Cinco enseñanzas de mis últimos Jefes

Definitivamente la experiencia profesional que se va desarrollando en el ámbito laboral es la mejor formación que uno puede tener.

En varias ocasiones durante mi vida profesional he sufrido del “Síndrome del Impostor”. A pesar de cumplir con la formación requerida para el cargo, haber atravesado diferentes entrevistas e incluso ser llamado directamente a formar parte de un equipo de trabajo; he tenido la sensación de no estar suficientemente preparado para cumplir con mis funciones. Esto claramente ha afectado mi desempeño y ha demorado un poco más mi proceso de aprendizaje. Sin embargo; este pequeño “defecto” me ha hecho ser más receptivo hacia toda enseñanza y estar alerta a todos los consejos que mis compañeros, colegas y jefes me brindaron. Personalmente estoy convencido de que todos podemos aprender cuando tienes a alguien que verdaderamente te desea enseñar. En todo lugar en el que he trabajado me he llevado varias enseñanzas que me acompañan hasta el día de hoy.

Desde mis inicios, tuve la oportunidad de trabajar con profesionales fascinantes y sus recomendaciones ahora forman parte de mi día a día. Les dejo algunos de estos “TIPS”, que seguro les serán de mucha ayuda en sus diferentes áreas de trabajo:

“¡In a Restaurant, No Empty Hands. Never.. Empty Hands!”

Realmente soy un apasionado por el buen servicio en un Restaurante. Un buen mesero, puede cambiar de manera asombrosa la experiencia de un comensal en cualquier establecimiento. Trabajé para un Chino-Canadiense que constantemente repetía : "En un restaurante, siempre hay algo que hacer; vajilla que retirar, una cuenta por entregar, desechos que levantar, siempre hay algo...siempre. Nunca un mesero puede andar caminando con las manos vacías.. ¡Never.. Empty Hands!" . Él también me dijo una vez, “No necesito alguien que tome pedido,(*Léase con acento chino) ¡I need a WAITER!”. Realmente el mesero es una parte esencial de la experiencia de un restaurante y hasta ahora en muchos establecimientos no se valora la importancia de una buena capacitación antes que una persona salga al servicio y se dedique solo a “tomar los pedidos”.

“Confía en ti y en tu trabajo”.

Marco Merino fue mi guía completa hacia la hotelería. Con él cursé: Introducción a la Hotelería, Zeus, Front Desk, Reservas, Guest Service, entre otras asignaturas, en dos semanas.

Nunca en mi vida había hecho llamadas internacionales; mucho menos, había redactado un mail formal “en inglés” a un cliente en Australia, informándole sobre un mal cobro a su TC y finalmente; jamás había intentado cobrar por casi un mes $ 1000.00 de un voucher firmado de una cuenta que no cobré, esperando que el Banco me dé la gloriosa autorización. (Dato a considerar: ¡Eran 3 meses de mi salario!). Marco tuvo que enseñarme a hacer todo eso y mucha más.

Cuando estaba a punto de ocupar otra posición y para variar sentía un poco de angustia y duda. Él me hizo recordar cómo inicié, todo lo que había aprendido y en lo que me había convertido. Esto me ha ayudado a seguir adelante y aceptar nuevos retos profesionales en mi vida. Valorando primero que nada, lo que soy.

“En ventas, el relacionamiento es lo más importante”

A Sandra Rodríguez le debo una gran parte de lo que sé en el ámbito de las ventas. El primer día de visitas junto a ella, tuvo que literalmente enseñarme cómo leer una dirección en Quito y de qué lado de la acera estaban los números pares e impares. Después de eso, no he parado de hacer visitas comerciales por Quito y otras ciudades durante varios años.

En mi primera semana, fuimos a visitar una agencia de viajes juntos. Nos recibió la gerente general y salieron a fumar un cigarrillo. Sandrita preguntaba por los hijos de la cliente, de los resultados de sus exámenes de salud, de su reciente viaje, etc. ¡Yo no entendía nada! Nunca hablamos de tarifas, del los servicios hotel, de los salones, nada de nada.

Años después; trabajaba para otro establecimiento y visité esta misma cuenta. Tenía un producto muy competitivo pero esta cliente ni si quiera consideró mi propuesta. Después de eso, comprendí las palabras que Sandrita me había mencionado después de nuestra visita aquel día: “El relacionamiento es lo más importante. Este es el nivel de confianza que necesitas lograr con tus clientes para no preocuparte por la oferta de tus competidores”

 “El dinero está en la calle”

Juan Carlos Cárdenas es posiblemente uno de los mejores y más experimentados vendedores que he conocido. Sus ilimitadas estrategias, técnicas y herramientas de ventas son realmente asombrosas. Era como trabajar junto al mejor Coach de Ventas de la ciudad y estar en un entrenamiento arduo y continuo día a día.

Todos los días; exactamente dos minutos después de nuestra reunión matinal. Preguntaba ¿Siguen aquí, a qué hora van a salir a visitar clientes?: “El dinero está en la calle”. Cada día que recuerdo sus palabras, entiendo cuánta razón tenía y que realmente “mientras más puertas golpeas, más posibilidades tendrás para vender”.

“Eh.. si pero diseñemos la estrategia”

Verónica Yagual es una estratega admirable. Como buena ajedrecista ella me enseñó a ver el panorama desde más arriba.

Junto a ella comprendí que, no solo hay que golpear puertas, sino hacerlo de una manera más estratégica y utilizar todos los caminos y herramientas disponibles para conseguir nuevas oportunidades de negocio.

Verónica me enseñó a dar un paso hacia atrás, analizar mejor cada situación y entender bien todas las puertas que se pueden abrir en una negociación.

Hay algo que todos tenían en común. ¡Eran unos “WORKAHOILCS”!  No deseo abrir el debate sobre si eso está bien o mal, pero definitivamente trabajé con los mejores y me enseñaron que siempre puedes alcanzar tus objetivos a través del “Trabajo duro y constante”.

Gracias infinitas.!!!

Si eres mesero, recepcionista o vendedor, estoy seguro de que alguno de estos consejos te podría servir. Seguro tú también tendrás enseñanzas de tus últimos jefes..

PD. Mi nueva jefa es una máquina "literalmente", tiene una energía inagotable. Seguro pronto les contaré algunas de sus enseñanzas.....