Conductas que hacen camino. La gobernanza en la empresa familiar

Los proyectos empresariales, además del componente económico, cuentan con un propósito. En el caso de las empresas familiares a este propósito, se le suman la historia, el pasado de toda una familia y honrar un legado, con la vista puesta en el futuro.

La conexión entre familia y empresa, transmitida adecuadamente entre generaciones.

Esta realidad hace que sean proyectos con “mayor vida”, enraizados con el entorno donde se ubican y ejercen su actividad, lo que hace que su compromiso con la sociedad que les rodea sea singularmente mayor.  Muy diferente, por ejemplo, al de las que se conoce como “las siete magníficas” de la bolsa en EEUU y que esta semana presentarán resultados o las grandes multinacionales industriales que, en Europa, padecen tiempos difíciles.

Hoy el gigante automovilístico Volkswagen, primer fabricante europeo, anuncia que planea cerrar 3 plantas en Alemania, miles de despidos y bajadas de salarios del 10% en lo que se han calificado como “recortes históricos”. La industria de Europa sufre y seguirá haciéndolo. Por eso,  en tiempos de crisis y cambios como los actuales, es más importante aún acertar en la transmisión del binomio empresa y familia.

Son el 85% de nuestras empresas 

Las empresas familiares representan cerca del 85% del conjunto del tejido empresarial. En el caso del País Vasco, además, generan en torno al 55% del empleo y más del 40% del valor añadido. Son empresas que se caracterizan por sus valores arraigados – ahora que todo el mundo habla del término - así como por su compromiso con la sostenibilidad (ASG) y gestión diferenciada. 

Acaba de celebrarse el XXVII Congreso Nacional de la Empresa Familiar, en el que se ha reafirmado la vocación de estas empresas “por crear impacto positivo para construir un futuro más próspero y equitativo”.  Para destacar que “el arraigo y el origen no limitan, sino que potencian la competitividad” empresarial.  

Caminante no hay camino. Se hace camino “con la gobernanza” 

Para lograr crecer y ser más competitivas hay que acertar con el camino. Gobernanza es elegir el camino correcto para ello, además de tomar y hacer cumplir las decisiones adecuadas. Es la interacción permanente sobre las normas y acciones en las que estructuramos las empresas como organizaciones vivas, con su legado y valores. 

Para asegurar la continuidad de las empresas familiares estas deben acertar en el planificación y reflexión, sobre la gobernanza familiar. Debe realizarse a tiempo. Cuando la situación de la empresa es buena. Sin embargo, esta sensibilización, a menudo queda desatendida en favor del negocio y puede conllevar a la pérdida del “alma” que hace diferente al proyecto. 

Compañeros de viaje en la transmisión entre generaciones 

Un reciente informe de KPMG respecto “al legado y la empresa familiar”, basado en 2700 encuestas realizadas a líderes de empresas familiares de 70 países, destaca que el 42% de las empresas que valoran su legado, obtienen un alto nivel de gestión. También que los CEOs de la generación baby boomers otorgan mayor valor al compromiso y continuidad familiar, en comparación con la visión de los millennials o generación Z, que tienden priorizar su gestión y legado vinculándolo más a lo social y la sostenibilidad. Acertar en la transmisión, es fundamental. 

Con ese objetivo de formar y preparar a las generaciones venideras de las empresas familiares, Aefame , la asociación de empresas familiares de Euskadi creó hace unos años la iniciativa “Kimua” como símil de los “nuevo brotes que le salen a la encina”. Las nuevas y nuevos `retoños´.  

Para que este proceso sea exitoso, resulta necesaria la intervención externa. Guiará en el camino y asegurará la confianza entre todas las partes. En Elkargi llevamos más de dos décadas emprendiendo este camino con cientos de empresas familiares: diagnóstico, identificación de riesgos y plan de acción. Es la mejor fórmula para fortalecer la cohesión entre familiares, garantizar la continuidad de la empresa y continuar haciendo historia familiar. 

Seguimos cerca de la empresa familiar... To be continued.