Creación de Contenido: Los Nuevos Obreros de la Información
Es un dogma de fe al hablar de contenido en medios sociales que hay una pirámide que describe la relación entre el consumo, distribución y creación:
- 90 leen
- 9 comentan o comparten
- 1 crea
En general podemos tomarla como razonablemente cierta. La cantidad de creadores siempre es relativamente pequeña en proporción a los consumidores. Esto parecía funcionar cuando solo escribíamos individuos o pequeños grupos. ¿Cómo se altera el sistema cuando la economía digital gira en torno a las vistas, visitantes e interacciones? ¿Qué sucede cuando marcas, negocios y agencias empiezan a aparecer en la ecuación? ¿Qué pasa cuando la cantidad de contenido necesaria para mantener ese ecosistema andando se vuelve enorme y la demanda de contenido fresco y original empieza a dispararse hasta niveles astronómicos?
¿Qué pasa cuando la creación de contenido se vuelve el equivalente digital de una línea de producción en vez de un taller artesanal? ¿Qué sucede con ese único elemento dentro de la pirámide que crea?
He observado que tanto agencias como Community Managers individuales, tienen como función primaria la de producir (maquilar) contenido diariamente para sus clientes. La consigna es X piezas de contenido al dia para Facebook, X tweets diarios para estas cuentas, X imágenes para Instagram, X pins en Pinterest, X posts para el blog. Con frecuencia la calidad es secundaria o irrelevante. El punto es que haya una producción diaria, que se vea que hay actividad todos los días. En el mejor de los casos se espera que los resultados sean que haya evidencias de interacción: Likes, retweets, shares, comentarios.
La necesidad de crear contenido en cantidades industriales ha vuelto a la que antaño podríamos llamar la clase creadora de la web en los obreros de la Era de la Información.
Bloggers, fotógrafos, editores de video, músicos, curadores de contenido y demás ahora somos mano de obra especializada. Los editores toman el lugar de los jefes de máquina o supervisores de línea. Y abajo de esto hay miles de obreros produciendo los millones de objetos de contenido que marcas y organizaciones requieren para poder mantener una presencia en los medios sociales.
No estoy seguro si esa era la idea que teníamos cuando decidimos empezar a publicar cosas. Por supuesto que sigue habiendo material muy valioso, pero no suele habitar los sitios grandes y las cuentas de marcas. Ahora se halla en los blogs más personales o sitios pequeños que no requieren visitas o publicidad para subsistir o que no tienen fines de lucro. En algunos casos, se hallan como parte de la producción de sitios grandes que pueden darse el lujo de que el contenido chatarra patrocine mayor calidad ocasionalmente.
Esto crea la paradoja de que en algún sentido el contenido se ha devaluado por la necesidad de mantener andando la máquina de los medios sociales, que ya hemos dicho, es una bestia hambrienta que requiere muchísimo alimento para funcionar. Pero por otro lado, el contenido de genuina calidad tiene cada vez más valor pero es más difícil de hallar, aunque siga existiendo en cantidades apreciables, por la enorme cantidad de contenido chatarra que lo oculta y ocupa la atención de la mayoría del público. Extrañamente el costo del contenido de valor aumenta tanto quese vuelve prohibitivo producirlo a los ritmos necesarios para mantener el proceso andando. En realidad,es más conveniente producir material de bajo costo porque la mano de obra es más barata.
Crear nunca fue tan fácil. Y por lo mismo nunca fue tan insignificante.
Cualquiera puede tomar una foto. Cualquiera puede escribir. Cualquier puede hacer un video.
No cualquiera puede hacer algo que valga la pena ver.
Siempre va a haber contenido bueno y contenido malo. Y los creadores de ese contenido bueno cada vez tienen más valor. El problema es que no siempre se entiende esto y por tanto, no se traduce en una manera diferente de hacer las cosas. Esto sucederá hasta que cambie la visión y dejemos de perseguir objetivos que no sirven a nadie y que perpetuan la devaluación tanto de contenido como de creadores. No es un problema sin solución, pero no es una solución fácil.
Pero es algo que valdría la pena hacer.
Sigo escribiendo.
¿Tu creas contenido? ¿Cuál es tu visión de esto?