Choque generacional y la lockdown generation
Publicaba la revista Time la descripción de lo que es la lockdown generation, a saber, los jóvenes entre 15 y 28 años que debido a la pandemia se podrían estar enfrentando a la incapacidad de obtener una formación adecuada o de acceder a determinados trabajos, es decir, aquellos perfiles en prácticas o junior, que resultan esenciales para construir una carrera profesional. Supongo que desde las organizaciones y desde el propio sistema se trabajará en relación a ese talento, sin embargo, esta nueva etiqueta, me hace reflexionar sobre otros asuntos generacionales.
A menudo escuchamos “millenial” o “centenial” como conceptos que han de chocar o de enfrentarse a otros tales que “generación x”. Es sabido que, tradicionalmente, las personas prestan más atención a los problemas que a las oportunidades, cuando, desde el prisma empresarial, esta riqueza de edades y, por tanto, de experiencias, de conocimientos, de destrezas… es una gran oportunidad.
En muchos órganos directivos y en departamentos de gestión del talento, se ha tendido a obviar que una acertada ecuación de diferentes generaciones conseguirá exponenciar los resultados de cualquier empresa. Y esto ocurrirá, sobre todo, si se consigue plasmar esa diversidad intergeneracional en las altas esferas de la toma de decisiones.
Siempre he defendido que los órganos de gobierno tienen que ser un reflejo del conjunto de personas y del talento reinante en toda una corporación. En ellos han de estar aquellos que pueden fabricar las mejores decisiones, que sepan guiar a la organización en base a un plan estratégico y a un norte definido, y además, que sean capaces de controlar los ámbitos de riesgo en los que es factible que incurra la empresa. Para todo esto, se necesita un mix de personas que sepan responder a los retos que el futuro puede deparar.
En mi opinión, solamente hay un enfoque para abordar estos desafíos: desde una perspectiva generacional basada en la diversidad. Porque, no nos engañemos, en un órgano de gobierno es tan interesante sumar el “know how” de un experto en dirección estratégica de 65 años como incorporar la experiencia del emprendedor de 28 años que ha triunfado con dos grandes emprendimientos. Y es que a modo de conclusión, para una acertada gestión estratégica siempre, siempre, hay que enfocarse en cómo construir, sumando y nunca dividiendo.