Ciberseguridad en 2022

El gran uso de la tecnología nos deja cada vez más indefensos ante los ciberataques. Tras el estallido de la pandemia, la digitalización se aceleró y un gran número de usuarios se han visto afectados por los ataques. Un total de 281,5 millones de personas envueltos en una filtración de datos en 2021. Las empresas se ven involucradas en estas amenazas y les cuesta 1,79 millones de dólares por minuto.

El mercado de la ciberseguridad alcanzó un valor de 165.780 millones en 2021 y con un crecimiento del 8,2% interanual. Este será uno de los sectores predominantes en los próximos años ya que se estima que crezca un 14,87% durante el período 2022-2028, según la tasa de crecimiento anual compuesto (CAGR).

Siempre somos vulnerables ante las nuevas amenazas y existe una gran probabilidad que los principales riesgos giren en torno al ransomware (malware que inhabilita a los usuarios acceder a su sistema o archivos personales y, a la vez, demanda el pago de un rescate para volver a tener acceso a ellos) y los ataque a la cadena de suministro. El aumento de los ciberataques afectará al mundo de las criptomonedas, continuarán las fakes news y las campañas de desinformación y aumentarán los ataques de los deepfakes conforme mejore la tecnología y se simplifique su uso.

La seguridad maneja una gran cantidad de información y se basa en las alertas detectadas para poder actuar de la mejor manera. Los expertos aseguran que la combinación de la inteligencia exterior e interior es fundamental para reconocer cómo afectan este tipo de amenazas a las empresas. Una inteligencia mal enfocada puede ocasionar cansancio y fatiga. La utilización de esta inteligencia posibilitará la gestión de la seguridad a partir de ataques reales que se estén originando. Las principales tendencias de la ciberseguridad este año son:

•   Zero Trust: es un modelo que restringe la accesibilidad a la red solo a las personas que lo necesitan. Todo debe pasar por diferentes controles de seguridad para controlar el acceso y la verificación de la identidad del individuo. Sólo el 31% de las compañías mundiales tienen implementado este modelo.
•  Malla de ciberseguridad: una arquitectura que ayuda a proporcionar una estructura y postura de seguridad común e integrada para proteger todos los archivos. Sirve como extensión de ZTN y su objetivo consiste en dar un enfoque distribuido a la seguridad de las redes e infraestructuras. Además, se centra en la identificación de personas y sistemas en la red y, a la vez, se aleja del tradicional enfoque del perímetro.
• Security as a service: este modelo otorga un mayor equipo de expertos en tecnología con conocimiento de productos y procesos más amplios y diversos y reduce los costos. Estas soluciones suelen ser proporcionadas por un proveedor de servicios gestionados (MSP) o un proveedor de servicios de seguridad gestionados (MSSP).