de prevención a la población asignada, que les proporciona indicadores y herramientas de seguimiento. Y por supuesto, permite al paciente tener acceso a una historia clínica unificada (la mía se encuentra actualmente en 3 comunidades autónomas diferentes y en el extranjero), con todo lo que ello facilita, ya explicado en la “carta” anteriormente citada. Un sistema que sin duda permitiría evitar muchas duplicidades, contribuiría a la equidad, a un sistema de salud proactivo, al empoderamiento del profesional sanitario y del paciente, a mejorar la salud de los ciudadanos, a la sostenibilidad y a la transformación sanitaria…

¿Y si una solución parecida se implantase en España? Cada comunidad autónoma, cada sistema privado, seguiría teniendo su propia historia electrónica, pero se podría instalar una capa superior que permitiese absorber datos de unos y de otros y establecer algunos programas nacionales de salud, permitiendo que la gestión y la priorización, siga siendo autonómica. Implantar entre todos una solución de mercado estándar, disponible desde ya mismo, basada en las necesidades de muchos sistemas de salud, menos costosa de mantener e incorporar innovación; sobre la cual poder desarrollar, si es necesario, nueva funcionalidad a medida. Evitar así, que cada comunidad autónoma acabe optando por adquirir o desarrollar su propio sistema de gestión de salud poblacional. Estos sistemas ya existen, están ya instalados en otros países donde los grandes retos de la salud son también el envejecimiento y la cronicidad.

Supondría un gran avance y podría estar operacional en menos de 2 años. Permitiría dedicar los esfuerzos de investigación e innovación en el área de salud poblacional, a crear nuevas formas y aplicaciones de análisis datos, nuevos algoritmos de IA, programas de cambios de hábitos y otros.  Fomentaría que la industria y startups locales de tecnología de salud (dispositivos, APPs, IA…) sigan unos estándares que permitan integrar sus aplicaciones con esta plataforma y otras, prueben su validez a nivel local, pero abriéndoles posibilidades a un mercado global repleto de oportunidades.

Mirándolo desde el punto de vista del ciudadano, imagino un acceso base a la plataforma que le fuera proporcionado por el sistema de salud público y una serie de funcionalidades o aplicaciones opcionales a las que pudiese acceder a través de su seguro privado o adquiriéndolas directamente, si considerase que le aportan valor.

El tiempo aprieta, pero aún estamos a tiempo. En nuestras manos está…