Coacheando decisiones inteligentes
Cuando se trata de tomar decisiones inteligentes, todos necesitamos ayuda. Si eso suena extraño o te parece demasiado pesimista, mira a su alrededor las decisiones que está tomando la gente.
Hay millones tomando decisiones sobre cosas que socavarán su salud y estado físico. Millones más están tomando decisiones que conducirán a tensiones económicas, gastos excesivos, presupuestos insuficientes, falta de ahorro e incluso la quiebra. Millones y millones más están tomando decisiones que conducirán a todo tipo de adicciones.
En realidad, la calidad de la toma de decisiones en el planeta Tierra es bastante mala. Y nos afecta a todos.
Sabemos de personas que tomaron algunas decisiones cuando eran jóvenes que les llevó a un mal matrimonio, una carrera equivocada, la ruina financiera, vivir en la calle por un tiempo, etc. Dicen: "Si tan solo lo hubiera pensado bien ..." o "si alguien se hubiera tomado el tiempo y déjame pensar las cosas en voz alta, podría haber escuchado las tonterías que estaba pensando..." No habría tomado muchas de las ridículas decisiones que tomó. No sería la persona que eres ahora si no hubieras pasado por algunas de las experiencias infernales que has pasado. Sin embargo, eso se acerca a justificar decisiones de mala calidad. El crecimiento personal no depende de decisiones estúpidas. Algunas personas nunca superan sus estúpidas decisiones.
¿Qué hay de tí? Un sesgo cognitivo y una falacia en la que la mayoría de nosotros caemos es reescribir el pasado para no aprender mucho de él. Algunas personas validan sus malas decisiones sin realmente considerar cuánto mejor podrían haber decidido. El hecho de que ahora tenga que vivir con las consecuencias de algunas decisiones que antes eran malas no significa que no valga la pena volver a tomar la decisión en su cabeza y "cambiar la historia personal" codificar una decisión de alta calidad en su memoria, como recursos para el futuro.
Luego están las organizaciones, empresas, corporaciones y gobiernos que toman decisiones realmente malas. ¡Pasa todo el tiempo! Con solo el 25% de las nuevas empresas que lo logran y sobreviven, alguien está tomando muchas malas decisiones, el 75% fracasa. Peor aún: el 87% de todas las fusiones corporativas fracasan. Alguien, o muchos, en los niveles ejecutivos están tomando decisiones realmente estúpidas. ¿Y qué diremos de los gobiernos y las malas decisiones, decisiones que pueden afectar negativamente a millones?
Como Coach Certfiicado desde hace más de 7 años, apoyo a personas a tomar decisiones inteligentes. Ccomienza cuando le pregunto a mi cliente qué es lo que quiere. Los que "no saben" obviamente no están preparados para tomar una decisión. Se encuentran en la etapa inicial de recopilación de información, de conocerse a sí mismos, de examinar el contexto de su vida. Luego están aquellos que piensan que saben lo que quieren, pero que rápidamente descubrirán: "No, no es eso". Prueban una cosa, luego otra y luego saltan a otra. Su metaprograma de opciones probablemente esté socavando su capacidad para tomar decisiones inteligentes.
Hay muchos clientes que no pueden tomar buenas decisiones porque no conocen sus valores o sus valores están en desorden. Ellos son los que van tras los pseudo-valores solo para finalmente descubrir que lo que pensaban que era importante no lo era. Otros afirman con exceso de optimismo que saben lo que quieren, pero eventualmente cuando se enfrentan al costo de esa decisión, no están listos para pagar el precio. Es demasiado, el riesgo es demasiado grande, los peligros dan demasiado miedo, por lo que retroceden.
Hay otros clientes que tienen claro lo que quieren, pero son demasiado activos, incluso reactivos, por lo que se lanzan a la decisión sin haber realizado la debida diligencia. No han pensado en lo que podría salir mal. Por lo tanto, no tienen planes de contingencia para lo inesperado y la vida está llena de eventos imprevistos; ¡el 2020 ciertamente nos lo enseña!
Cuando se trata de Coachear en decisiones inteligentes, como Meta-Coach, el primer paso es descubrir la forma de decidir de la persona. ¿Cuál es la estrategia de mi cliente para tomar decisiones, cuáles son sus valores, qué estándares y medidas utilizan, en qué metaprogramas confían o en los que confían demasiado? ¿Cómo se relacionan con la decisión? ¿Son decisivos como persona o indecisos? ¿Aceptan el riesgo o evitan cualquier riesgo? ¿Son optimistas o pesimistas sobre una decisión determinada? Les recomiendo que recopilen información para modelar su estrategia actual de toma de decisiones. ¿Qué grandes decisiones han tomado? ¿Qué decisiones realmente malas han tomado? ¿Cómo hicieron cada una de estas categorías?
Debido a que el coaching consiste en desafiar a las personas a dar un paso al frente, convertir sus sueños y significados más elevados en sus mejores actuaciones, en el corazón del Coaching está habilitar, empoderar y mejorar las competencias de toma de decisiones de una persona. Hacer un cambio es una decisión y mantener el cambio de manera que se mantenga, eso requiere un conjunto continuo de decisiones.
¿Estás listo(a) a tomar decisiones a tu favor? Contáctame! Hablemos de tu futuro financiero y te ayudaré a crear un ahorro sistemático que te ayude a lograr tus metas.
* Artículo adaptado de la publicación Morpheus #52 2020, autor: L. Michael Hall PHD