“Caminante no hay camino, se hace camino al andar” (*)

En el escenario de incertidumbre que estamos viviendo actualmente, sin duda todos estamos con el ímpetu de que se reactive y se alcance los niveles de estabilidad social y crecimiento económico que se tenía antes de la cuarentena, lo cual no quiere decir necesariamente que vivíamos en el mundo ideal, pero sin duda era mejor de lo que se vive actualmente.

La realidad nos está demostrando que el impacto ha sido muy fuerte en todos los ámbitos: económico, político, de salud, educación y hasta en el estado emocional de la población. Tenemos zonas en nuestro país donde está incrementándose en mayor medida los casos de contagio donde el incumplimiento del distanciamiento social, el uso de mascarillas y el exhaustivo lavado de manos, lamentablemente está siendo un factor que acelera los casos de contagio. Si a esto le sumamos el importante porcentaje de asintomáticos, genera un escenario perfecto de continuidad de la pandemia con alcance a un mayor porcentaje de afectación a la población.

El proceso de concientización (impulsado por una permanente y adecuada comunicación y difusión al respecto, tomando en cuenta las diferentes realidades culturales de nuestro país) está demorando y esperamos que a medida que esto prospere, se irá controlando la pandemia; de no ser así, los angustiosos casos de hospitales llenos con capacidades excedidas, insuficiente abastecimiento de oxígeno y gente falleciendo antes de poder ser atendida, lastimosamente seguirá siendo una triste realidad.

¿El cumplimiento estricto de los protocolos de salud permitirían el normal desenvolvimiento de la actividad económica? la respuesta sería sí, pero no en el ritmo deseado o que se tenía anteriormente; probablemente, dependiendo de las características de cada uno de los sectores económicos (incluyendo la informalidad existente en nuestro país), sería a un ritmo de por lo menos la mitad al que se tenía. El caso de turismo sería un caso muy especial.

Hoy se ha acelerado la digitalización como un sustituto ideal a las transacciones de orden físico (pasarela de pagos de compras, pagos de servicios, solicitudes y pagos de préstamos, etc.) que también permiten la simplificación de tiempos en este tipo de acciones, contribuyendo a la dinámica que requiere la economía para recuperar el crecimiento, siendo un factor fundamental la conectividad (internet) al 100% en todo el territorio nacional para su alta efectividad.

Asimismo, las interacciones en los centros de trabajo bajo la modalidad de trabajo en remoto están cambiando, afectando los estilos de liderazgo en este nuevo escenario con un impacto directo a la cultura organizacional de las empresas, donde el papel de los líderes es fundamental para mantenerla y fortalecerla ya que es un componente importante del valor de marca.

En línea a lo comentado, el tema educacional de manera virtual es bastante complejo donde quizás la adaptación sea mayor a nivel universitario y de maestrías; sin embargo, a nivel primario y secundario se torna una camino difícil donde la creatividad del profesor y el apoyo de los padres es fundamental para un efectivo aprendizaje.

Adicionalmente, surge una oportunidad única en el aparato estatal en el aceleramiento de la simplificación, automatización y digitalización de procesos que permitan una coordinación y atención más fluida entre las entidades públicas; sobre todo, hacia la ciudadanía.

El círculo virtuoso de mayor velocidad de crecimiento económico bajo la realidad en nuestro país, podríamos decir que principalmente tiene dos importantes drivers: a nivel de exportaciones la minería representa aprox. el 60% de las mismas, por lo que es una prioridad el aceleramiento de los protocolos de salubridad y su dinámica productiva con el restablecimiento de todos las empresas conexas y dependientes de este sector. Otro driver importante es el consumo interno, siendo un factor clave las Cooperativas, Cajas, Financieras, y Bancos donde los negocios pequeños escalando hasta los negocios de mayor envergadura, deberán tener una cercanía y asesoría financiera de parte de las instituciones financieras con claras estrategias y planeamiento financiero acorde a la dinámica sectorial de cada uno de los negocios incluyendo las reconversiones que en muchas empresas ya se han venido dando.

Las medidas aplicadas para la reactivación de parte del Estado aún están en proceso de implementación que sumadas a las otras medidas especialmente de concientización en los protocolos de salud, son "pasos" necesarios para ir construyendo ese "camino" que nos permita vislumbrar la tan anhelada reactivación.

(*) Frase tomada del poeta Antonio Machado de su poemario Proverbios y Cantares