“CONVERSEMOS CON ÉL...”
Dos jóvenes incrédulos discutían sobre la resurrección de Jesucristo. Cada uno de ellos intentaba mostrar al otro el motivo por el cual no creía que tal hecho hubiera acontecido. En ese momento pasaba Deacon Myers; uno de los jóvenes de forma sarcástica lo llamó y le dijo: Habla, Deacon, por qué tú crees que Jesús resucitó. Oh, Bien, dijo Deacon, "Una de las razones es que hoy yo conversé con Él por media hora, esta mañana"
Siempre debemos hacer lo correcto y dar testimonio que hemos nacido de nuevo. No perdamos el tiempo tratando de probárselo a los demás. Hay que conocer la diferencia entre tener paciencia y perder el tiempo. En una crisis, golpeamos una pared con la esperanza de transformarla en una puerta, sembrando dudas en nuestros corazones. Casi siempre, nos sentimos frustrados y recurrimos a personas que nada pueden hacer por nosotros y ninguna respuesta tienen para darnos. si nuestro Señor vive y oye nuestra voz, ¿no es mejor ir directo a Él? ¿Crees qué Jesús resucitó? ¿Quieres tener una vida con sentido? ¡¡ HOY, CONVERSEMOS CON ÉL...!
"HE AQUÍ SE PARARON JUNTO A ELLAS DOS VARONES CON VESTIDURAS RESPLANDECIENTES; Y COMO TUVIERON TEMOR, Y BAJARON EL ROSTRO A TIERRA, LES DIJERON: ¿POR QUÉ BUSCÁIS ENTRE LOS MUERTOS AL QUE VIVE? NO ESTÁ AQUÍ, SINO QUE HA RESUCITADO" Lucas 24:4-6.
Pr. Elías Bermúdez Guillén.