Es casi una práctica obvia y común que todo tipo de empresas u organizaciones tengan canales de comunicación externa 3.0, que les permitan estar más cerca de los clientes, escucharlos y atenderlos personalizadamente. Pero ¿qué pasa cuando la institución da una apuesta hacia la transformación digital de la comunicación puertas adentro?
Últimamente he tenido la oportunidad de probar la utilización de herramientas digitales como medios de comunicación interna y me he llevado una grata sorpresa: sin duda se trata de una trasformación cultural muy provechosa.
Es cada vez más frecuente ver como voluntaria e instintivamente en las empresas y organizaciones de todo tipo, los colaboradores utilizan las facilidades de las herramientas como WhatsApp para mantenerse en contacto, resolver situaciones simples, reportar incidentes o el cumplimiento de actividades, entre otros. Es decir, aprovechar aquello tan bien posicionado en su vida personal para que su trabajo sea más eficiente y eficaz.
Hace casi un año, Facebook lanzó su plataforma WorkPlace, una aplicación digital con todas las características de una red social (chats, posteos, eventos) ajustada al mundo laboral. Otras plataformas similares son Hola, Yammer y StarmeUp. Esta última permite que los colaboradores puedan reconocer con estrellas las acciones positivas y el cumplimiento de los valores corporativos de otros miembros de la organización.
No es de sorprenderse que los primeros usuarios de estas plataformas sean empresas que le han apostado a la importancia de crear relaciones fuertes y duraderas con sus colaboradores y que, además, tienen como atributos de identidad la innovación, componente indispensable para la transformación digital.
Es por eso que antes de subirse al tren de las aplicaciones móviles, chats corporativos, entre otros, uno de los temas claves es comprender que la transformación digital en la comunicación interna se trata de una transformación cultural y eso implica un cambio en la manera de hacer las cosas. Hay que saber quiénes son nuestros colaboradores, cómo entienden su forma de trabajar y cuáles son sus necesidades comunicacionales. Las máximas de la comunicación segmentada por públicos también son esenciales para planificar la comunicación interna digital: ¿Dónde están mis públicos? (realmente están en las redes sociales) para escoger un canal idóneo. ¿Qué les quiero decir? para construir el mensaje y ¿Cómo lo voy a hacer? para definir las tácticas.